Capítulo 12: Camino Secreto

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Un hermoso tapiz lila, un cuadro de una bailarina pintada por mamá, una gran cama de madera con una colcha rosa y muchas almohadas. En la esquina, una casa de muñecas con la colección completa de muñecas barbies. En el closet, acomodados en estanterías habian muchismos juguetes, mis juguetes, todo se encontraba ahí, toda mi infancia que creía perdida.
Se que suena sentimental y toda la cosa pero no pude más que caer de rodillas en el suelo y mirar estupefacta. No era posible, tenía que ser un sueño, me había quedado impresionada al grado de no saber reaccionar, sólo me levanté y bajé a ver la televisión. Mi tía tambien se sorprendió, lo noté en su mirada, creo que no esperaba esa reacción en mi, probablemente creyó que iría corriendo a abrazarla y agradecerle, y enrealidad es lo que hubiera querido hacer de no haber sido por mi inconsciente estado de shock. Ni un reproche, lágrima o incluso palabra salio de ambas, mi tía se fue a dormir y mas tarde caí rendida en el sillón de la sala, nisiquiera quise ir a la habitación. En mi sueño caía y caía y caía si más por un oscuro vacío, por un lugar sin principio ni fondo, como el nudo en mi garganta que aún yacía sin desenredarse . Esa misma sensación horrible que sentí cuándo falleció mamá, ese mismo shock que me atormentaba.

Al día siguiente no pude hacer mucho, no me encontraba en buen estado, estaba muy cansada, incluso acabando de despertar. Me levanté del sillón y me dirigí a la cocina, busqué entre las puertas de la alacena y tomé el cereal, cuándo voltee mi tía se encontraba detrás de mi. Me dio un susto tan grande que di un pequeño grito y el cereal cayó de mis manos.
-disculpa Fernanda, no quise asustarte
-si, no importa
No sé porqué, pero me entró un tremendo sentimiento de culpa, tal vez fué que tiré el cereal de mi tia... pero se que enrealidad es la culpa de no haber podido enfrentar la situación de anoche, creía que mi padre habia vendido o tirado mis juguetes, pero los tenia ella, ¿porqué mi tía? Si mi padre no le dirigía la palabra,¿cómo habian llegado mis cosas a manos de ella? ¿acaso mi padre se las..? No, imposible. Entonses mi tía se empezó a alejar de mi...
-Tía
Inmediatamente volteó
-si querida
No lo dijo en forma de pregunta, sino como si me hubiera leído el pensamiento y entendiera perfectamente la sensación que me ahogaba por dentro. Entonses sin poder contenerme más, corrí a abrazarla, y lloré como una verdadera chillona, sin pena de nada.

-Fer, las cosas malas que haz pasado, no han sido culpa tuya, no te castigues por eso.

-Tía no entiendes, no soy la única que sufre en el mundo, y actúo como si lo fuera, soy una egoísta

-No eres egoista, te pasó algo horrible, y aunque ciertamente no eres la única que sufre en el mundo, sufres, y eso es algo que nadie puede objetar

-ya no quiero sufrir, ya no puedo, quiero volver, al pasado, cambiar todo lo que pasó

Entonses mis lágrimas se convirtieron en sollozos, y fui cesando lentamente hasta que tuve las fuerzas de volver a hablar

-Gracias, tía, en verdad, gracias, se que me quieres y a veces te quisiera ver como una persona que me cuida por lástima, pero se que no es así, y gracias por la habitación tambien, me encantó es sólo que...

-lo se linda, a mi no me ofendió ni nada, de hecho, no esperaba una reacción positiva de
tí exactamente, sabía que te traería recuerdos, pero aun así acepté

-si, muchos recuerdos de hecho...espera ¿qué? Como que " aún así acepté"?

-si, no fue idea mía exactamente

Me quede callada, no quería preguntar quién, porque la respuesta era obvia y abrumadora, tendría demasiadas preguntas que nisiquiera querría mencionar, pero sin darme cuenta salió un murmullo de mi boca

-Papá

-si, y entiendo perfectamente si deseas hacerme alguna pregunta

-no, bueno sí, pero no en éste momento tía- dije evadiendo mis sentimientos que estaban hartos de preguntas y lo único que me pedían eran respuestas

-está bien, vamos a desayunar entonses

Así, como si nada hubiera pasado, tuve que desayunar,
como si no supiera que casi me desmallaba por todo.

Pasó el día y opté por adornar el árbol de navidad, mi tía no se había molestado en esperarme a comprarlo, pero yo deseaba decorarlo. Comencé con las esferas, seguidas por las luces y otros adornos, al final puse la estrella en la punta. Miré el árbol y noté una gota de sudor en mi frente, La seque y noté mi respiración acelerada, me había cansado con sólo adornar un árbol, que demigrante.
Fui a mi habitación nueva "de verano" si se puede decir así. Me bañe y después me puse una blusa y una falda que porcierto nunca uso. Tomé mi teléfono y abrí mi Facebook para ver si alguien se había acordado de mi.

4 mensajes de May

Hola fer, ¿cómo te encuentras?

Se que pasarás la navidad con tu tía, suerte con ello

Yo me iré a Cancún con papá
:P ¿genial no?

Feliz navidad adelantada, besos y nos vemos en el colegio
Enviado a las 8:45 am

Sonreí

Gracias May, feliz navidad para
ti tambien, gracias por escribirme, nos vemos y suerte en Cancún

Enviado a las 5:00 PM

Deje mi teléfono y me tumbé en la cama boca arriba, mire a la pared y vi algo extraño, parpadee pero seguía ahí, en la pared había una silueta con forma de puerta, me acerqué y sin pensarlo 2 veces, empuje hacia dentro de la pared que para mi sorpresa se abrió, voltee a ver la puerta de la entrada de mi cuarto y me dirigí a ella para cerrarla con llave, no sabía a donde me llevaría esa "puerta", pero no deseaba que mi tía se diera cuenta. Aunque probablemente haya sido otra sorpresa de mi tía, ella no era de esas personas que se quedaban calladas mucho sin mensionar una sorpresa.
El pasadiso estaba oscuro y húmedo, y en ese momento me arrepentí de no llevar una lámpara y un sueter. No sé cuanto tiempo caminé, creo que fue mas de media hora porque mis pies descalzos y ahora humedos estaban cansandose. Entonses, una luz cegadora me invadió, solo rogaba que no fuera mi muerte, pero no lo era, en poco tiempo, al acostumbrarme a la nueva luz, noté que me encontraba en un cuarto, era de madera, había una cama individual con un cobertor hecho con retazos de telas viejas. Una mesita de noche con una vela y un vaso con agua. Tambien habian pinturas colgadas y otras recargadas en la pared, un caballete de madera y muchas pinturas, en la esquina, un ropero que al abrir contenía varios abrigos y pantalones colgados, y en el piso del ropero, varios pares de botas de invierno. Cuando voltee al lado del caballete note que había una puerta, supongo que llevaría al resto de la casa. Caminé hacia ella y al intentar abrirla me fue imposible, entonses localize una ventana circular en la parte de arriba de la habitación, tomé el banco que estaba junto a las pinturas, me subí y con la punta de mis dedos, la abrí, una ráfaga de viento salió e hizo cerrar la puerta del pasadizo por el que entré. Una ola de pánico me invadió. Me bajé del taburete e intenté abrir ambas puertas, grité y golpee a ambas con muchísima fuerza pero fue envano. Me deslize por la pared hasta quedar hecha un ovillo en el piso, abrazada a mis rodillas empeze a sollozar,
-soy una tonta, soy una tonta, soy una tonta, cómo pude ser tan estúpida, nunca podré salir de aquí, moriré de hambre, moriré, moriré.

Mis sollozos aumentaron y mis lagrimas resbalaban por mis mejillas cayendo sobre mi regazo. Me levanté e intenté mirar por la ventana, el problema es que no alcanzaba. Busqué dentro del ropero a ver si había algo que me diera altura, pero no vi nada, entonses vi que algo sobresalía debajo de la cama. Me asomé y ensanché mis ojos, habia un cajón con muchos, no muchos, muchisimos libros perfectamente ordenados.
Tome algunos y los apilé sobre el banco, al subirme logré mirar por la ventana. Habia un hermoso prado verde, y al fondo un frondoso bosque, y junto al bosque había un... ¿un chico? Me puse de puntitas para poder mirar mejor a aquel misterioso chico pero en ese momento uno de los libros se cayó derrumbando la pila de éstos en los que estaba parada. sólo logré sentir que caía,caía, y un sonido sordo se quedó con mi conciencia.

Todavía noDonde viven las historias. Descúbrelo ahora