» Ligue « | Dibu x Livaković

04

— ¿Desayunaste bien? — Cuestiona Lionel tratando de sacar tema de conversación.

— Si, re bien, ahora me voy a bañar y de ahí no se, pasear. — Contesta mientras sube las escaleras para llegar al sector argentino del hotel.

— Yo tengo pensado ir a la habitación de Guille, tenemos cosas pendientes que hacer.

— Mierda, Es medio día y ya van a coger?, Que rápid-. — Emiliano fue interrumpido por el terrible sopapo que le dio Lionel en la cabeza, eso si dolió.

— No vamos a coger pelotudo, vamos a conversar. — Responde Lionel con un leve fastidio.

— Lo que vos digas, por cierto, no voy a ir a pasear. — Comenta Emiliano.

— ¿Porque?.

— Me hiciste acordar que tengo una cita con mí querida novia, y no la voy a dejar plantada, pobre. — Explica.

— Ah bueno, bien entonces, nos vemos a la noche.

— Si, hasta tarde quizás — Finaliza Emiliano despidiéndote de su capitán, pues ya estaba en la puerta de su habitación.

Los dos se despiden con un "Chau", muy formal.

19:30 hs pm, Nublado.

El clima era ni tan bueno ni tan malo, las nubes ocultaban todo el cielo, haciendo pensar a Emiliano que llovería. Mientras caminaba hacía el hotel, estuvo pensando mucho en esto del tema de que pasaría si llega a encontrar alguien que le haga que se olvidé de su novia, pero no le dio mucha bola. Sabía que su novia era fiel y este igual.

Recién llegaba de su cita con la que tanto amaba, fue normal y hermosa, entre el vino y las latas de cerveza que este se había tomado, sumando la napolitana con arroz y el postre que fue un rico flan. Este estaba mareado  y en más con un dolor de panza terrible.

— Uh amigo, ¿Te sentís bien? — Pregunta su amigo Lionel quien estaba en la recepción y al verlo entrar, se preocupa.

— Si, re bien, un poco de mareo y dolor, pero todo bien — Aclara.

— Entonces no estás bien, compa.

— Lo estoy, no te preocupes.

— Bueno, ahora suponiendo que estás bien, te quería consultar algo.

— ¿Que cosa? — Pregunta intrigado.

— Hay un Bar cerca del hotel, quería decirte si queres venir conmigo y ota, sería divertido, pero depende de tu estado ahora. — Explica mirándolo.

— ¿Un bar? De inmediato, voy a ir. — Avisa brindándole una sonrisa.

— Excelente, ¿Querés cambiarte o algo?, Estoy esperando a Ota. — Le pregunta aún con su mirada fija en el.

— No, estoy bien así. — Contesta mientras va hacía los sillones con la intención de sentarse porque sabe que su amigo tarda mucho en elegir la ropa, etc.

Cuando Emiliano estaba apunto de sentarse una voz le llamo la intención, causando que lo mire con odio.

— Hijo de tu puta madre, me iba a sentar y apareciste. — Reclama mirándolo con completo odio.

— Por boludo.

— Hijo de puta.