Enhypen 《Male Reader》

Morning Habits 《Jay》

La alarma sonó por toda la habitación, sacando a la enredada pareja de su estado de comodidad. En respuesta los dos soltaron suaves quejas y obscenidades ante la inocente alarma, desenredaste tus extremidades por un momento ganándote un quejido de jay, sintiendo como cesaba el calor que le envolvía, estirando desesperadamente la mano para al menos tocarte.

"Cariño, cálmate, sólo he apagado la..." bostezos, "la maldita alarma" dijiste sonriendo ante su aferramiento, cambiándote de lado y rodeándote con su brazo mientras te tumbabas frente a tu novio con mucha adoración.

Le apartaste el pelo y le diste un delicado beso en la frente, mientras Jay se hundía aún más en tu pecho.

Riendo entre dientes, le diste unas palmaditas en el muslo, no se dijeron mucho entre los dos, el silencio era confortable.

Jugueteando con el pelo de jay, escuchaste cómo el mundo cobraba vida fuera de tu ventana, coches y autobuses escolares entraban y salían por igual, los pájaros cantaban sus canciones y los rayos del lucero del alba entraban por las persianas proyectando rayss de frescos de luz solar que quemaban sus ojos o besaban sus rostros suavemente.

Jay bostezó debajo de ti, parecía que ya estaba despierto. Hizo lo posible por estirar los brazos y la espalda mientras seguía en tus brazos, luego recostó la cabeza en tu pecho mirándote con ojos brillantes.

"Buenos días pajarito" llevaste tu mano a su mejilla, viendo como se enrojecían lentamente al presumir el apodo.

"¿En serio, ese apodo? ¿A estas horas de la mañana?" se burló Jay en voz baja, volviéndose hacia el otro lado de la cama en un intento fallido de ocultar sus rasgos sonrojados.

Te reíste suavemente, rodeándolo con tus brazos: "No es que no te guste, cariño"

"¡Exacto, no me gusta!" responde, aunque su cara dice lo contrario.

Tú sigues riéndote, "pero esto te va a encantar" dices, mientras lo sujetas a la cama cuando tu avalancha de besos está a punto de comenzar.

"espera Bae pfft a-alto" jay se rie y se retuerce debajo de ti, haciendo algunos intentos de empujarte (palabra clave: Rojo).

Colocando unos cuantos besos más, terminaste con uno en sus labios, sonriendo amorosamente mientras lo mirabas fijamente.

"Puto idiota" te dio un suave golpecito en el hombro.

Más bien dramáticamente, gemiste de dolor, sujetándote el hombro como si te hubieran dado un fuerte puñetazo.

jay suspiró, "qué rey del drama"

frunciste el ceño, mientras continuabas sin tu pequeño acto de dolor.

"Detente por favor" dijo jay entre risas.

"entonces besalo" dijiste sin dudar, directo a tu objetivo "aqui."

"tsk tsk tsk tsk," jay negó con la cabeza, "eres literalmente un dramático hombre," se inclinó para besar tus labios en su lugar.

Y con eso su acto cesó, ustedes dos simplemente se sentaron allí, encerrados en las miradas del otro.

Ya no pudiste evitarlo, tirando de Jay por el cuello de su camisa, sus labios se apretaron el uno contra el otro de nuevo. Pero esta vez fue más íntimo y acalorado.

Ambos saborearon los labios del otro, moviéndoos en sincronía, tu mano encontró su camino hacia la cintura de Jay guiándolo suavemente para que se sentara a horcajadas en tu regazo, tus manos agarraron suavemente el costado de Jay mientras su pequeña sesión continuaba.

Finalmente, los dos tuvieron que separarse, presionando sus frentes, recuperando el oxígeno poco a poco.

"Ha sido genial"

"Joder, sí que lo ha sido"

Ambos jadearon, enredando sus brazos uno alrededor del otro del otro en un olapso de silencio, el confortable silencio cubrió la habitación.

La serenidad se vio perturbada por el rugido del estómago de alguien.

Jay se apartó de tu cuello para mirarte con una suave sonrisa: "Creo que alguien tiene hambre"

"Yo también lo creo" respondiste sarcásticamente, ganándote otro golpe en el hombro, esta vez sí que dolió un poco.

Jay te apretó las mejillas y te dio un beso en los labios antes de bajarse de tu regazo, y tú no tardaste en seguirle.

"¿Qué tienes pensado para desayunar?"

"hmm... te pondré cualquier cosa que te vayas a comer de todas formas."

"Lo que hago por amor"

Levantas la cabeza ante su afirmación tan cierta, parandote en seco y envolviendo a Jay en tus brazos, obligándole a caminar abrazándolo por detrás hasta la cocina.

"No me importaría comerte ¿sabes?"

"¡CÁLLATE!" grita arrancando tus brazos de su cintura y corriendo hacia la cocina.

"esa respuesta no es tan agradable cariño"

"¡HEY VUELVE AQUÍ!"

"¡DIOS NO!"