Coronel Quaritch

Capítulo 15

Final Alternativo, comienza hoy

La criatura miraba desde arriba a su amiga aparentemente muerta, fue a su lado gruñiendo del coraje verla muerta, el vínculo que hay en ellas era realmente bueno, y se acabó, lamio la cara de la avatar para oler la lanza en su vientre.

La alzó con su pata para ver una gran caridad de sangre perdida en el suelo, con su cabeza empuja la lanza deteniendo la hemorragia, unas hebras moradas surgían para tapar el cuerpo de ella, asustada la cubrió con sus alas dándole calor, quería demostrar que aún vivía, su cara estába viendo a su compañera con los ojos cerrados, por dentro deseaba que despertará que le dieran otro oportunidad.

Pasaron unos minutos cuando vio a la compañera de ese hombre que ama a tanto a su dueña, él podia ayudarla, tomó en sus fauses a Odec para perseguir al otro alado, la nave se hundía hasta sumergirse, vio que el otro bajó a un piedras cercanas ahí, vio al humano salvar al otro.

—Ven conmigo hijo—Le dijo el coronel al humano, él otro le gruñido y se fue, con rapidez bajo para que la viera y la ayudara, la criatura lo sumbo un poco—¿Qué quieres?—No se giro a verla, ella lo golpio—Debes parar—La señaló, tapó su boca sin decir nada, tomó a Odec en sus brazos para limpiar su cara—Gracias por traerla a mi—La abrazo para luego apartarla, con esperanza sintió sus latidos—Son débiles, pero como si perdió mucha sangre, podemos salvarla—Se subió a su compañero para volar rumbo a la base.

La compañera los siguió agradeciendo a Eywa por escucharla, y darle de nuevo una oportunidad.

Mientras odec reconoció el lugar donde estaba, miraba la mesa con instrumentos de creación, el suelo plagado de juguetes para niños, eran de Miles, sonrie inocente recojiendo cada uno para guardarlos, era su pasado.

La puerta siendo abierta me distrajo, me gire para ver al coronel Quaritch con su semblante serio, lo ignore para seguir con los juguetes, escuche sus fuertes pasos venir a mi, el último lo tenía pisando el.

—Coronel, déjeme tomar el juguete—Le pedí, el apartó su pie, lo tome para ir a dejarlo a mi cuarto.

—¿Seguirás así conmigo?—Se cruzo de brazos, no le conteste—No fue la gran cosa.

—Y crees que eso me hace sentir mejor, tuviste mucho tiempo para decírmelo—Lo encare, el me sonrio de lado para acercarse a mi—Ni te acerques, lo único bueno que sale de usted es su hijo.

—Claro, ahora el niño es más importante que yo.

—Claro que si—Le respondí con obviedad—¿Qué es lo que hace aqui?

—Quería arreglar las cosas, pero veo que estas insoportable, te compartas como un niña—Dijo con asco.

—¿Y cómo quiere que me comporte? Cuando el que rompió nuestra relación fuiste tu.

—Estaba débil, no me culpes por eso Odec—Me tomó del brazo, me solté para alejarme—Se que no estuvo buen, pero es la verdad, no queria que te enteraras asi—Susurro arrepentido, un nudo se formó en mi garganta.

—Gracias—Respondi con la voz quebrada—Váyase, no quiero verlo—Mi corazón empezó a doler como si un puñal me clavaran.

—Se que estas enojada y tienes todo la razón, pero no me dej...

—No estoy enojada—Me señale decepcionada negando con la cabeza, el rasco su nuca—Estoy rota, estoy sufriendo y a ti no te importo engañarme—Lo señale con fuerza—Por que yo si te amaba, te amaba como nadie, se supone que ibas a amarme y me dejaste, obtuviste lo que quisiste y querías buscar a alguien más.

—Dejame, por favor—Él me habló muy cerca y note el olor a alcohol, le di una mueca de asco.

—¿Dejarte que? Ya basta—Le roge llorando, me intente ir a mi cuarto cunado me tomo del brazo con mucha fuerza—Sueltame ahora mismo—Le ordene firme.