ⒶⓊⓉⒾⓈⓂ [𝙼𝙴𝚂𝚂𝙸 𝚇 𝙾𝙲𝙷𝙾𝙰]

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Se escuchaba en el coliseo de buenos aires, como la hincha de su club gritaba a ese equipo que era un éxito rotundo y que ha ganado llegado hasta los mundiales, todos estaban emocionados porque sabían que era un logro inminente, la euforia causada por todo el grupo, solo aumentaba más la fortaleza de la afamada "scaloneta".

El balón se movía a grata velocidad, ya que quien lo llevaba es el mas temido, Lionel Messi, este corría a todo lo que daba, un joven que tenía la vitalidad enorme en él, a tan solo veinte años era el mejor delantero de todo su equipo, todos gritaban su nombre entre las gradas, esquivando a los defensores de la portería enemiga, cuando llegó allí, lo que hizo fue patear con rudeza el balón, curveandolo en último momento, dando el tercer gol definitivo.

Y allí, el silvatazo fue dado en dónde claramente, su equipo volvio a ganar, con alegria todos fueron corriendo hacia Lionel, abrazándolo fuertemente en dónde lo mantuvieron y estrecharon, moviendo lo de un lado a otro, Di María y De Paul fueron los primeros en lanzarse hacia Lionel quien también los correspondió eufórico, aun la adrenalina recorriendo sus venas, emocionando a las hinchas de su club, ya que jóvenes promesas volvían a ganar un partido.

El famoso Lionel ya era reconocido mundialmente, y allí, solo festejaron con inmensa alegria otra victoria para su equipo, Lautaro se acercó junto con Dybala, Armani les dedicó una sonrisa mientras se dejaba caer en el pasto, los golpes de las goleadas que intentaron darle fueron dolorosas, solo querían descansar.

Messi los vio y como todo el público aclamaba por el, cerro sus ojos sonriente.

Fue un hermoso día llenos de triunfos.

—¡Che Lío! Está vez que hiciste lo que pudiste, eres el mas veloz del equipo, sin duda no se que haríamos sin ti —decia divertido De Paul viendo como el chico solo sonrió de lado, negando solemne.

—¿Pues que más? Por ahora disfrutemos este glorioso triunfo, es lo que nos lo merecemos en lo que volvemos hacia el hotel, el caballo nos dejó quedarnos un momento porque ya saben... No quería un poquito de esto -mostro la cerveza juguetón, todos rieron entre ellos para después obedecer a su capitán, estaba claro que tenía razón.

Solo comenzaron andar, y mientras andaban, Armani comenzó a cantar las canciones de su hinchada, el fue el primero en que comenzó a cantar, luego de allí le siguió inmediatamente Julián, Enzo, Armani, Lautaro, Dybala, Correa, Damián, hasta él.

Todos cantaban con alegria en las calles que estaban solitarias, ya que saliendo de ese coliseo lo primero que fueron hacer fue a tomar, llenarse de gloria en su cuerpo sin duda, y unos estaban más tonteados que otros, por lo que el procuraba que no se sintieran mal de la nada y sucediera una desgracia.

Sus pasos eran algo curiosos pero divertidos, por parte de Messi quien con sus ojos cerrados, siguió cantando junto a sus compañeros — ¡Ole Ole Olà! —los pobres hombres ya no sabían ni dónde iban, estaban perdiendo la noción.

—¡No volvimos a ilusionar! —siguio Dibu aunque arrastrando las palabras, abrazando entre los hombros a sus compañeros alegre, Enzo estaba igual o peor, estos lo estaban arrastrando hacia la dirección de su hotel.

Pero cuando iba a cantar Armani, escucharon una voz nueva que no habían reconocido antes, una voz algo anulada pero temblorosa, demostrando en cierta parte alegria — ¡Quiero ganar la tercera, alentando...! —se fue quedando callado esa voz porque a todos se les bajó el alcohol que tenían en la sangre.

Todos al mismo tiempo voltearon detras, y encontrar un chico de hermosos rulos, y piel canela, quedaron sorprendidos y algo intimidados, ni siquiera lo escucharon, este se notaba feliz, al menos eso pensaron ya que vieron como las manos de ese chico se movían temblorosas, y no les dirigía la mirada.

Pero al momento de que Lionel lo vio, se sorprendió, e intereso, ya que ni siquiera había ocasionado un ruido.

—l-lo siento... Creo que interrumpí, lo lamento en serio, no era mi intensión —ver que esos hombres ya no estaban felices con su presencia se puso nervioso, ahora en vez de pensar la felicidad que le causó verlos, el se había contagiado con ello.

Pero para Messi le parecía curioso que no le volteara a mirar, contrario a eso, miraba el suelo, o simplemente no le dirigia la vista directo con contacto visual.

Por parte de ese chico de rulos, aunque quisiera estar feliz, cuando iba a cantar de nuevo escuchó una voz detrás de él, era Lozano el cual con preocupación y agitación de haber corrido largos tramos alcanzó a ese chico escurridizo, este agitado al alcanzarlo se detuvo — madre de dios bendito, caminas muy rápido Guille, mira, consegui tu manzana, no necesitas molestar les —susurro de forma baja, ocasionando que el chico de rulos se encogiera notablemente en su lugar, ese hombre que llego al lugar, miro a esos argentinos que no desviaban su visión — disculpa de verdad, es un chico muy alegre y nunca dice no a la alegría, disculpa, nosotros nos vamos —trato de decir para ver a el hombre de rulos, quien sin mirarlo a los ojos, estaba más entretenido queriendo quitar cualquier imperfección en su manzana.

Lionel vio algo curioso, y fue ver que ese chico recién llegado tenía un uniforme deportivo, y una maleta, aquello le causó ese picor de saber más — d-disculpa —vio como el chico le dirigio la mirada pero el que era de cabello rizado no— ¿Eres un futbolista? —aquello le dió más nervios a Hirving, que le dirigiera la palabra uno de los mejores futbolistas emergentes, le ponía esos nervios de punta.

—s-si, acabamos de llegar aquí a buenos aires.. bueno, d-disculpen —sin decir nada y más con preocupación, solo vio a Guillermo el cual se despidió sin mirarlos, tímido.

Y eso... Solo le causaba un de esa sensación extraña por su vientre al ver que ese chico tenía una manera inusual de comportarse, viendo a la lejania cómo parecía ese chico de nombre Hirving -a lo que veía en su camisa trasera- hablar con el de rulos y como este hacia gestos de los cuales le parecían interesantes.

Solo con eso, vio a los demás de sus compañeros que seguían estáticos — vaya... Quien lo iba a decir, ¿No? Bueno, será mejor llegar al hotel, no quiero ser regañado por Scaloni —murmullo de forma leve Julián, a todos se les había bajado el alcohol por el gesto del mexicano.

Pero Messi desde que lo miró, le causó una sensación curiosa, incertidumbre por el chico.

¡Damos apertura a un nuevo fic! En este me emociona escribir también, tenía esta idea hace tiempo pero no sabía ni como escribir el inicio, por ver un tiktok me entró ganas de ejecutarlo.

Diré lo que contendrá, y esta vez, prometo, PROMETO, que no será tan fuerte, solo será para darle sazón.

Angst, 18, Fluff, temas sensibles.

Pero será más historia de romance aunque claro, sin dejar mi toque personal.

Espero que lo disfruten tanto como yo lo haré, actualizaré dos veces a la semana porque tengo ya muchos fics, serán actualizaciones lunes y jueves.

Espero lo disfruten ❤️ aña!