Conozco la depresión, la soledad, el dolor y las muchas lágrimas, pero también el amor inmensurable de un padre que abraza y consuela.
Conozco el corazón endurecido hasta el punto de no llegar a reconocerte a ti mismo, pero también conozco la suavidad de la voz que susurra "Yo te cree en mis pensamientos, te puse nombre y te conozco."
Conozco las manos frías, el corazón rápido y los ejercicios de respiración necesarios para aplicar en medio de los ataques de ansiedad, pero aún mejor, conozco la paz que sobrepasa todo entendimiento humano y que guarda los corazones y los pensamientos en Cristo Jesús.
Conozco las millones de voces que segundo a segundo gritan en tu cabeza que tu vida no es tan valiosa, que hay "salidas rápidas para el dolor" y que eres una carga para los que te rodean, sin embargo por gracia también conocí a un hombre que me amó sin palabras pero dando su propia vida para enseñarme cuan valiosa era para él.
Conozco esa guerra de la que sientes que no puedes escapar porque está dentro de ti mismo, pero sin comparación también conozco la sangre de Jesús derramada y una tumba vacia como señal de la victoria eterna que nadie es ni será capaz de superar jamás.
Conozco las ruinas y el vestido roto de una niña que camina pensando que ya es el final, pero mis ojos ven el jardín que había sido preparado en el cielo, y las ropas blancas de la novia que espera ver a su novio regresar.
En estos años vi el pecado abundar, pero también vi sobreabundar la Gracia. Esa, su gracia, es hoy mi razón de vivir. Esa salvación, mi esperanza viva, convirtió mis ruinas en un hermoso jardín
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Crónicas de una chica rizada.
RandomPorque la vida es más divertida cuando hay rizos de por medio. [Blog]