Cap. 37: Verdad

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- Esto es el colmo, ¿de verdad tenían que seguirme hasta aca?

Abrió la puerta de su dormitorio de un puñetazo y se volteó a mirarlos a la defensiva. Los tres habían estado formando una columna y ahora se alineaban en una fila, mostrando diversas reacciones. Armin estaba jaloneando a Jean y Connie sacudía la cabeza; su rostro cargado de un aspecto sorprendido y una sonrisa delineando las esquinas de su boca, que se abrían al fin para hablar.

- No puedo creerlo, Eren. No puedo creer que no me lo hayas contado, ¿cuánto tiempo van juntos?

Dejó que el aire se escapase de su boca lo más lento posible y apretó las mandíbulas.

- ¿Qué es eso que vimos, eh? - Jean salió un poco de la borrosa nube en la que se encontraba y su rostro se volvió más asustadizo que antes.

- ¿Qué significa eso que vimos afuera del cine?

Eren apretó más la boca, pero siguió sin decir nada. Sabía que algo así sucedería tarde o temprano y aunque no le importaba soltarlo todo, no estaba con ganas de soportarlos, enfrentarlos ni responder a todas sus estúpidas preguntas.

- ¿Qué te pasa, Eren? ¿Qué fue eso de allá en el cine? – volvió a preguntar Jean con la incredulidad y preocupación bombeándole la sangre. - No me digas que...

- ¡Es lo que han visto, joder, es lo que han visto! Ya me escucharon, ahora larguense que no quiero hablar del tema.

- ¿Es lo que hemos visto?

- Eso mismo, es lo que han visto.

- Tú no eres gay.

Se mordió la lengua y se pasó la mano por la cabeza. La situación estaba empezando a cansarlo.

- A mí me es simpático el muchacho y creo que hacen una buena pareja, pero igual debiste habérmelo dicho antes. Pudimos haber hecho citas dobles y conversado mucho sobre eso... - Connie se encogió de hombros y adoptó una expresión más entusiasmada. - Sabía que tarde o temprano, te enamorarías, ¿recién están saliendo?, ¿dónde lo conociste?, ¿cómo se llama?

Armin tosió, casi ahogándose ante lo que había escuchado y ni que decir de Jean que parecía más blanco que un papel.

-Estás pasando por un mal momento, eso es todo. Sé que el chico se ve muy lindo y todo eso, pero... ¡es un hombre, Eren! ¿Cómo vas a estar con un hombre? Tú mismo hablas pestes de los maricones.

- Cierra la boca, Jean, se ven genial juntos.

- ¿Genial juntos?

- Lárguense. - su voz resonó en la habitación, seca y cortante.

- Ah, ya sé cómo fue el asunto. He escuchado cómo son, una vez que te ponen el ojo, te acosan y no se detienen hasta atraparte. Seguro que se te mandó encima y que hizo de todo para meterse por tus ojos...Con razón, esa vez en el centro comercial estaba todo pegado a tu hombro... Fui un imbécil al no darme cuenta y tú que me dijiste que no pasaba nada.

Connie siguió con la sonrisa de antes, ignorando todo lo que escuchaba y moviendo su mirada a través de todos los dedos de Eren, más interesado que nunca.

- No le hagas caso. - Armin suspiró. – hacen una linda pareja, además deben de estar mucho tiempo juntos por los anillos de pareja que tienen, ¿van uno o dos meses?

- ¿Anillos de pareja? - Jean pareció ver al mismo demonio cuando sus ojos se fijaron en el anillo extravagante que tenía en el dedo índice. -Mierda, ¿qué está mal contigo, Eren?, ¿esto es una broma?

-Solo lárguense.

- Escucha, entiendo que estés estresado y que creas que te sientes atraído por él, ya que has estado encerrado acá y lo veías todos los días, pero tampoco hasta tal límite como para que tengas una relación con él. - empujó la silla del escritorio y se volvió con los ojos aterrados. - Es que no me puedo creer que te gusten las pollas, Eren, eso nunca. Antes, que me cuelguen y me corten en pedazos.

Inocencia Pasional - Ereri (Adaptación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora