CAPITULO 3

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Me encontraba algo asustada, mi respiración era algo pesada,  la curiosidad me estaba invadiendo por completo, "mirando fijamente por la ventanilla del vehículo, fue una manera de distraer un poco mi curiosidad. Mirando hacia el horizonte lejano, el gran paisaje de la ciudad capital, por la ventanilla de este vehículo. las manos me sudaban un poco, además que mi ritmo cardíaco era muy acelerado. Debido a la incertidumbre del momento, no sabía a dónde me llevaría la señora Barbara.

Intentaba con el reojo de mi mirada observarla, con la intención de adivinar qué haría está señora en este momento de gran tensión para mí, buscando así tratar de predecir sus pensamientos, en un intento desesperado de saber que haría o no era mujer.

—pensé que íbamos a comprar ropa— en primer momento está idea paso por mi mente fugazmente.

el olor de cigarrillo era muy intenso en este vehículo, desde que nos subimos ella no paró de fumar.

— ¡Dios mío, esta señora fuma demasiado! —tan solo podía mirarla de reojo, una mirada profunda y penetrante, pude así deducir que era claro que ella estaba pensando en algo, no cruzo casi ninguna palabra conmigo, solo ocasionalmente para preguntarme si estaba bien o si quería algo.

A los pocos minutos de estar manejando por la autopista, el sol estaba golpeando mi rostro, aquello me causaba cierta incomodidad, debido a que los rayos solares golpean directamente en el asiento de copiloto así que decidí voltear mi rostro hacia un lado, cuando mis ojos se les paso el destello de sol que los había golpeado, una revelación llegó a mi mente no podía dejar de pensar, en la vida que Yesika.

Aunque estaba viviendo una nueva vida como " Victoria" la cual tenía una carrera en el mundo culinario que se encontraba en un ascenso sin medidas, esta nueva existencia que tenía había dejado atrás, los  pecados de " Yesika" y su forma de ver el mundo, debido a la necesidad en su infancia, la cual la empujaron a las manos de los demonios que hoy deseaba con todas mis fuerzas destruir a como dé lugar.

Aquella vida que deje en el puente el cual deje mi antigua existencia me sumergieron  en una espiral autodestructiva, de la cual no pude escapar, cegada por el amor que tanto anhele y que encontré en los brazos de otra joven, el cual ella  rechazó, dieron como resultado este final esperado.

Aquella vida la cual dejé atrás en el vacío de aquel puente la cual mientras la suave brisa me arrulló en mi tristeza en ese lugar singular esa noche y aquella brisa en particular, llenaron mi corazón y conciencia de verdades y realidades absolutas. La misma realidad y verdad que hoy me impulsan a ser la mejor de las mejores, con el fin absoluto de destruir a estás dos familias de una vez por todas.

La revelación sufrida en aquel instante tenía un propósito en particular, mientras observaba la autopista, el pasar de los autos me hizo reaccionar, mi objetivo era claro, así como la historia de mi antigua vida, existían muchas similitudes que no podía pasar por alto. Aquellas familias por generaciones habían desgraciado la vida de mujeres inocentes, era el momento de poner un freno a esto, por primera vez en mi vida, sentía que tenía el control de mi existencia, además de que tenía sobre mis hombros la carga de hacer las cosas distintas, no tanto para mí, si no para aquellos que me rodean, la vida jamás me mostró el propósito de mi destino, pero la muerte con sus manos frías aquella noche me había otorgado una segunda oportunidad.

Entre Los Pereira y los Castilla, no existía chef en ese tiempo que los igualará, desde antes de yo nacer aquellas familias habían creado por separado un renombre único y sin igual, con un imperio sexual en las sombras, ellos usaron la inocencia de muchas jóvenes para satisfacer su ego. El arte que ellos usaban como pantalla, sería su caída, "después de un gran suspiro encontré fuerzas en mi corazón para continuar esta lucha " .será un honor acabar con su imperio y demostrarles que existe alguien mejor que ellos en el mundo culinario.

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