Innocence and Experience| Louis Tomlinson.✓

capitulo 25

Capítulo 25 •

•POV LOUIS

El juego se había detenido. _______ bajo torpemente mientras yo la seguía. Parecía que iba a caer. Me acerque tomando de su mano, pero ella la aparto, como si estuviera asustada.

—Lo siento. —susurro.

Sonreí.

—Está bien. Solo no huyas.

Ella asintió, sus mejillas estaban un poco rosadas, pero no me importo hacer que se le pusieran color rojo.

—¿Quieres volver con los demás?

Sé que lo que había dicho se podía tomar en doble sentido, pero no me importo, porque ______ no se sonrojaba muy a menudo. ¿O era que me gustaba ver que ella reaccionaba a mí?, ella, se giro a verme, vi como sus mejillas pasaban de rosa pálido, a un tono más profundo, hasta dejar sus mejillas como si fueran dos rojas manzanas.

Camine a un lado de ella, cada vez que hablaba podía notar un indicio de nerviosismo, y me gustaba. Creí que esto iba a ser incomodo luego del beso, y lo era, pero de una buena manera.

¿Qué había pasado por mi mente cuando lo hice?, no lo recuerdo.

—¡Hey! 

_________ y yo nos giramos a ver quién nos estaba llamando. Eran los chicos, realmente nos fueron a buscar. 

—Eh, ¿dónde estaban? —pregunto Dorian.

—Por ahí. —le respondí.

De nuevo note las extrañas miradas de las amigas de ______. Ella estaba mirando a otro lado, tratando de ignorarlas.

Seguimos por la feria hasta que se hizo demasiado tarde, ______ trato de mantenerse a mi lado la mayor parte del tiempo, pero no hablaba mucho. El beso parecía haberla dejado muda. ¿Cómo hubiera sido si la hubiera besado hace dos años?

La noche termino cuando regresamos a casa. Note como Dorian aprovechaba el momento para darle un abrazo y un beso, y luego le siguió Augustus. Su actitud me venía molestando desde hace mucho.

—Nos vemos, Lou. —dijo _______, acercándose a mí.

Me rodeo entre sus brazos.

—Bah, no te pongas rara, si no quieres contarlo a nadie, está bien, será nuestro secreto. —le susurre antes de besar su mejilla.

Ella reprimió la ganas de contestarme, ahí estaban sus amigas, Augustus y Dorian.

—Lo voy a pensar... nos vemos.

Sacudió su mano antes de entrar. Apenas se cerró la puerta escuchamos los gritillos de sus amigas. Dorian comenzó a reír.