Capítulo 1

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Movimiento 1: Una Danza.

Galas. La ruina absoluta de la existencia de Draco.

Todos los fines de semana su madre insistía en que asistieran a algún baile benéfico u otro, honrando al público mágico con sus mejores túnicas. Redención buscada y literalmente comprada; ahora solo hacían donaciones a lo que Draco consideraba amargamente como "causas positivas de Potter".

San Mungo, particularmente Janus Thickey Ward; la reconstrucción de Hogwarts, y absolutamente cualquier cosa con la palabra "Muggleborn" en el título que no estuviera acompañada de algo despectivo.

Lucius no saldría de Azkaban en el corto plazo, lo que significaba que las sutilezas públicas de Malfoy requerían que Draco se acicalara y sonriera en todos los salones de baile de Inglaterra y, a veces, en el extranjero. Tuvo que hacer las paces con antiguos enemigos, escribir declaraciones de disculpa (en su mayoría genuinas) por su conducta adolescente y mantenerse alejado de cualquier cosa política (no hay problema, a Draco le importa una mierda el Ministerio).

Todo este cambio de marca y pulido de reputación también alimentó los objetivos de Narcissa. Su madre estaba prácticamente ansiosa por la parte del compromiso, empujando a Draco frente a cada mujer elegible imaginable, ansiosa por organizar una boda Malfoy extravagante lo antes posible.

Madre probablemente tenía razón en eso. Su mundo amaba el espectáculo. Sería la joya de la corona en la narrativa de redención cuidadosamente elaborada de Narcissa.

Draco amaba a su madre, la amaba, pero eso no significaba que no pudiera lamentarse de su vida de vez en cuando.

Tomemos, por ejemplo, su realidad actual: demorarse con alcohol barato en una mesa de la esquina en el Gran Comedor de Hogwarts. Aunque honrar a Severus Snape era técnicamente la razón por la que todos se habían reunido aquí esta noche, la verdadera razón de él estaba a unos quince metros de distancia, charlando torpemente con una manada de admiradores.

Harry Potter había insistido en esta celebración. Y cuando Harry Potter insistió en las cosas en estos días, el público realmente escuchaba la mierda.

Hogwarts había sido reconstruido en el lapso de unos pocos años, y no solo reconstruido, sino ampliado. Ahora había un ala entera en las mazmorras de Pociones. Y esta noche, la dedicación oficial y la apertura del Ala de Pociones Severus Snape convocó a una celebración masiva de burócratas, profesores actuales y anteriores, y todo tipo de ex alumnos de Hogwarts.

—Deberías saludarlo. A Potter —instruyó Narcissa en voz baja. Draco se encogió de hombros y bebió champán demasiado seco.

—Si conozco a Potter, vendrá a nosotros.

Si bien Draco sintió que se demostraría que tenía razón, tampoco tenía ganas de soportar el séquito de Potter. Dicho séquito estaba compuesto en su mayoría por Weasleys, así que no, gracias.

Narcissa dejó pasar el asunto y escudriñó la habitación, sin duda buscando al miembro de la alta sociedad de sangre pura más cercano para endilgarle a Draco.

Pero Draco observó a Potter. O más bien, A Potter y a sus dos compinches familiares.

Uno parecía menos familiar en estos días.

¿Cuándo fue la última vez que había visto a Granger? ¿Varios años, tal vez?

Draco vio que Potter hizo un gesto en su dirección, hacia donde estaba sentado con Narcissa. Granger asintió mientras Weasley fruncía el ceño y cruzaba los brazos sobre el pecho. No fue difícil, incluso desde la distancia, descifrar el plan de Potter y cuál de sus amigos lo apoyaba.

Movements, Contrived and Improvised - dramione *TRADUCCIÓN*✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora