Tacto || TaeGyu

24 || Decepción

|| 6 / 7 ||

Se despidió de su tío, entró a su casa y corrió escaleras arriba, sin detenerse a revisar si sus padres estaban en casa, tampoco le importaba. Cerró su puerta con llave, corrió a su cama para recostarse y cubrirse con sus blancas sábanas, quería desconectarse del mundo un rato y nada mejor que dormir para hacerlo.

Para su mala suerte no logró conciliar el sueño tan fácilmente como lo había pensado, por su mente pasaban varias cosas, cosas que debió decirle al psicólogo pero no se le había ocurrido en ese momento. También se replanteó el no haber mencionado nada de sus sentimientos confusos de adolescente.

Supuso que YeonJun ya le había contado a su psicólogo sobre su pequeña atracción hacia su compañero, pero él seguía creyendo que era más importante tratar su hafefobia antes que sus sentimientos, de esos se daría cuenta un poco más adelante. Sus ojos poco a poco se sentían más pesados, decidió sólo acurrucarse lo más que pudiera e ignorar sus pensamientos.

Se quedó dormido, sí, pero no tanto tiempo, unas horas fueron suficientes para él. Se levantó para hacer las tareas del día siguiente, mientras las hacía escuchó la puerta de su casa y supuso que eran sus padres llegando de su oficina, no pasó mucho tiempo para que lo confirmara.

ㅡ TaeHyun, baja que la cena está servida. ㅡ

ㅡ No puedo, mamá, estoy haciendo tareas. ㅡ Habló sin voltear a verla, su mano izquierda se movía sobre una hoja blanca haciendo un mapa visual. Su madre sólo se fue sin insistir, giró su cabeza para divisar su rostro en el reflejo del escritorio de cristal, se veía cansado.

Una vez terminó sus tareas volvió a la cama sin pensar en la cena. Despertó en otro día común y corriente, su alarma lo despertó, en la sala lo esperaba un desayuno rápido y tenía el mismo horario para ir a clases.

No quiso desayunar así que sólo se bañó, lavó sus dientes y tomó sus cosas para irse rápido al colegio, cómo era tan temprano no habían alumnos por ahí. El psicólogo no habló de muchas cosas, más que todo le hacía preguntas para conocerlo un poco.

Le recomendó hacer un amigo cercano, no tanto cómo para tocarlo, pero sí lo suficiente para confíar un poco en él, eso no era nada fácil teniendo en cuenta que él no era el más social del salón. Acomodó las cosas en su mesa cuando llegó y se dedicó a esperar que llegaran sus compañeros, aunque frunció levemente su ceño al ver entrar rápido a un chico alto y de cabellos rojos-exageradamente rojo cómo para cumplir el protocolo escolar-, él también se sorprendió al verlo.

ㅡ Amigo, ¿Qué haces aquí tan temprano? ㅡ Preguntó haciendo eco en el salón, hubo un gran silencio, TaeHyun no pensaba responder.

ㅡ Simplemente vengo temprano. ㅡ El chico asintió no tan convencido, pero se encogió de hombros al finalㅡ ¿Y tú? ㅡ

ㅡ Mi madre es la directora, así que vengo con ella temprano y de pasó la ayudo con algunas cosas. ㅡ

ㅡ Porque tu madre es la directora te dejan venir con el cabello así. ㅡ

Llevó su mano a su cabello y rioㅡ No está prohibido tener el cabello pintado, solo que yo exageré un poco... Me gusta tu cabello, es natural, ¿Verdad? ㅡ Asintióㅡ Ya quisiera yo, ¿Sabes cuánto gasto sólo con que me decoloren el cabello? ㅡ

Siguió hablando de un par de cosas más, TaeHyun sólo lo escuchaba y seguía con la mirada, el chico estaba pegando algunas cosas en las paredes. Cuando terminó se sentó delante de él, eso lo puso un poco incómodo y tenso, pero no lo mostró.

ㅡ Mi nombre es HyunJin, estoy en quinto, así que no creo que nos topemos mucho. ㅡ Estiró su mano, TaeHyun negó y el chico frunció el ceñoㅡ ¿Eres de esos chicos de tercero que se creen tan mayores y por eso son groseros? ㅡ