Alpha & Omega (Ghost x Soap COD)

Capítulo 21: FINAL.

Actualmente

Ambos se encontraban en la cama de Ghost, abrazados, en completo silencio, disfrutando del sonido de la lluvia que había comenzado no hace mucho.
Luego de haber salido de las duchas y tras avisar que todo estaba bien, ambos se dirigieron a la habitación del hombre, terminando su noche de reconciliación ahí, sin importar cuántas veces llevaba haciéndolo esa noche. Además, disfrutaba de momentos así de íntimos.

Simon tenía en sus brazos a Jhonny, acariciándome con suavidad uno de sus brazos y con su otra mano su cabello. El nombrado se contraba a su lado, con un brazo rodeando su cintura, llegando a su espalda baja para dejar caricias allí.
Tenía su rostro apoyado en el pecho del otro, sintiendo con suavidad sus caricias, a su vez que escuchaba los latidos de su corazón, sintiéndose en paz al estar sus con él.

No quería separarse del hombre. Ninguno quería eso, así que se decidieron por pasar la noche juntos. No tenían tareas pendientes, y necesitaban de ésa noche de reconciliación y perdón.

- Jhonny... - El hombre lo miró, cruzando sus miradas, sonriendo mutuamente. - La noche que huímos de Las Almas, cuando estaba conduciendo... Iba a confesarte mis sentimientos...

- ¿De verdad?... - Se extrañó al esuchar aquello, pero a su vez su sonrisa se hizo más grande, además de que tenía aquel hermoso brillo en sus ojos pese a tener la luz de la lámpara de la mesa de luz dándole casi en contra. Simon asintió, sonrojándose levemente, causando ternura en Jhonny, quien depósito un pequeño beso en su pecho antes de continuar hablando. - ¿Y por qué no lo hiciste?. ¿Qué te detuvo?...

- El miedo... - Llevó las caricias a su mejilla, siendo delicado y suave con éste. - Tenía miedo de que me rechazaras, ya sabes, estabas enojado por cómo había actuado contigo antes. Además, consideré que no era el momento indicado... Me preocupé cuando huíste de Graves, y, al principio estaba decidido a confesarme mientras te ayudaba a esconderte. Suena tonto pero, quería motivarte a vivir. Y luego, mientras nos escapábamos, volví a considerar la idea... Pero, preferí esperarme al momento indicado.

- En todo momento tú fuiste mi motivación para seguir, Simon. - Se acomodó mejor en la cama, viéndolo directamente a sus ojos, llevando ambas manos a sus mejillas. - Y lo seguirás siendo, sobre todo ahora que tengo una razón para llegar entero a la base...

- ¿Qué sería de mí si no te hubiera conocido?. ¿Si no hubiese tenido el valor de besarte... De confesarme ésa noche tras lo de Chicago?... - En silencio, contempló y admiró el rostro de la persona que tanto amor le daba y que tanto significaba en su vida. - Tú le diste sentido a la vida tan vacía que tenía. Desde el día que te conocí. Sí peleábamos... Pero mira hasta dónde los llevaron muestras peleas. Todo sucede por algo, ¿verdad?... - Con suavidad besó su frente, volviendo a mirar sus hermosos ojos. - Gracias por hacerme mejor persona, Jhonny. Y gracias por sacarme lo mejor de mí... No me arrepiento de tenerte en mi vida... Mi todo...

Sonrientes, volvieron a unir sus labios en un suave y lento beso, queriendo disfruta nuevamente de los labios del otro, dispuestos a seguir así por el resto de la noche.

Jhonny había cambiado radicalmente la vida de Simon sin duda alguna, y lo que más deseaba era tenerlo a su lado, hasta el fin de sus días.
Despertar a su lado, verlo sonreír, escucharlo reír, tocarlo como tanto le encanta, hacerlo suyo, acariciarlo, besarlo. Todo se había convertido en sus nuevas cosas favoritas. Jhonny se había convertido en su persona...
Y Jhonny... ¿Qué más podía pedir?. Tener a alguien como Simon en su vida era motivo más que suficiente para ser feliz y sentirse el hombre más afortunado del mundo. Tenía al verdadero Simon Riley a su lado. Ése que daría su vida por verlo feliz y sin preocupaciones. Ése que estaba dispuesto a correr riesgos con tal de protegerlo. Ése Simon que se volvía loco con sus besos, con sus caricias, con todo lo que tuviera que ver con él.
Ése Simon Riley que había sido capaz de abrir su corazón y mostrarse tal cual es. Una persona sumamente sensible, protector y tierno, que daría todo por verlo sonreír y amarlo hasta el fin de sus días.