Capítulo dos: "Bienestar y cuidado".

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N/A: Pequeño recordatorio de que esta historia es paralela. Acá Aemond solo ha estado molestando a Luke, sin embargo la violencia de WG, y sus respectivas peleas, están disminuidas.

¿A qué voy? Acá el odio no existe como tal. En WG Luke y Aemond sí tuvieron que hacer ejercicios internos para aprender a tolerarse (siguen en proceso), acá es una rivalidad tensa y complicada, ellos no se caen bien, más no se odian en si. Y siendo un omegaverse, les cuesta menos conectar.

Serán tres capítulos y un bonus sorpresa, a quien adivine le dedico el próximo capítulo.

[Capítulo situado durante el capítulo ocho de wg, "lilas y café"].

Bechitos.<3

Aemond recuerda la piel de Lucerys amoldándose entre sus manos cuando bailaron hace cinco minutos

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Aemond recuerda la piel de Lucerys amoldándose entre sus manos cuando bailaron hace cinco minutos.

Piensa en lo mucho que desea atrapar cada infima fracción de esa dermis y llenarlo de marcas lilas hasta escucharlo sollozar. Hacerlo suplicar, hundirse en él hasta que su propia esencia sea todo lo que puede olerse en ese cuerpo desagradable.

Supone que está loco, y ebrio, y algo caliente por su próximo celo, y que por eso sus pensamientos son tan irracionales.

Sí, es eso.

Lucerys ha salido, lo observó moverse después de esa pieza. Fue una silueta oscura oscilando entre el cúmulo de personas.

Aemond no sabe, ni le interesa, donde fue. No es su problema, solo mantienen una tregua momentánea porque se lo prometió a Daeron. Si Lucerys planea correr asustado después de un simple baile insignificante, Aemond no es quien para detenerlo. Seguro tiene delirios de Cenicienta. O le dio un pánico por su atracción hacia otro Alfa.

Está por servirse un tercer trago cuando algo golpea su nuca. Es un tirón, un sonidito desesperado, son muchas frases que llueven sobre él como ácido y erizan hasta el último de sus cabellos. Y siente el miedo, siente la rabia, siente la impotencia. Siente dolor, asco, terror. Es petróleo vertiendose sobre su cuerpo, ensuciando su piel y esparciendose como un virus por sus venas.

Siente hormigueos, siente fuego en su boca.

Siente a Lucerys, y todo se vuelve un borrón porque el susurro contra sus oídos suena desesperado.

Ayuda. Ayuda. Ayuda.

Aemond no sabe a cuántas personas empuja. Escucha algunos quejidos o alegatos a sus espaldas, pero no los procesa. Por el rabillo del ojo capta a su hermano intentando preguntar qué le sucede. Su rostro está ladeado en algo confundido, casi preocupado. Seguro verlo así es preocupante, Aemond jamás se había sentido tan desesperado. Se sentía enfermo, drogado, mal. Muy mal.

¿Qué se supone que le dirá? Daeron no lo sabe. Nadie lo sabe. Aemond no desea que sepan, y podría jurar que Lucerys tampoco.

Pero no puede detenerse. No cuando lo escucha, cuando grita y revienta su cabeza.

Wicked World [Lucemond] [HOTD]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora