13. Vergüenza

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Pao

Es lunes por la mañana y solo puedo sentir vergüenza por mi comportamiento del sábado en la fiesta, es obvio que van a saber que he sido yo la chica porque se ve claramente en el video que es una chica de rojo y pues Julian reposteo mi foto de nosotros dos juntos.

El recordarlo hace que sienta más vergüenza que la de antes.

-Oye Pao, vi que saliste con Julian, no sabia que se conocían. -Dice Daniel
-Si, me lo tope ese día en la fiesta, -miento.
-Pensé que lo conocías, te iba a decir que me consiguieras un autógrafo de él, es mi jugador favorito.
-Oh ya veo Daniel.
-Paola, tu me gustas, quiero que seas mi novia. -Dice
-Daniel, ya te dije que no, estoy centrada en mi carrera.
-Pero Pao, hazme caso.
-Daniel ya te dije que no.

Es lo último que le digo y salgo al del edificio y voy a mi carro, tengo que llegar al club. Manejo lo más rápido que puedo y llego en tiempo récord.
Entro saludando a todos y veo que no esta Lucas, por lo que empiezo a llamar al equipo femenino. He sido consciente que ellas han mejorado un montón y ahora están felices con los cambios que les hice a sus dietas.

Al terminar con el equipo femenino tengo que ver a al equipo masculino, salgo y aun no esta a Lucas para avisarle que ya termine con las mujeres.

Salgo al campo para ver que ellos están entrenando veo a varios de ellos tomando agua y me acerco a hablarles.

-Hola, ¿han terminado ya?
-Si algunos sí, otros aún no
-Los que ya terminaron pueden llegar a la clínica, tengo que evaluarlos.
-Claro ahorita llegamos.

Regreso a la clínica pero voy a medio camino cuando me encuentro a Julian.

-Hola Paola
-Hola Julian
-¿Siempre quedamos hoy a las 6?
-Si, a las 6, te veo luego.

Sigo mi camino hasta el lugar al que voy. Pasan unos 5 minutos y llegan varios jugadores y les indico lo que vamos a hacer.

-Quiero que me cuenten como les fue con los cambios y si hay alguna molestia.
-No para nada, pero aun nos hemos quedado con algo de hambre.
-Bien, entonces les daré proteína como complemento, eso los va a ayudar a mejorar y para que la tomen después del entrenamiento. También les aumentare las porciones de comida.
-Gracias -Dice Palmer
-Pasen mañana a la hora de salida para que les entregue los cambios, junto con lo de la proteína, porque las tengo que ir a traer a la bodega, porque casi solo las mujeres la toman.

Les hago sus evaluaciones físicas a los 3 que han llegado, tanto en peso y masa corporal por lo que veo que están bien.

El resto de mi tarde se me pasa atendiendo al equipo y evaluando como hacer los cambios pertinentes a cada uno de ellos. Empiezo a teclear los cambios en las dietas que les que dado y me gustan.

Camino a la bodega y me encuentro a Lucas hablando con Pep.

-Oh Pao, que bueno verte.-Dice Lucas
-Hola Lucas, que bonito verte de nuevo, -Digo
-Mira te presento a Pep, el entrenador.
-mucho gusto. -Digo
-El gusto es mío. -Dice y me entrega su mano. -¿De casualidad nos conocemos, es que siento que he escuchado tu voz antes?
-No para nada, solo una vez que nos vimos en los vestidores.
-Si es cierto, perdona por no presentarme esa vez, pero no es la primera vez que alguna chica intenta llegar a los vestidores de ellos.
-Ahora entiendo porque se alteró cuando me vio ese día.-Digo
-¿Tu vas a los partidos?
-Si
-Interesante, -Dice
-Por cierto Lucas, ¿necesitas algo de bodega? Así aprovecho a traerlo.
-No, dale tranquila que no necesito nada.

Sigo mi camino hasta la bodega y entro por varios botes de las proteínas para casi todos, por lo que son varios y pesan, busco el carrito donde llevan utileria pero no lo encuentro así que tendré que cargarlo todo yo sola. Veo que hay bolsas y empiezo a meter los botes de proteínas ahí para ir haciendo pequeñas torres. Son casi 6 bolsas con todos los botes. Y se ven pesadas.
Como puedo voy jalando las bolsas cuando veo a dos jugadores venir, Julian y Laporte.

-¿Necesitas ayuda?
-Si por favor. -Digo
-¿Para que son las proteínas y por qué son muchas? -pregunta Julian
-Para ustedes, les daré proteína para probar cambios, ya que varios se quedan con hambre luego del entrenamiento pues les daré la proteína para que se la tomen y ver que pasa.

Laporte y Julian toman las bolsas y no me dejan tomar alguna y me acompañan de regreso a la clínica.

-Gracias, las pueden dejar ahí, aun tengo que rotularlas.
-Está bien, nos vemos mañana Paola -Dice Laporte
-Adiós, -Digo
-¿Vienes Julian?
-No tranquilo, tengo que buscar a Lucas, -explica.

Laporte sale y nos deja a Julian y a mi en la clínica. Empiezo a sacar los botes para alargar más el tiempo en que tenemos que hablar, Julian no dice nada y espera que saque todos los de la primera bolsa. Cuando voy a sacar los de la segunda bolsa me detiene.

-Sabes que tenemos que hablar.
-Lo sé, pero no se como empezar, -Digo
-Tranquila que no eres la única que siente vergüenza por el tema.
-¿Por qué dices que tengo vergüenza?
-Paola, te has puesto roja.

Levanto la cara y me veo en el espejo que hay ahí y en definitiva estoy roja.

-¿Por qué me has besado Julian?
-Porque me pareces muy linda, además de me gustaste desde la primera vez que te vi.
-¿Qué, como te gustó? Tal vez puedo llamarte la atención pero gustarte es algo más.
-Si, desde el día que te vi en el partido me pareciste una chica muy linda, luego cuando chocamos el otro día en la entreda y de ahí fue cuando mis compañeros me dijeron que estabas aquí, no lo creía hasta que te vi.
-Julian, yo no se que decir porque siempre has sido mi jugador favorito, nunca me había pasado esto, es como si esto fuera irreal.
-Créelo porque no siempre pasa, y esta vez tienes suerte porque la araña se ha fijado en ti,-dice y siento mi cara caliente por la vergüenza que estoy teniendo.
-Entonces dime, ¿que propones?, -Digo y Julian me mira directamente
Antes de dar una respuesta.

Un gol para Paola [Julián Alvarez]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora