las mariposas también mueren

C4 nuevo look

Era lunes, no tenia ganas de hacer absolutamente nada, estaba cansada pero debía ir a clase por lo menos 3 horas.

Al llegar estaban todos con los que había ido al lago en una mesa de la cafetería, Lauren me llamo para que me sentara, me senté al lado de Martina y de Easton, fue agradable pasar un rato con ellos, pero ya tenia que irme a clase, El último curso de bachillerato se me estaba haciendo difícil, no quería repetir curso así que debía esforzarme. Llegue a clase para ver que ya estaban repartiendo los exámenes del lunes, estaba nerviosa hasta que anunciaron mi nombre y me empezaron a sudar las manos mientras iba a la mesa del profesor, sujete el examen y me lo lleve a mi mesa sin ver lo que ponía, lo puse boca abajo, respiré y lo mire, había sacado un 2, no se por que pero decidí irme de la clase, fui al baño a mirarme al espejo mientras caían lagrimas sobre mi mejilla, debía esforzarme mas, muchísimo mas, pero me daba tanta pereza pasarme las tardes pegada a un libro, pero ¿se supone que era eso lo que debía hacer?

Me fui a mi casa por que no quería seguir dando clase, me encerré en mi habitación cuando me llego un mensaje, mire a ver quien me había escrito y era Max, me pregunto que por que no había ido a clase y le dije lo que había pasado, el dijo que lo sentía y que en un próximo examen me ayudaría, al parecer todos habían aprobado menos yo, eso me hizo sentir peor.
Mi madre entró a mi habitación y vio como estaba, mi situación en ese momento no era la mejor, yo era un mar de lagrimas en una pequeña cama de una habitación llena de servilletas por el suelo que por una gran razón estaban llenas de lagrimas de dolor.

— ¿Que te pasa cariño? – Pregunto mi madre haciendo pucheros

— He suspendido un examen, voy fatal con las clases... – Dije mientras tiraba otra servilleta al suelo

— No pasa nada hija, al siguiente irá mejor ¡te lo aseguro! 

— Lo mismo dijiste la vez pasada mamá.

— Hacemos galletas, he comprado los ingredientes – dijo dando un cambio de 180 grados a la conversación

Ella sabia que lo que mas feliz me hacía eran las galletas con chispas de chocolate, si, un poco ordinario por mi parte pero tenia un vínculo especial con ellas; la primera vez que me caí de una bici mi padre me las hizo aun que estuviera muy cansado, yo era pequeña pero me acuerdo muy bien de esos momentos con mi padre, me hacían muy feliz.

Le dije que si a mi madre, me levante de la cama recogí todos los papeles que habían en el suelo y baje con mi madre a preparar las deseadas galletas, teníamos una receta buenísima que siempre veíamos en YouTube de una señora muy graciosa, siempre nos sacaba una sonrisa, no importaba que ya hubiéramos visto el mismo vídeo setecientas veces nos hacía feliz.

Al acabar las galletas las metimos al horno y subí a mi habitación a por mi móvil por que no lo había revisado desde que baje a la cocina, cuando lo mire tenía 2 mensajes de Max, SI de Max me dijo que se quería cortar el pelo y que le ayudase a elegir el peinado, a mi me gustaba como lo tenía, desordenado era precioso su pelo, pero le dije que se cortara solo las puntas y según él me haría caso, acto seguido entre al baño y me analice parte por parte en el espejo, tenia el pelo raro, ¿necesitaría un cambio como Max? Le escribí  de inmediato a Max para decirle que fuéramos mañana los dos a la peluquería y acepto, me dijo que me hiciera un corte en capas un poco loco y acepté.

Y si, lo cumplimos, fuimos a la peluquería y nos hicimos el corte que quería el otro y nos quedó genial, parecíamos actores, de una película de adolescentes, nos tomamos una foto y se la enviamos al grupo de amigos que habíamos hecho hace unos días, había sido algo reconfortante para mi, hacía mucho que no me divertía tanto.
Después de salir de la peluquería fuimos a un parque, nos sentamos en unos asientos que habían en frente de la peluquería a la entrada de un parque  y empezamos a hablar de nuestra vida, fue breve pero divertido, entramos al parque y me subí en un columpio y el vino corriendo para sentarse en el otro cosa que me pareció muy tierna.

Estuvimos en el parque durante 2 horas al despedirnos no supe que hacer, si darle un simple abrazo o irme sin más, pero el se adelantó, me abrazó, estaba envuelta en sus brazos cuando sonó su móvil, él se apartó y lo miro, intenté verlo de reojo y vi que era Martina, se podía decir que yo ya estaba celosa, no se Max me parecía una persona muy divertida y obviamente guapísimo, senti muchos celos así que decidí irme sin decir nada, cuando di el segundo paso sentí como agarraba mi mano con fuerza y me pedía perdón, no entendí por que ni para que me pedía perdón pero le dije un simple "okey" y me fui, no se que había hecho ni por que pero no me sentía mal, los celos se apoderaban de mi y no entendía la razón, el y yo no teníamos nada.

Llego el finde semana y Lauren me había dicho que iban a salir todos ese viernes por la noche a la bolera, de inmediato pregunte si iría Max por que tenia demasiada vergüenza de lo que había pasado el día anterior y había estado evitándolo, al parecer si iba pero Lauren insistió tanto en ir que tuve que aceptar.
Me empecé a arreglar en cuanto comí, quería ir guapa, por una vez en mi vida, me maquillé, fue sutil pero bonito, me puse unos vaqueros blancos con un top con un pequeño escote y una sudadera que me había comprado en Shein hacia unos días.
Estuve esperando bastante tiempo a que llegase la hora de salir de mi casa, mientras tanto me puse a jugar en mi móvil y ordene un poco mi habitación, antes de irme baje a ver si quedaban galletas de las que habíamos hecho mi madre y yo hacía unos días y me senté en el sillón a esperar un rato.

Cuando llegue me saludaron todos súper bien pero Max solo hizo un gesto con la mano, empezaron a jugar y después de 45 minutos decidieron ir a por comida, yo no quería ir así que me quede, justamente Max dijo que él tampoco y nos quedamos solos, ¿podía ser más incómodo? Yo digo que no, estábamos en silencio, hasta que alguien lo rompio

— Oye sobre ayer...

— Da igual – le interrumpí

Sinceramente no quería que dijese nada mas, todo fue extraño, todavía no sé ni por que estamos así pero no quería perder mi tiempo y saliva hablando sobre ello.