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La profesora Sprout miró la expresión de Evan y dijo con cierta debilidad: “Tos, a todos también les gustas, de hecho, todos sabemos que eres muy fuerte”. Estoy seguro de que alguien entenderá que tu nombre es Evan y no el pequeño Evan…”

La comodidad de la profesora Sprout hizo que Evan se sintiera mucho más cómodo.

Estaba a punto de hacer dos gestos con su varita, queriendo que todos supieran que él y su varita eran poderosos, cuando la puerta de la sala de profesores se abrió.

Fue la profesora McGonagall quien entró.

Su expresión de enojo se disipó inmediatamente después de ver a Evan.

“Querido pequeño Evan, ¿por qué estás aquí? ¿Qué comiste? ¡La boca está abultada como un pequeño hámster! ”

También sacó un pañuelo y limpió los restos de torta dulce de la cara de Evan.

La mano de Evan que sostenía su varita se congeló.

Escuchó la risa atronadora de todos los profesores. ¡Bla, bla!

¡Excesivamente! ¡Él no es un hámster!

En otras palabras, ¿acaba de declararse fuerte con estos restos de comida? Incómodo.

Ni siquiera me di cuenta.

"Está bien, está bien, ¿cuál es la risa? ¡No permito que te rías del pequeño Evan!"

Dijo la profesora McGonagall con una sonrisa.

Evan sintió que iba a explotar.

Afortunadamente, los profesores finalmente dejaron de reírse antes de que su paciencia explotara.

“Minerva, ¿no fuiste de patrulla?”

El profesor Flitwick de repente se dio cuenta de que algo andaba mal. La profesora McGonagall finalmente se puso seria.

"Potter todavía no..."

Cuando dijo esto, miró a Evan vagamente.

Luego continuó: "Potter y Granger, me dijeron que alguien intentó robar la Piedra Filosofal..."

Su voz fue baja.

“Acabo de hacer una gira desde allí, ¿sabes lo que vi?”

"¿Qué?"

preguntó Snape con cautela.

“¡Potter, están todos ahí!”

Dijo la profesora McGonagall enojada.

“Echaron a un lado al pequeño Evan y luego actuaron por su cuenta”.

“Alrededor de la Piedra Filosofal… ¡Realmente no entiendo lo que está pasando en sus pequeños cerebros! ¡O nuestro pequeño Evan es el que mejor se porta! ”

La profesora McGonagall frotó el cabello de Evan. Evan sonrió tímidamente.

También sale a actuar... Espiar al profesor, quién sabe... Mezclado en la sala de profesores.

"Severus, ¿por qué vas?"

En ese momento, la profesora McGonagall preguntó de repente.

“Ve a buscar… ¡Iré cuando me vaya! ”

Snape miró a Evan, vio su mirada curiosa, torció la comisura de su boca y salió rápidamente de la oficina.

"¡Déjalo en paz, él y Quirrell están raros hoy!"

Dijo la profesora McGonagall con una sonrisa.

Evan se quedó en el salón un rato más, y después de comer las galletas de mantequilla que la profesora McGonagall había traído de casa, finalmente se despidió. Después de todo, vio que el profesor Flitwick ya estaba comiendo algo, ya estaba lleno, ¡pero no quería comer nada más! Cuando regresó a la sala común de Gryffindor, vio que Harry ya estaba allí.

"¿Cómo?"

Varios de ellos se apresuraron rápidamente y miraron a Evan con esperanza.

"El profesor Quirrell no estaba en la sala de profesores, estaba el profesor Snape, pero escuchó a la profesora McGonagall decir sobre lo que están vigilando en el cuarto piso y se fue".

"¡Mira, sé que debe estar tratando de robar la Piedra Filosofal!"

Harry dijo emocionado de inmediato.

Ron y Hermione también dijeron felices: “Ahora el pequeño Evan debería entender que Snape no es una buena persona, ¿verdad? ”

"¡El pequeño Evan debe estar asustado!"

Hablan solos. Evan estaba indefenso.

“No, insisto en que el profesor Snape es un buen hombre, y solo que Quirrell, no me siento bien. ¡Deberías creerme, mi intuición es muy precisa! ”

Harry, suspiraron.

Miró a Evan con pena, como preguntándose, ¿por qué solo creció en edad y no en su corazón?

"¡Incluso si eres estúpido, no nos disgustaremos!"

Hermione abrazó a Evan, expresando su inmenso afecto por Evan. Jeje, Evan decidió ayudarlos a escribir estas palabras, y cuando salieran de la enfermería de la escuela, ¡léelas oración por oración! Espera y verás.

Te veré esta noche. ¡Tararear!

Debía traer a Harry esta noche y dejar que mirara bien si era Quirrell o Snape. Motivado por la venganza, Evan decidió hacer avanzar el proceso.

"Entonces, ¿qué vas a hacer ahora?"

"¡Eso es!"

Harry apretó los puños.

"¡Esta noche, me pondré mi capa de invisibilidad y evitaré que Snape robe la Piedra Filosofal!"

"Así es, pequeño Evan, creo que estás absolutamente equivocado, ¡Snape no debe ser una buena persona!"

Harry dijo solemnemente.

Evan aún no había hablado.

Ron y Hermione exclamaron.

"¡No puedes!"

“¡Serás despedido!”

Los dos gritaron en voz alta.

Antes de que Harry pudiera explicar, Evan ya había hablado.

“Harry se tiene que ir, el que quiera robar la Piedra Filosofal, tiene que detenerlo, porque si se roba la Piedra Filosofal, se la darán a Voldemort, ¿piensa qué pasará si Voldemort se queda con la Piedra Filosofal?”

“El mundo mágico volverá a ser caótico, todo será diferente de antes, ¡e incluso muchas personas morirán! Entonces, ¡tenemos que detenerlo! ”

"¿Nosotros?"

Harry se congeló. Evan asintió.

"Está todo junto, pase lo que pase, tienes que llevarme, si huyes solo, te expondré". Sabes, si lo hago, los profesores no se enojarán conmigo de todos modos, pero definitivamente te atraparán. ”

Voy a hacerles saber que Quirrell fue quien robó la Piedra Filosofal 2.3, mis instintos son absolutamente correctos, ¡el Profesor Snape es un buen hombre! Dijo en voz alta.

Harry se congeló. De repente abrazó a Evan.

"Lo sé, dijiste que me denunciarías como una broma, estás tratando de ayudarme".

La noche que enviaste al dragón, denunciaste a Malfoy y querías ayudarnos con todos nuestros problemas, así que te escabulliste. Lo sé, y no te dejaré solo en el dormitorio otra vez.

Estoy aterrorizado ahora cuando pienso en ti saliendo a escondidas del dormitorio solo esa noche.

Puedes conocer a Snape, también puedes conocer a Voldemort... Solo necesitan levantar sus varitas para matarte, y yo tomaré la tuya, pequeño Evan.

"¡Nunca más te dejaré solo!"

Hogwarts: The opening game binds the Lie into God systemDonde viven las historias. Descúbrelo ahora