3.- Encuentro

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*Los personajes de la saga Twilight no me pertenecen*
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La universidad estaba ubicada en una pequeña ciudad al norte de Minnesota, tenia al rededor de 5.000 habitantes y una temperatura que ronda entre los -9 y 15 grados Celsius, la ciudad se llamaba Braumont, donde su gran potencial era la pesca, su ex mina que ahora era solo turística y su universidad, según lei en internet. Antes ni sabia que existia aquella ciudad y mucho menos su universidad por lo que no fue parte de mis opciones cuando era humana.

Pero ahora que ya estaba matriculada aqui y tenia toda esa información, entendia perfectamente porque Edward eligio este sitio para estudiar, era una cuidad pequeña, tranquila y con un clima frio, ideal para nosotros y asi guardar las apariencias.

Me hospede en una hostal y ya que eran pasado las 10 de la noche no tenía como buscar algun sitio de alquiler, ya que Edward en su carta me habia dicho indirectamente que viviriamos separados por lo que debia buscar un sitio cercano a la universidad o solicitar una de las habitaciones del campus, lo que siendo lo que soy, era mala idea. Pero tenia una limitante, tenia unos pocos ahorros propios, ya que no me sentia con el derecho de usar las tarjetas con el cupo a carga de Edward, si iba a vivir separada de él también lo haria con mis gastos de él.

Lo extrañaba y mucho, pero no podia evitar emocionarme por esta nueva aventura, aunque me hubiera gustado tenerla a su lado. Me sentia como divorciada, tenia su anillo en mi mano, podia leer el mensaje de "juntos por siempre" dentro de él y no podia evitar entristecerme, pero debia seguir adelante, no me podia sumergir en esta incómoda cama por la eternidad, por lo que dandome ánimos tome una cadena que me habian regalado hace unos años y pase el anillo por la cadena, para luego ponermela en el cuello tapandola con mi camiseta, si queria hacer las cosas bien, entonces yo también debia ser parte de esto, por lo que cambie mi anillo de mano, ahora ya no sería una mujer casada, solo comprometida, si es que el novio aun lo quiere.

A las horas sali a tomar aire y camine por la pequeña ciudad en la madrugada, parecia una ciudad desierta. Revise los alrededores hasta encontra algun bosque cercano y conocer que animales viven alli para cazar.

A las horas de haber cazado un ciervo, me hacerque a un lago cercano el cual colindaba con una pequeña cascada. Me saque la ropa y me meti semi desnuda a bañarme en la helada agua para despejar mi mente, nade cuanto quise con tranquilidad siendo testigo solo la luna llena de mi actuar. Pero repentinamente senti un aroma, similar al mio, mire para ambos lados hasta que a lo lejos vi unos ojos rojos, los cuales en un pestañeo se acercaron a unos metros de mi, específicamente a la orilla del lago.

-wow! que espectaculo!-dijo una vampira muy alta de pelo liso rubio hasta la cintura, sus facciones eran muy finas y tenia una mirada divertida. Parecia una chica un poco rebelde porque usaba jeans, polera blanca, chaqueta de cuero negra rasgada y zapatillas blancas.
Rápidamente corri a donde estaba mi ropa y me la puse sin importar que aun estaba mi cuerpo mojado.

-Que quieres?-dije molesta
-Que maneras son esas de saludar hermosa dama..-hablo burlesca la vampira con una sonrisa de medio lado.
-No te conozco asi que no te debo nada-tome mis zapatos para caminar descalza y me marche de alli, pero a mitad de camino vuelvo a sentir a aquella vampira por lo que paro abruptamente.

-Que quieres?-dije aun mas molesta
-Se te olvida esto-y levanto su mano donde tenia mi sosten, me sorprendi, mire mi pecho, diablos! estaba sin sostenes y por la humedad se traslucian un poco mis pezones, por lo que los tape con un brazo, mientras con el otro lo estire en dirección de aquella molesta vampira.
-Devuelvemelo!
-Creo que no los necesitas..te ves mas hermosa sin el-con la misma sonrisa estupida de antes
-Devuelvemelo a las buenas o a las malas!-dije al limite de la ira
-ey ey! tranquila, no quiero peleas..pero son demasiado bonitos-no sabia si se refería a mi sostén o a mis pechos, ya que ella me miraba para abajo por su alta estatura- lo siento me los quedaré- se lo guardo en el bolsillo de su chaqueta y salio corriendo. La segui por un par de kilómetros, pero era muy escurridiza y la perdi al minuto.

-Maldita pervertida!-grite con furia.
Nota mental, nunca mas volver a bañarme semi desnuda en esta zona.

Al dia siguiente bañada, vestida y con sosten, me dispuse a buscar un departamento donde vivir, visite al rededor de 8, tuve que regodear bastante ya que muchos tenían mala ubicación, o estaban en pesimo estado o no tenian estacionamiento donde dejar mi auto o excedían mi presupuesto, hasta que el último fue el indicado, el cual  era un tanto pequeño, pero traia algunos muebles para llegar y vivir, contaba con un pequeño estacionamiento al aire libre  por el costado, estaba a siete cuadras de la universidad, tenia una linda vista al parque cercano y estaba cerca de algunas tiendas de la zona, el edificio era pequeño, de solo dos niveles y tres departamentos por nivel, ademas se veia tranquilo sin vecinos curiosos, pero lo que mas me gustaba, es que estaba cerca de una gran libreria, por lo que era el departamento ideal para mi. A las horas ya tenia los papeles firmados y las llaves en mi mano lista para mudarme.

Luego de dejar mis bolsos de ropa, sin perder tiempo me dirigí a la librería para buscar algun nuevo libro que comprar y de pasada buscar algun trabajo de medio tiempo para mantener el pago del alquiler del departamento, ya que por el pago inicial y un  par de adelantos del alquiler me habia quedado un poco desfinanciada.

Pero antes de llegar a la librería muy a lo lejos, vi saliendo de alli, a la persona que mas anhelaba ver, con unos libros en la mano, iba a ir corriendo en dirección a él para abrazarlo por la espalda, pero antes que si quiese me moviera, vi que salia junto a él una chica de pelo castaño hasta los hombros, con una cara angelical y de estatura media, era humana, ella tambien llevaba libros en sus manos y conversaban alegremente. Lo que más me sorprendió fue que él sonreía verdaderamente, se le veia feliz y no pude cortar aquel momento porque se me estrujó el corazón verlo con otra persona asi, como alguna vez lo fue conmigo, por lo que me quede parada viendo como conversaban sobre libros de arquitectura y reian mientras caminaban cuadras adelante hasta llegar a un estacionamiento, ambos se subian al volvo de Edward y se iban de alli.

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Un no tan felices por siempre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora