𝐇𝐀𝐏𝐏𝐈𝐄𝐑 | A veces siento que no merezco la felicidad, Gaeul dijo que no era merecedora de ello, y yo... Le creí completamente.
Le creí, hasta que lo conocí.
Ambos estábamos rotos, creímos ciegamente en la falsa bondad de personas con maldad...
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La sangre recorría que estaba entre sus manos le causó un gran susto, temblorosa intento levantarse pero aquel intento fue en vano, su vista distorsionada y el mareo se lo impidieron.
Si bien no era la primera vez que eso le sucedía, estaba asustada, jamás habían llegado tan lejos.
Las lágrimas recorrían sus mejillas y los sollozos se hicieron nuevamente presentes en aquella gran habitación.
—¿Por qué lloras, pequeña tonta?
Decía de manera sarcástica y burlona, aquella temerosa chica no lograba comprender el porque a alguien que jamás le había hecho algo la martirizaba de esa manera.
—Solo nos estamos divirtiendo entre amigas, ¿No es así Myeok? —Tomo varias hebras de su, ahora destruido y sucio, cabello para después con mucha fuerza tirar de este para que ella alzará la vista.
A su vez, la pelinegra estaba aterrorizada, con dificultad pudo mantenerse de pie al sentir aquel fuerte tirón, sabía que no podía hacer nada por detener el acoso escolar que recibía.
Aunque rogaba por que aquellas chicas se detuvieran y tuvieran piedad de su persona, era más que consciente de que sus plegarias no serían escuchadas, así que solo se limito a soltar un jadeo de dolor y a mirar con temor a su victimaria.
—¿Que pasa Myeokie?
Cuestiono una pelinegra, otra de las chicas que estaba en la habitación, mientras una sonrisa burlona se formaba en sus labios y a pasos cortos y lentos, como si deseará añadir más terror a la situación, se acercó a la contraria quién la observaba con temor.
—¿Estás llorando? —Fingió preocupación y tomo entre sus manos el rostro dañado de aquella víctima, haciendo parecer que de verdad había algo de culpa y empatia en lo que dijo —¡Ay no! ¡MinJeong! Estás siendo muy mala con My, podrías hacerle más daño.
—¿De verdad? —Cuestiono de manera grosera y con un tono de burla en sus palabras, pero en la siguiente oracion cambiaría a uno más sincero y culpable. —Lo siento Myeok, no sabía que estábamos siendo tan groseras.
—Si Myeok, lo sentimos tanto. —Soltó una tercera voz con el mismo tono que la anterior.
La chica de cabello cobrizo solto a Myeok con suavidad, la ya mencionada estaba confundida y con cierto miedo empezó a retroceder hasta chocar con una de las paredes del salón en dónde se encontraban, sabía que ellas jamás se habían disculpado y que nunca lo harían.
No sabía que decir o hacer así que simplemente se quedó expectante ante las chicas y a su posible siguiente mala jugada.
—Es que eres tan bonita.. ¡Tenía tanta envidia de ti! —MinJeong o mejor conocida como Winter, la más bajita de las tres chicas, comenzó a acercarse a ella. —Todo de ti es bonito, tus ojos son grandes y tú cabello.. Es precioso. —Tomo un mechón del cabello de la menor y sonrió. —¿O no, chicas?
