el carnicero - licha martinez x nico tagliafico

siete.

nicolás.

termino de pasar el trapo en el último rincón del departamento, admirando cómo el piso brilla con un aroma que el poett denomina "suavidad de bebé".

ignoremos lo turbio que es nombrar un perfume de pisos como una sensación y sigamos.

hoy por ser viernes tocó mí actividad favorita: limpiar a fondo mí casa para nada más ni nada menos que entregarme a los pequeños placeres de envejecer.

después del episodio de ansiedad que me causó el viejo choto de mí padre, busqué distraer la cabeza con cualquier cosa. literalmente.

fue tanta la desesperación que me anoté a un taller de tejido para mantenerme ocupado ya que, por ser verano, no dudé en tomarme una licencia y evitar el sufrimiento de ir a trabajar con cuarenta grados a la sombra y los huevos marinandose en el traje ejecutivo que uso en la oficina. ni hablar de que con estos calores no aguanto ni mí sombra.

en fin, mientras espero mí certificado de alumno sobresaliente que me gané por tejer una frazada con la cara detallada de lady gaga como diseño final, me meto al grupo que comparto con los chicos a ver si tengo que negarme a participar de algún plan que hayan armado para esta noche.

[chat: la banda inclusiva 🤝🏽🏳️‍🌈]

participantes: rodrigo, alejandro, son heung-min y tú.

tú: algún plan para esta noche??

rodrigo: qué pasa mí amorcito, ya me extrañas??

tú: no, tengo que ver qué planes tuyos rechazo hoy.

rodrigo: ay por qué sos así, ves por qué no te doy bola??

rodrigo: quedate tranquilo anciano, hoy no hay planes. vamos a pasar un domingo sereno y tranquilo. 😎

tú: es viernes, rodrigo.

rodrigo: ya me quitaste la serenidad...

resoplo, parece ser que hoy es viernes de descanso también.

me dejo caer exhausto en el sofá mientras busco con qué matar el tiempo hasta la hora de la merienda. engancho mí capítulo favorito de los simuladores en netflix y lo reproduzco mientras me acomodo.

obviamente, me quedé completamente dormido.

asumo que habrán pasado varias horas porque cuando recupero la consciencia, lo primero que veo, a través del ventanal que da al living, es el cielo estrellado.

lo segundo que veo es a rodrigo con una expresión divertida, vestido como si un pansexual le hubiera vomitado la ropa.

a su lado está ale, vestido de igual forma pero en colores neutro, junto con son que parece ser el único que no fue vestido por un ciego.

los tres me miran como si me estuvieran esperando hace media hora.

— ¿se puede saber por qué están parados en mí living, vestidos como criaturas yendo a un cumpleaños y mirándome como tres locos mientras duermo?

— estamos hace media hora esperando que te levantes y te vistas.— explica rodrigo, con un tono de obviedad.

lo suponía.

— ¿vestirme para qué?

— porque vamos a salir, duh.

lo miro, incrédulo.

— ¿vos me estás jodiendo?— pregunto con impaciencia.

— ¿te parece que estamos jodiendo? — me contesta como si fuera una criatura.