15. PROBAR EL PLACER 2

316 21 36
                                    

El viento le golpeaba la cara, se sentía cómodo en aquella silla. el sonido del agua mientras bajaba era relajante.

Su pelo está oculto por la capucha, las bolsas negras debajo de sus ojos eran ya visibles, no recordaba cuanto tiempo llevan afuera.

No ha podido dormir desde hace unas dos horas, pero sentía ahora el cansancio y la necesidad de dormir.

Hua Cheng mantenía sus manos entrelazadas, podía ver qué el también estaba cansado.

Pero aún así no lo dejaba solo, siempre cumpliendo todos sus caprichos. Estaban casi en el mismo lugar donde habían hecho su picnic hace varias horas atrás.

Solo que un poco más abajo y más cerca del río.

Mantenía sus pantuflas de conejitos y su pijama larga.

Pero había algo que estaba jalando sus pantalones, se preguntaba que podría ser, tal vez un animal, porque escuchaba pequeños ladridos.

Pudo sentir sus ojos brillar cuando vio un pequeño cachorro con pelaje negro pero unos ojos bastante únicos como los de Hua Cheng.

Esta desnutrido y lleno de barro, su pijama se había ensuciado. No le importaba eso igual lo tomó en brazos.

Sus ojos brillaban al verlo, Hua Cheng prefirió no decir nada hace rato que no veía ese brillo en sus ojos.

Claramente a Xie Lian le importa cinco que el cachorro estuviera lleno de barro igual lo tomó en brazos y lo metió debajo de su ropa.

A Hua Cheng no le gustó esto, quien sabe que enfermedad tengo el perro o que animales tenga en la piel, ¿Pero como le dices a tu pareja que no?.

- San Lang - un pequeño murmullo salió de su boca, Hua Cheng sabía perfectamente que es lo que pediría.

- dime - oh no esa expresión no, nunca había podido decir un "no" con esa expresión en el rostro de su Omega.

- ¿Puedes llevarme en brazos? - pregunto. Hua Cheng sintió que le daría un infarto, ¿Como una persona puede tener un rostro tan hermoso?.

- toda mi vida si quieres - le contesto.

Xie Lian mantenía al pequeño cachorro debajo de sus ropas, unas partes de su piel tenían barro y su pijama también, pero no le importaba, sentía que había encontrado una nueva razón para vivir.

Su cabeza cayó en el pecho de Hua Cheng, estar entre sus brazos era bastante cómodo.

Aunque el cachorro debajo de sus ropas se veía bastante cómodo sobre su pecho, no entendía que tenía de cómodo su pecho, sus hijos se duermen al instante cuando están ahí, Hua Cheng después de sacarle leche también hace lo mismo y ahora el perro también.

¿Debe negar que también le gusta dormir sobre Hua Cheng?, La emoción lo invade, realmente es tan cómodo dormir sobre el, pero lamentablemente no puedo hacerlo hasta que termine de amamantar.

Sus pies tocaron el suelo, un beso en su mejilla fue dejado, sus mejillas se sonrojaron, pero tenía que encargarse del cachorro.

Su pijama estába hecha un desastre, sus lindas pantuflas de conejitos también estaban sucias, que bueno que su brazo vendado esta cubierto por su abrigo.

- San Lang, ¿Estaría bien si le doy de mi leche? - pregunto. Hua Cheng sintió que le iba a dar un infarto.

¿¡También tiene que compartir su leche con un perro!?, ¡No!, Aunque no cree que sea buena idea que el cachorro tome de esa leche.

- no - le dijo, un puchero se formó en el rostro de Xie Lian. Hua Cheng quería morir en ese instante, se veía tan adorable.

¿Había algo más adorable que su Gege?, Por supuesto que no, pero ahora debía concentrarse, no era buena idea que el cachorro debajo de la ropa de su pareja se quedará sucio y sin comer nada.

~You are my sweet Secret~ PAUSADA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora