7 minutos en el paraíso ☞︎︎︎KookV☜︎︎︎ [TERMINADA]

Capítulo 09

Enemies to lovers

—Tae me gustas—.

—Jungkook creo que me gustas—.

—Espera... ¿¡Crees!?— El pelinegro puso cara de ofendido y puso su mano en su pecho fingiendo dolor.

Taehyung no pudo evitar reír ante tal acción, tomó el rostro de Jungkook entre sus manos y lo miró fijamente.

—Apenas estoy descubriendo lo que siento ¿si? Además... es raro que me guste la persona que me odia y se la pasa insultandome—.

—Perdón Tae, sé que desde que nos conocemos me he comportado como un completo idiota, pero desde la primera vez que te vi quedé fascinado pero yo no quería aceptar mi orientación así que decidí ocultarlo— Jungkook se sincero con el castaño, había decidido no ocultarlo más y ya estaba seguro de que le gustaban los hombres así que quería dar un paso más.

—¿Así que para ocultarlo decidiste odiarme? Eso es realmente estúpido Jeon—

—Yo lo sé, pero te juro que no sabía que más hacer, si me hacía tu amigo lo más probable es que terminará basándote—.

—Eso me hubiera gustado más que recibir insultos— el castaño volteó hacía otro lado y habló un poco más bajo, casi queriendo que Jungkook no lo escuchará.

—Perdón pequeño, ahora trataré que las cosas vayan mejor, pero no quiero apresurar esto, me gustaría que tú y yo nos conozcamos bien y que tú estes completamente seguro que yo te gusto—.

Una sonrisa de oreja a oreja se dibujo en el rostro del castaño, realmente le creía a Jungkook y quería que las cosas cambiarán entre ambos.

—Supongo que pasaremos de ser enemigos a ser amantes—.

Ambos rieron ante el comentario del castaño, Taehyung se quedó viendo los labios del pelinegro y sus risas se detuvieron.

Jungkook pasó sus manos a la cintura del castaño y ahora el también miraba los labios del contrario.

Comenzaron a besarse con desespero, llegaron a la cama a pasos torpes, Taehyung se sentó en la cama separándose de los labios de Jungkook y al tener al pelinegro frente a el, estando de pie y mirándolo desde ese ángulo había hecho que se le formara un bulto bastante notorio en sus pantalones.

Jungkook desabrochó su camisa pero no se la sacó y cuando iba a desabrochar su cinturón vio la cara del castaño mirando fijamente su pecho y una brillante idea paso por su mente.

—Chupamela otra vez, pequeño— con voz demandante pero un baja dio la orden y Taehyung al instante obedeció.

Comenzó a desabrochar el cinturón de Jungkook y luego procedió a desabrochar los botones, bajó un poco los pantalones del pelinegro junto a su ropa interior y rápidamente el miembro erecto de Jungkook golpeó la mejilla del castaño.

Intodujo lentamente el miembro en su boca y lo chupo mientras que con su mano izquierda sostenía las caderas de Jungkook y con su mano derecha hacía un masaje en los testículos de este. Así estuvieron un buen rato hasta que el pelinegro sintió la tan conocida sensación en su estómago, así que sacó de inmediato su miembro de la boca del castaño.

—Bien, ahora ponte en cuatro— a Taehyung le dio un poco de vergüenza la posición pero aun así lo hizo y su pantalón comenzó a ser retirado por las manos de Jungkook.

—Me gusta que seas tan obediente— susurró cerca del odio del castaño lo que hizo a este estremecerse y soltar un gemido involuntario de su boca.

—Jungkook, por favor... mételo ya—.

Y está vez fue el pelinegro el que obedeció e introdujo toda su extensión en una sola estocada que embriago de placer a ambos.

[♕︎]

Jimin y Yoongi se encontraban en el cuarto del último mencionado, el rubio le había pedido a Yoongi que le ayudará a pintarse el cabello ya que quería intentar un nuevo tono y éste acepto. Jimin acababa de secarse el cabello después de haberlo lavado con ayuda del pelirrojo.

—Minie, el rosa te queda espectacular, creo que podría comerte a besos ahora mismo—.

A Jimin se le colorearon las mejillas tanto que ahora parecían del mismo tono que su cabello, lod últimos días había hablado mucho con Yoongi y rápidamente se habían encariñado, tanto que ya se hablaban por apodos lindos.

—No digas esas cosas Min Yoongi, haces que me sonroje—.

—Eso es lo que intento, amo ver tu bonita cara cuando te sonrojas y más si es por algo que yo digo—.

De verdad Yoongi lo tenía mal, lo tenía... enamorado...

—Bueno, ven acá y cómeme a besos Yoon—.

Y así los dos terminaron acostados en la cama de Yoongi, dándose pequeños besitos que de repente se convertían en besos largos y profundos, pero todos llenos de cariño y sin segundas intensiones de por medio.

Ellos aún no daban ese gran paso de tener relaciones sexuales, ni siquiera se tocaban por encima de la ropa o algo similar, todo era color rosa por el momento y así estaba perfecto para ambos.

Moon