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Louis se encontraba en clase de biología, la profesora no estaba, así que cada uno hacía lo que quería, el estaba hablando con Luke sobre cosas aleatorias y riendo de sus chistes. Harry no pertenecía a esa clase, pero por algún motivo que solo Dios sabe, el estaba allí con su grupo de amigos riendo.

- Hey, Luke. – Gritó un chico del grupo de Harry. Ambos miraron allí y prestaron atención. – ¿Me dejas escanear tu código de barras?

- Si, a ver si me sale un temazo de Spotify – Dijo otro. Louis no lo pillaba, pero vio a Harry reírse con ellos y por algún motivo le molestó.

- ¿De que hablan? – Susurró.

- Tommo, hay algo que no te conté.

- Dime. –

- Es complicado, prométeme que dejaras el tema y no me darás consejos ni ningún sermón, tampoco se lo contaras a nadie.

- Claro. – Respondió. Luke se levanto la manga de la camiseta y enseño las cicatrices en su brazo.

- También tengo en los muslos y tobillos. Alex me agarró de la manga el otro día y al levantarla lo descubrió, ahora lo sabe todo el mundo. – Lo dijo con tranquilidad, como si estuviese acostumbrado.

- Espera, ¿De que son las cicatrices?

- Louis... son autolesiones. – Su mundo dio un giro de 360. Nunca pasó por su mente que Luke, una de las personas más confiadas que conoce, se hiciera esp. Mucho menos se esperaba que Harry se riera.

- Pero... ¿Cómo es que t...? –

- Louis, lo prometiste.

- Perdón. Estoy para lo que necesites.

- Alex me dijo lo mismo, pero gracias. – El timbre sonó y todo el mundo salió del aula, Luke el primero.

Louis no espero a su novio, se fue directamente a su taquilla a sacar las cosas para la siguiente clase.

- Hola, Lou. – Era Harry. Este le abrazó por detrás, abrazo que no fue correspondido, ni tampoco el beso que fue después. - ¿Qué pasa, Lou?

- Déjame. – Se intentó ir, pero el rizado le retuvo.

- Ey, ¿Qué te pasa?

- En serio, Harry. ¿Qué te pasa en esa diminuta cabeza para burlarte de los problemas ajenos? – Ahora si que estaba enfadado.

- Yo...

- Calla. Imagínate si me pasase a mi, ¿también lo contarías por ahí y te reirías? Te esperaba diferente, se supone que eres comprensivo y entiendes mis problemas.

- Los entiendo.

- ¿Qué harías si yo me autolesiono? – Harry hizo una mueca de miedo y confusión.

- ¿Lo haces?

- Solo imagínate que si. Imagínate que toda la clase se burla de mi por eso.

- Tu y yo sabemos que es diferente.

- No, lo único que te pido es que no seas como los gilipollas de tus amigos- Y era la primera vez que oía a Louis decir una palabrota, eso seguro.

- Lo siento, Lou... Tienes razón, pero tu sabes que a ti te tocan un pelo e incendio la escuela. – Y no metía. – Nunca he estado cerca de una situación así, no lo pensé.

- Lo sé, pero no me tienes que pedir perdón a mí.

- Ahora voy a donde Luke. Lo siento mucho, Louis. – Dijo dándole un abrazo. – Que sepas que, si te pasa eso o cualquier cosa, estoy aquí para ti, te quiero mucho. – Y de verdad, no intentaba manipularle con palabras bonitas, pero es que ahora sabía lo imbécil que era.

- Y yo, Hazz. Gracias por entenderlo.

- Dios, he sido un gilipollas.

- Sí.

- Luego te veo, bebé.

- Adiós, Poste. – Se dieron un beso y Harry se fue a buscar a Luke por el pasillo por el que se había ido.

--

Harry se sintió como un estúpido el resto del día, no había palabras para describir lo miserable que se sentía. Y aún que Luke le había perdonado, se seguía sintiendo fatal. Haber defraudado a Louis era una de los motivos. Louis se conformaba con muy poco, era un hecho, por eso decepcionarle era bastante complicado. Harry solo había visto en tema de las autolesiones alguna vez en la televisión, no sabía ni de donde salían ni como ni el por qué. Se sentía horrible.

--

En la comida, Harry se sentó en la mesa de Louis en el momento en el que le vio.

- Hola, pequeño.

- Hola.

- ¿Estas bien?

- Sí, mira. – Louis alzó un libro, era una historia de la que Harry había oído hablar, pues era una película.

- ¿Qué es?

- Es un libro, para ti. Lo encontré en la biblioteca.

- ¿Por qué me das un libro?

- Alguna vez te has leído "Alicia en el país de las maravillas" – El mayor negó. - ¿Te has visto la peli? – Volvió a negar. – Léelo, te va a gustar.

- Como quieras. – Tomó el libró y lo apoyó en la mesa. – ¿Has comido?

- No tengo mucha hambre.

- Como quieras, voy a por mi comida. - El rizado se alejó de la mesa y fue al mostrador. Louis se quedó esperando pacientemente en su sitio cuando vio a Harry con un sándwich y cola en su bandeja y un plato con un trozo de tarta en este. – Toma, se que no tenías hambre, pero solo quedaba este y te lo iban a robar. No hace falta que lo comas si no quieres.

- No, esta bien, me conoces. – Le dio un beso y Harry le dio la más amplia de las sonrisas.

- Te quiero, Mamón.

- Y yo, Gayrry.

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Dulce criatura: Aquí está la foto

Hazz: Tengo cara de gay

Dulce criatura: Hazz!!!

Hazz: Que pasa?

No es malo

Lo soy

Dulce criatura: Buenas noches, poste

Hazz: Buenas noches, bebé

All the love:

Anónimo

Si os pasa algo así, mis dm's están abiertos. No hace falta que me escuchéis, solo os escucho y apoyo. Que sepáis que al final, pase lo que pase, siempre va a salir el sol por la mañana. <3

Te amo, mamón (Larry Stylinson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora