Las cosas dan un giro inesperado en este universo al recibir a la joven Addison Stark.
- Soy bonita,millonaria y una vengadora, ¿Que mas puedo pedir?
Lo que no sabía eran las desgracias que le ocurrirían al enamorarse del joven arácnido, ¿Hay algo...
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Addison Stark
Después de aquel día donde me encontré al chico de la cafetería hemos estado hablando casi todos los días,no todos pues a veces estaba un poco ocupada...con cierto chico arácnido.
Como por ejemplo hoy,viernes me mando un aviso de un robo en un laboratorio químico,pero no cualquier laboratorio,los laboratorio Osborn son los más importantes de este país por no decir que del mundo entero.
Me coloqué mi pulsera y sali por el balcón de mi apartamento comenzado a volar guiándome por el GPS del casco
— Viernes,¿ya pudiste localizar a Spiderman?
— Estoy tratando de contactarlo
— Bien,avísame cuando ya vaya para allá
— Si,señorita Stark
Narradora
La chica continuó volando hasta que el localizador le marco que había encontrado el camión donde se encontraba el suero robado,comenzó a descender de poco en poco cuidando que no se pudiera visualizar en los espejos del camión.
Aterrizó en el techo de este y con el láser en su muñeca abrió el hecho para así poder entrar,al lograr colarse en el vehículo lo primero que vio fue a dos tipos armados quienes veían la escena atónitos.
— Hola guapos
En cuanto hablo las balas comenzaron a volar por el lugar,la chica trataba de protegerse a ella y al suero detrás de ella,se le era complicado pues el camión no era muy ancho que digamos
— ¿No se les hace injusto pelear 2 contra 1? Y mas si es mujer— una voz sobre ellos se hizo escuchar,bajo hacia la parte interna del camión y lanzó telarañas hacía las armas de los sujetos— Lilac,como siempre es un gusto volver a verte— envolvió a los ladrones en telaraña y abrió la puerta trasera lanzándolos hacia las patrullas
— El gusto es mio Spiderman,hace mucho que no nos veíamos
Comenzaron a agarrar el suero con cuidado,tenía una advertencia de ser radiactivo y que se necesitaba manejar con sumo cuidado,comenzaron a guardarlos en la hielera que estaba en el camión para cuando fuera necesario bajarlos pero de repente el camión frenó de golpe,por un momento se les olvidó el conductor.
— Yo me encargo— el chico salió por el techo,de escucho el ruido de sus disparadores siendo activados— Listo— el chico volvió a bajar y siguió tomando el suero de su lugar
