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Una noche eterna

— Salón de la corte, viernes 17—
. . .
Durante la primera helada de ese año el juez Fozca estaba en su enorme corte lujosa, habían distintos papeles, tinta y una pluma de un ave bastante hermosa, siendo esta pluma de un color rojizo vivo, mientras él escribía y revisaba el papeleo la chimenea emanaba ese calor tan reconfortante, el silencio era lo único que había de fondo, puesto a que su corte estaba algo lejos de todos, allí era común celebrar juicios por distintas cosas, peleas, robos y altercados, nada grave, solo... Debía ponerle orden a esa ciudad tan ajetreada, las horas pasaron y unos pasos pesados se acercaron, el juez quedó en silencio y la puerta de madera fue abierta de par en par y se pudo ver la silueta de un chico alto
— Necesito que redactes esto —
Dijo Davitto, el cual tenía un abrigo enorme y suave
— ¿Y eso para qué, tonto? —
— Vamos a ser independientes del imperio Chae-Koino —
Fozca escuchó eso y solo pudo reír a carcajadas mientras Davitto le miraba con una expresión de odio
— ¡Si mis amigos fueran billetes entonces yo tendría muchos billetes falsos! —
— ¡Pero davitto, no apoyó esta tontería, primero querías ir a molestar a la gran plaza de encuentros, después querías ir a molestar a la princesa del reino vecino y ahora quieres ir a romper las pelotas con el imperio Chae! —
— Así es, si no vas a redactar eso pues entonces me temo que no serás mi amigo para cuando sea el monarca nuevo —
Fozca solo pudo reír y agarró un papel y su pluma
— Pues eres un idiota, pero te sigo, supongo que no tengo nada mejor que redactar, igual si no morimos en una pelea... Moriremos por las condiciones precarias de este imperio —
Davitto sonrió y Fozca siguió escribiendo para finalmente terminar y darle un papel autorizado
— Si mueres te visitaré en tu tumba, imbécil —
— Gracias amiguito, si ganamos te daré una pinga de goma —
Davitto se fue y Fozca simplemente se volvió a sentar y bebió de su café caliente.
Davitto salió y Fresa fue hacía él con un sobre entre sus manos, allí... Davitto lo abrió y Fresa solamente se cruzó de brazos
— mira, intente hacer lo mejor posible para sacarles información... Pero me descubrieron, todo allí... Es un caos —
— No te preocupes, Geo me dará lo que necesito entonces —
— si salimos vivo de esto... Y si no la han descubierto —
Davitto simplemente suspiró y Fresa intentó dar ánimos
— Supongo que necesitas apoyo pero... En definitiva, estás muerto tonto —
— Si todos mis amigos fueran billetes entonces tendría puros billetes falsos —
Fresa comenzó a reír y solo pudo sentarse en el suelo
— Tengo mucho sueño —
Dijo Fresa para así ver a Davitto, el cual sacó un cigarro y lo fumo
— Sabes que no tolero tu puta obsesión desenfrenada al tabaco —
— esta generación de cristal, debería traerte una faldita fresis —
Fresa tosió y se alejó con mala cara, no quería oler su horrible y apestoso olor
— Ojalá no te maten los del imperio, ojalá mueras por el tabaco —
— ¿Te arde? —
Le sacó la lengua y Xime pasó por delante de ellos, la repostera y encargada del establo, una chica bastante hermosa y guapa que tenía él prestigió de conocer a muchas personas del imperio Chae y se llevaba bien con todos, era una llave importante puesto a que era bastante amigable y sus relaciones sociales eran impecables, Davitto iba a llamarle para que le ayudase, pero salió corriendo torpemente y desapareció entre las personas, rápidamente Xime se dio cuenta de que el ambiente estaba tenso, la chica tenía una canasta entre las manos y todos en el lugar le miraba con miedo
— Eeehm... —
Xime se fue del sitio y decidió ir a su lugar especial, al llegar al parque pudo ver a Inugami con una capa y con un rostro de preocupación
— ¿Pasa algo chikistrikis? —
— Cuchurrumin... Pff, ya sabes, Davitto había planeado hace unos meses la independencia de Chae para formar su nuevo imperio, todos estuvimos de acuerdo pero... Las cosas están saliendo mal, o salen ellos o salimos nosotros... —
Chime quedó en silencio y miró a Inugami con miedo
— ¿Eso significa...? —
— Que solo hay dos finales, o gana Davitto o los traidores vamos a ser asesinados cómo los del reino vecino —
— ¿Qué paso en la brigada? —
— Asesinaron a todos los mandatarios al enterarse de que eran aliados y dejaron vivos a los príncipes Fun y Megi para tomar represalias, Davitto va a salvarles si algo, pero es difícil que su reino prospere de las cenizas y... Me temo que si Davitto no es lo suficiente listo terminará igual, bueno, terminaremos —
Un hombre con bata de laboratorio y cabellos rosados les quedó mirando, al escuchar ese nombre... Solo se acercó y sonrió torpemente
— La brigada está muerta, ellos la mataron —
Señalo al cielo y siguió riendo mientras la pareja le miraba con miedo
— ¿Saben? La princesa es una incompetente, el príncipe es un ratón de laboratorio y... Los gobernantes de esa nación son unos raiders que querían algo diversión... —
— ¿Quién eres? —
Preguntó Inugami mientras se ponía adelante de Xime
— soy el científico encargado del reino vecino, woomy, es un placer... Ciudadanos, Xime y yo nos conocemos, pero bueno... La diversión apenas está comenzando, todo esto será un caos de ahora en adelante —
Dijo Cineva entre risas mientras Xime le miraba preocupada
— La princesa... Si, la conozco, ¿Meggy? ¿Cómo se llamaba? —
— La princesa es alguien siniestra algunas veces, aunque en realidad es solo una niña torpe e infantil, Megi se hace llamar, un placer... Ahora lo importante es... —
Antes de que pudiese terminar de hablar escucharon gritos y Cineva sonrió para darles la espalda
— Ya, a trabajar, deben huir o pelear, lo que elijan es sumamente fundamental, ¡Adiós, tontos! —
— ¡Espera, espérate estúpido! ¡Agh! ¡Vámonos Chime!—
Inugami tomó su mano y salieron corriendo mientras el caos se desataba.