𝟯. 𝖤𝗅 𝖣𝗂𝖼𝖾 𝖰𝗎𝖾 𝖬𝗂 𝖭𝗈𝗆𝖻𝗋𝖾 𝖤𝗌 𝖠𝗇𝗁𝖾𝗅𝗈

97 21 5
                                    

Mi cuerpo comenzaba a sentir los estragos que el frío causaba al acariciar mi piel, trate de cubrir mi cuerpo con mis propios brazos, sin embargo, de un momento a otro el calor de algo ser colocado sobre mi cuerpo y después sentí ser elevado en los brazos de alguien y de nueva cuenta el cansancio inundo mi ser

[»]

—señorita — dijo una voz entre la oscuridad— señorita, es hora de que despierte— volvió a llamar entre toda esa oscuridad no solo la voz de la persona fue la única que pude percibir también el llanto de un niño, las voces de muchas más personas y mi nariz logro percibir el horrible olor a alcohol, abrí mis ojos con pesadez y entonces encontré a una mujer la cual tenía un vestido de color café oscuro un mandil blanco, pero que al parecer por el pasar del tiempo fue tomando un color amarillento — ¿qué bueno que despertó, su amigo no dejaba de preguntar por su salud señorita? — dijo con una mueca de preocupación reflejada en sus labios

— ¿mi amigo? —pregunté dudosa, no sabía de quién hablaba y tampoco sabía quién era yo, alze mis manos para verlas y después dirigí mi mirada de nueva cuenta a la mujer que estaba aún lado de mi cama — ¿sabe usted quien soy? — le pregunte con nerviosismo tenía miedo, mucho miedo no sabía quién era yo, ni como se llamaba ese amigo o como era ni siquiera en que lugar me encontraba

— tranquila, señorita no se altere, quizás perdió sus recuerdos por el golpe tan fuerte que sufrió en la cabeza, una parte de su cerebro sufre de una inflamación — dijo y llevó su mano a el bolsillo izquierdo de su mandil para sacar una tira de pastillas — le daré una de estas pastillas, las cuales son para el dolor de cabeza, tomara un tiempo para que su cerebro se desinflame por completo — indicó saco una pastilla y la puso en mi mano después tomo la jarra de vidrio que estaba en el buro al lado de mi cama y vertió un poco de agua en el vaso

— ¿Quién fue la persona que me trajo a este lugar? — pregunte y con mi mirada analice la habitación en la que me encontraba parecía de muy mal estado, el salitre habitaba en las paredes de la habitación y el aroma a humedad era mucho más que evidente

— fue el niño prodigio — respondió y una sonrisa de orgullo se reflejó en sus labios después de unos minutos su sonrisa se enterneció supongo que fue porque mi rostro reflejo confusión — es uno de los guerreros de Marley — respondió, sin embargo lo único que causó en mi fueron más estragos de los que ya tenía en mi memoria

— ¿él es mi amigo? — pregunté de nuevo, tenía demasiadas dudas y quería saber todo lo posible de mí; sin embargo, supongo que ya estaba cansando a la pobre mujer y si en caso de que no consiguiera respuestas estaba dispuesta a escaparme antes que seguir rodeada de un montón de personas completamente desconocidas para mí

— no, su amigo es un paciente que llego hace poco aquí, ambos eran guerreros que combatían por el bienestar de Marley, si quiere le hablaré para que puedan hablar un poco, después de todo tendrán unos cuantos días más para que puedan charlar lo suficiente antes de que se vallan — dijo y de nueva cuenta me sonrió

— ¿irnos?, ¿a dónde? — pregunte y acomode mi adolorido cuerpo sobre la cama, (¿irnos acaso era un secuestro?, ¿quien me asegura que estaré en buenas manos?)

— la verdad es que hay muchos enfermos que llegaron con trastornos mentales y a los cuales tenemos que atender, ya que ni hay tanto espacio, por lo cual se decidió que cambiarían a algunos, y ustedes serán trasladados a un mejor hospital donde reciban la atención necesaria — respondió a lo que yo asentí con lentitud, ella guardó la tira en su bolsillo y se dio la media vuelta para marcharse

— quisiera ver a mi amigo, por favor — pedí ella de espaldas asintió y después se marchó, cuando por fin me encontré a solas en la habitación me di a la tarea de por fin dejar caer mi cabeza sobre la suave almohada y cerrar mis ojos para tratar de descansar, estaba a punto de quedarme dormida de no haber sido por el sonido rechinante que la puerta hizo al abrirse, volví a abrir mis ojos con pesadez y de nuevo me reincorpore sobre la cama mi vista se enfocó en un hombre de apariencia andrajosa la cual me hacía dudar de su higiene a mi parecer demasiado desalineado, su cabello es de un color marrón oscuro y largo hasta los hombros, también tenía muy poca barba y su extremidad inferior izquierda estaba amputada, poseía una venda la cual cubría el lado izquierdo de su rostro donde posiblemente antes se encontraba su ojo; sin embargo, lo que más destacaba en su rostro tan frío y serio era la mirada turquesa que poseía y la más triste, pero aun así no dejaban de ser cautivador y que de haber sabido estaba dispuesta a dejarme llevar al mismo infierno solo por él, lo cual no planeaba admitir

— ¿Quién eres?— le pregunte en un murmullo, mis manos estaban frías y sudorosas y una sensación extraña se instaló en mi cuerpo

— Eren Kruger, soy un candidato para guerrero de Marley — respondió secó, el ambiente estaba muy tenso y yo no sabía qué decir o que hacer para entablar una conversación con el extraño que se encontraba frente a mí — soy tu compañero — añadió de la misma manera con la que anteriormente me había respondido

— comprendo Eren, ¿tú acaso eres mi amigo? — pregunté con nerviosismo y es que era incapaz de sostener su fuerte mirar — lo pregunto por qué la mujer que salió hace unos momentos me dijo que tú al parecer eras mi amigo — añadí él simplemente se quedó callado y avanzó hacia mí con la ayuda de su muleta y dificultad, se sentó en la silla al lado de mi cama, supuse que no respondería por lo que quise preguntarle acerca de mí — ¿Quién soy?

— ambos provenimos de la zona de internamiento de Liberio y de la cual no sé, no se nos tiene permitido salir a menos que seamos guerreros de Marley o candidatos a heredar un poder de los nueve titanes, sin embargo eso es algo que te explicaré después, siempre y cuando no me presiones — respondió sin quitar su mirada de mí, la cual me ponía aún más los nervios de punta, y dijo ¿titanes? A qué se refería, estaba segura de que le preguntaría, pero no ahora, ya que lo que en verdad me interesa en este momento es saber quien soy en realidad y cuál es mi propósito

— ¿en qué año estamos? — él me miró y un leve destello de brillo se vio en sus ojos

— en el año 854 — respondió y abrí mis ojos cuanto pude la sensación de tener el estómago revuelto invadió mi ser

— ¿tengo algún familiar? — pregunté, él no respondió, por lo que deduje que quizás él tampoco recordaba muy bien, y por lo que decidí pasar a la siguiente pregunta — Eren, ¿cuál es mi nombre? — pregunte de nuevo y mis manos se volvieron aún más frías

— Anhelo, ese es tu nombre — respondió y por unos largos minutos nos quedamos viendo mutuamente

— ¿Anhelo? Creo que no es un nombre común — dije el me miró sin mostrar ninguna expresión lo cual me causó un poco de temor — en realidad creo que no es un nombre, bueno no se ni lo que digo quisas solo estoy confundida por el  golpe en mi cabe — hable con nerviosismo mis ojos trataron de enfocar hasta la cosa más tonta dentro del lugar

—eres demaciado habladora, ya te explique todo a su momento por ahora lo importante es que te recuperes — el tono serio en que lo mencionó hizo que sintiera demasiado calor en mis mejillas por lo cual me hacía deducir que me sonroje

—eres demaciado habladora, ya te explique todo a su momento por ahora lo importante es que te recuperes — el tono serio en que lo mencionó hizo que sintiera demasiado calor en mis mejillas por lo cual me hacía deducir que me sonroje

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
𝐓𝐮𝐫𝐪𝐮𝐨𝐢𝐬𝐞 𝐄𝐲𝐞𝐬 ||Eren Jaeger||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora