5:🥀El diablo🥀

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Mi opinión en lo que se refiere al placer es que hay que emplear todos los sentidos —Marqués de Sade.
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Gian:

Estoy en mi oficina, la de mi club, arreglando algunos documentos de el dinero que entra en este sitio, noto que no hay problema alguno y me dispongo a beber un trago de whisky, en eso entra mi socio y también mejor amigo Sven Schneider, es el Boss de la mafia Alemana, se podria decir que es como yo, frío, calculador, sádico y oscuro.

Somos diferente en como actuamos, el es  más impulsivo, yo pienso y planeo mi ataque, prefiere torturar, allí le nace la creatividad, yo solo asesino de forma rápida y creativa.

—Deja de pensar tanto, y utiliza tu poder para encontrar a esa chica que te tiene así —dice brusco y se sienta en el sofá encendiendo un tabaco.

—No soy como tú de impulsivo, sabes que si la hubiese querido ver ya la tuviese en frente de mí, no por nada soy el diablo, pero me gusta el misterio —sonrio de lado por lo último que digo.

—Misterio ¡Já! No me jodas Gian, ¿Acaso jugaras al lobo y la caperucita?—bromea serio.

—Tentador, pero algo me dice que volverá a mí —bebo otro trago de whisky.

—Eso suena a que la dejaste con ganas.

—Algo así, es una ninfa no revelada, que me encantaría corromper—pienso en cuando trato de callar sus gemidos pero a la final no pudo.

—Juego oscuro, mi favorito.—medio sonríe—cambiando de tema me encontré a tu hermano en este club, en noches anteriores, andaba con una mujer hermosa, me imaginé que era su prometida—comenta.

—¿Con su prometida?, No parece mujer de clubes, más bien es una niñata que pasa veinticuatro siete leyendo romance, cara de ángel, que se sonroja de nada y se nota por su piel blanquecina, cabello rubio y promedio de uno cincuenta.

—¿Rubia? ¿Cara de ángel? ¿Pequeña? Gian, la mujer que estaba con Giovanni era lo contrario.

—Explicate—me compongo en mi sitio.

—Era alta curvilínea, morena, cabello negro y corto, cara de perra por así decirlo—explica apagando el tabaco en el cenicero.

—Debe ser que se la consiguió y estaba conversando con ella—le resto importancia.

—Si conversando te refieres a besos sucios y ella sentada en sus piernas, si que lo estaban.

—Quien lo viera dice amar a su prometida y tiene una amante—digo divertido.

—Por algo es un D'Angelo ¿No?—cuestiona en broma.

—Tal vez, necesito la información de esa chica de inmediato—le digo y asiente.

—¿Buscando debilidad?

—Me conoces Schneider, se muy bien que se va a casar para tener la aceptación de papá y poder entrar en los negocios, cual son mío y no lo permitiré.

—Maldad

—Te equivocas, puede que tenga la aceptación de papá pero no mis negocios—digo serio.

¿Lo sabrá la cuñadita? Siento que esto será divertido.

Por ahora me permito en pensar en la ninfa de ojos grises

Presto ti rivedrò angelo mio 

                                    †

Miradas lujuriosas +18 (pronto)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora