#YM2: cuando las flores se marchitan

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pareja: yoonmin

-hanahaki concept
-no smut
-confused ending
-drabble

Si pudieran preguntarle a Jimin sobre qué cosa lo hacía feliz en el mundo, rápidamente mencionaría a su pálido novio

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Si pudieran preguntarle a Jimin sobre qué cosa lo hacía feliz en el mundo, rápidamente mencionaría a su pálido novio.

Llevar tres años de relación no era fácil, claro que no, y era muy utópico mirar como Park Jimin y Min Yoongi seguían mirándose como si fuera la primera vez que se encontraran y Cupido se encargara de juntarlos en contra todas las adversidades. No era sólo describir a una de las parejas más bonitas de la Universidad de Artes de Daegu, era... como contar una historia de amor predecible con el famoso bibidi-babidi-bo
y un felices para siempre.
Hasta que de pronto Jimin comenzó a faltar a clases y Yoongi comenzaba a volverse paranoico al no encontrar a su pequeño novio.

Se esfumó, como si el simple viento cual hoja lo hubiera deslizado por los cielos y desapareciera en un abrir y cerrar de ojos.
¿Dónde diablos estaba Jimin?

Arrastrando el paso estaba Yoongi con ojos llorosos preguntando por las calles por el paradero de su amante; noches sin pegar sus párpados y comidas vacías eran lo que parecía ser su nueva rutina al continuar los días, no entendía lo que estaba pasando, ¿su novio estaría bien? ¿tendría alimento, agua y techo donde estuviera? Nunca lo iba a saber, las respuestas eran lejanas a sus preguntas llenas de ansiedad y miedo.
Tres semanas después de la desaparición de Jimin pudieron encontrar su cuerpo en un lote baldío cerca de su hogar.

Ojos cristalinos que alguna vez estuvieron llenos de vida veían un punto fijo al cielo.

Y lo que alguna vez fue una hermosa sonrisa radiante con aquellos labios rosados fueron el vago recuerdo de lo que ahora eran miles y miles de pequeños Lycorys radiata y tallos delicados abrazando su cuello.

Y lo que alguna vez fue una hermosa sonrisa radiante con aquellos labios rosados fueron el vago recuerdo de lo que ahora eran miles y miles de pequeños Lycorys radiata y tallos delicados abrazando su cuello

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en la cultura japonesa, los lycoris radiata se les asocia tradicionalmente a la muerte con el fin de hacer la transición a una nueva vida.

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