No me contesto más, y sabía que estuve mal diciéndole que ella acepto todo. Porque el que le rogo para que acepte fui yo.
Sentí que tocaron el timbre y por unos segundos tuve la esperanza que sea ella. Mi ilusión se destrozo cuando vi a Leo con una cara.
–¿Pasó algo?–dije preguntándole mientras me hacía a un lado para dejarlo pasar.
–¿Qué pensas que diría Julian si supiera lo que estás haciendo con su hermana?–Me re truca la pregunta, mientras pasa.
Quedamos frente a frente.
–No hago nada.
–No, no lo haces. No te dan los huevos de dejarle a Oriana, y estar con Agostina, solamente queres tener a alguien que te entienda ahí, y nunca reclame nada. Pero estas buscando de todas maneras posibles que Agostina sufra y destrozarle todo.
–No tenes idea de mis sentimientos.
–Paulo, si te importara, le dejas a Oriana y ya. Nada te detiene, no hay bebés, solamente no queres cortar por el miedo a que las redes te destrocen. En dos años pasan muchas cosas, Agos esta metida en todo el mambo de la música, colabora con chicos que son muy lindos, y solteros, pero vos estas en una relación, lsstimandola a ella constantemente.
–¿Te pensas que lo hago queriendo?
–Sí. No estaría llorando ahora ella si no haces queriendo esas cosas.
–No tengo la culpa que no me quiera entender como son las cosas.
–Recapacita, porque la vas a perder. Nos vamos hoy. Ya no quiere estar acá.
–¿A Buenos Aires?
–A Turin. Vamos a ir en auto nomas. Ya no quiere estar cerca tuyo. Por lo menos ahora, creo que la cagaste ya.
–Ya no sé qué hacer.
–Ya te dije lo que tenes que hacer.–dice Leandro y se va.
Me quedé pensando, la llame y luego de unas 50 llamadas me contesto.
–¿Por donde andas vos amor?
–Paulo.–dice ella y sentí como la perdía.
–Fui al departamento de Leo,¿dónde estás?
–Ya te dijo Leo, nos regresamos a Turin. Leo tené cuidado.–dice ella y me imagino su cara porque a veces Leo maneja medio fuerte.
–Entonces, ¿enserio queres dejarme?
–Luego lo hablamos, porque ahora vamos en ruta y... Leo basta, maneja con cuidado.
–Mejor hablamos después si, porque tengo miedo que te pase algo en la ruta, ponete el cinturón. –Dije y cortamos la llamada.
Eso me dejó un poco asustado, ya que a ella la ruta le da bastante miedo.Cuando Paulo cortó la llamada, sentí algo en mi corazoncito que no podía explicar.
–¿Pensas que cambie de opinión?–Me pregunta Leo.
–No sé, me dio muchas sorpresas en el tiempo que llevamos juntos.
–Bueno, pues, yo le dije que te puede perder si sigue jugando así, es que ya te dije, para mi lo hace por gil, porque es fácil, nada le une a Oriana.
–Ya sé, pero eso mismo se lo tengo que decir yo, en persona.
–Agos.–Sentí que el auto hizo movimientos bruscos.
–Leo, ¿qué es eso?
–Estoy perdiendo el control del auto. No se que pasa.–dijo él un poco alterado.
Lo único que hice fue mirarlo, veía a Leo apretar el freno, y no podíamos frenar.
–Cortaron los frenos. Cubrite por favor.
Fue lo único que llego a decir, y esperábamos el impacto del choque. Porque no había nadie casi en la ruta, Leo llevaba el control del auto, hasta que se nos atravesó un auto, y perdí nocion de todo, todo quedo a oscuras.
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siempre vos| Paulo Dybala
FanfictionAgostina, una chica de 18 años que quiere ayudar a Paulo en sus problemas. Paulo, jugador de la selección, con una relación conflictiva. Quiere ayudar a Agostina a cumplir sus metas porque ella le hace bien. no es a lo que ustedes estaban acostumbra...