What am I that? -Jortini

-Capitulo 7.-

-Creo que solo me cayeron un poco mal los cereales, nada grave. -acaricié su mejilla. -Gracias por preocuparte, amor.

-Cualquier cosa que te pase, aunque sea la más minima, quiero que me lo digas, ¿si?

-Okey, amor...

Nos besamos y entonces se escuchó el ruido de la puerta abrirse, seguido por los gritos de mi hermanita llamándome, inmediatamente nos separamos y bajé las escaleras.

-¡Hey, Mica! ¿Dónde andabas, hermanita? -dije mientras alzaba a mi hermana menor.

-Salimos con mamá al parque. -dijo mostrándome un peluche que seguramente ganó en uno de los juegos-. No te molesta que no hayamos ido contigo, ¿verdad?

-Claro que no me molesta, ¿y te divertiste?

-¡Sí, mucho! -gritó de alegría mientras yo la dejaba en el suelo- Gané a Toby en un juego, y mamá me compró pizza cuando salimos, ¡estuvo riquísima! Y también gaseosa...

-¿Toby es tu nuevo peluche, Mica? -dije mirando el tierno juguete nuevo de mi hermana.

Es un oso de peluche de 20 centimentros de alto, aproximadamente. Es rosa con blanco, y un corazón que sostiene dice "I love u", ¿no es muy tierno?

-¡Sí! -dijo dando saltos mientras se lo entregaba.

-Saluda a Jorge, princesa -dije, a lo que Mica miro detrás de mi y sonrió al ver a Jorge

-¡Yoyi! -grito mientras corria hacia el- Perdón, no te había visto...

-Hola, linda -dijo mientras se agachaba para darle un beso en la mejilla- ¿Cómo, estás?

-Mh, bien -dijo mirando a su peluche- ¿Vamos a jugar?

Jorge me miró preguntando si yo jugaba con ellos, o si solo él.

-Juega con ella, mi amor -dije mientras me acercaba a donde él- Yo tengo que ir a lo de Mercedes, regreso en una hora, ¿no hay problema?

-Andá tranquila, Tini. Cualquier cosa llamame, ¿si?

-Okey, te amo -besé los labios de mi novio, y luego la mejilla de mi hermana. -¡Mamá, me voy a lo de Mechi, cualquier urgencia me llamas, te amo! -grité a la cocina donde se encontraba mi madre mientras salía.

-¡Bien, cuídate, preciosa! -escuché decir a mi madre.

Subí a mi auto y lo puse en marcha hacia la casa de Mercedes. Pero tuve que parar al frente de un parque porque me distraje y casi choco el auto; y hacerle daño a mi bebé no era una buena idea.

Cuando estacioné el auto, subí un poco mi remera para poder ver mi panza y acariciarla. Ahora mismo iba a la casa de Mercedes para que me acompañe al médico y saber si mi bebé es una nena, o si es un nene. Deseé con todas mis fuerzas que Jorge me acompañe en ese hermoso día, pero no podía decirle... El miedo de solo pensarlo me consumía. Bajé mi remera y sequé las lagrimas que, sin darme cuenta, se habían escapado de mis ojos. Puse el auto en marcha nuevamente para llegar a la casa de Mercedes.

Bajé del auto luego de estacionarlo frente la casa de Mechi, y toqué el timbre. La mamá de Mer abrió la puerta.

-¡Tinita, hola! -dijo mientras me daba en beso en la mejilla- ¿Cómo estás?

-Muy bien, señora, ¿y usted?

-Excelente... Pasa -dijo mientras se hacia a un costado para permitirme entrar- Mechi está en su habitación, ¿están por salir?

-Si, señora, vamos a salir un momento, ¿Mer no le dijo? -dije

-Mh, no, no me dijo... Pero no hay problema -sonrió- ¿A dónde van?

Pensé una buena mentira, aunque odie mentir. Si la mamá de Mer se esterara, correría a hablar con mi madre.

-A... comprar algunas cosas que necesito, no quería ir sola y, ¿quién mejor que Mechita? -dije con una sonrisa en mi cara.

-En eso tienes razón... -las dos reimos- Bueno, querida, te dejo libre. Mer, como dije, está en su habitación. Sube.

Subí las escaleras y entré en la habitación de Mechi. Ella estaba acostada en su cama, concentrada en el celular.

-Hola, Mer -dije poniéndome al lado de su cama.

-¡Bonita! Perdón, no me dí cuenta que llegaste, hola -dijo poniéndose de pie. -¿Vamos?

-Vamos -dije acariciando mi vientre mientras sonreía exageradamente.