Г°Behind the scenes|| [PPGXRRB] +18

1. The boy with green eyes

Pov. Buttercup Utonium

Estaba aburrida, y con cuatro kilos de ganas de golpear a mi hermana Burbuja. Perdimos el avión porque ella no sabía si llevar los zapatos verde limón o los limón verde. Para mi eran iguales.

En conclusión, que estamos esperando en el aeropuerto otra hora más para que salga el siguiente vuelo a Nueva York. Bombón habló en llamada con nuestro padre y, según ella, debíamos ir.

— ¿Sabían que el agua tiene memoria?— Les dije a ambas, casualmente estábamos en el baño de chicas porque Burbuja no puede ir al baño sola. Se aburre según ella.

— Debes dejar de ver Frozen 2— Me dijo Bombón sin levantar la mirada de su celular.

— ¡Yo sabía!— Respondió mi hermana menor desde el cubículo del baño— Olaf lo dijo.

— Buen descubrimiento Burbuja. Y voy a ver Frozen 2 hasta que salga el 3— Sentencié y Bombón suspiró. Me ama.

— ¡Burbuja apúrate! Que si perdemos el próximo avión...— No pudo terminar porque Burbuja salió.

— ¡Ya estoy!— Dijo ella con una sonrisa brillante.

— Entonces andando— Bombón guió el camino, y las tres salimos del baño. Nuestro avión ya estaba casi al llegar, pero me dio hambre.

— Voy a comprar algo para comer, ya regreso— Y corrí. Corrí antes de que Bombón me pudiera detener.

Encontré un restaurante en el aeropuerto. Súper favorable.

Casi no había nadie, solo un chico. Me senté a unas cuatro mesas y de espaldas a el porque ajá, ansiedad social. Yo tenía un espejito, de vez en cuando lo sacaba para darme cuenta de que me estaba mirando, demasiado.

El mesero llegó y le di mi orden. Algo sencillo porque no me podía demorar comiendo. Estaba tranquila hasta que escucho el movimiento de una silla y casi me da un paro cardíaco cuando la silla frente a mi se empezó a mover. No era un evento paranormal, era el chico de antes que se había sentado frente a mi como si me conociera de toda la vida y mirándome extraño.

— Hola— Me dijo. Sin dejar de mirarme a los ojos.

— ¿Hola?— Le respondí, tome mi celular, abrí notas y fingí que le escribía a alguien. No quería hacer contacto visual porque me da ansiedad.

— ¿Por qué estás sola aquí?— Siguió hablando.— Una chica tan linda como tú — Ya veía venir eso. Simplemente no le respondí y seguí fingiendo que escribía.— Veo que no hablas mucho. Tranquila, que yo si— Que molesto.

No pude ni mirarlo bien, mirar a la gente a los ojos me pone nerviosa. No es que me guste la persona o algo, es simplemente que no puedo hacerlo.

Lo único que pude ver fueron sus ojos cuando entré. Eran verdes, de un tono un poco más oscuro que los míos. Y, aunque odie admitirlo, eran hermosos.

Pues que el chavón empezó a hablar. Me contó como tenía dos hermanos y que los quería pero los odiaba. Me reí un poquito por mi parecida situación. Que le encantaban los deportes y estaba pensando hacerse un tatuaje. El resto de las cosas que me dijo no me acordé. Hasta que llegó el mesero con mi hamburguesa.

— Tome. Pongala para llevar— Le di el dinero y el mesero asintió.

— ¿Aquí nos despedimos?— Me dijo el chico molesto. Yo le sonreí, intentando no mirarlo muy fijamente.

— Parece ser. Fue un placer desconocido— Iba a irme hasta que me tomo de la mano. Me espanté.

— Gracias por escuchar, normalmente no le hablo de mi vida a un total desconocido– ¿Enserio? Yo creí que era algo de su día a día.— ¿Puedo saber tu nombre?

— Ah...— Iba a decir algo pero, obligada a mirarle a los ojos entré en pánico. Salí corriendo de ahí con mi preciada hamburguesa en la mano. Me sentí mal por haber hecho eso, pero es una consecuencia de mi hermosa ansiedad.

Fui con mis hermanas y no se habían movido de él mismo lugar donde estábamos sentadas antes de que Burbuja quisiera ir al baño.

— He vuelto— Les dije. Bombón me miró feo.

Después de unos minutos el avión llegó y nos fuimos. Olvidé mencionarlo pero si, digamos que tenemos cierto nivel de "fama". Somos cantantes así que no sorprende.

Nos fuimos VIP. Me siento millonaria.

Me dormí en el avión y cuando desperté ya estábamos en Nueva York. Que loco todo.

Bombón nos llevó directo al departamento donde nos quedaríamos hasta que terminaran de construir nuestra casa, si, papá había pensado en todo. Lamentablemente no estaba aquí por su viaje que iba a durar una buena cantidad de meses.

Al instalarnos y cada una asignar una habitación nuestra hermana mayor nos reunió en la sala de estar, se sentó ella en el sofá y nosotras en el piso para que estuviéramos de frente. Muy injusto en mi opinión.

— Bueno ¿chisme?— Le dije. Es mi forma de pedir contexto.

— Pues si, super repentino el hecho de venir a Nueva York ¿No?

— Si, y más que nos avisaste hoy a las dos de la mañana— Le reproché y Burbuja asintió.

— Si, a mi me avisaron a la 1:46 am así que no me echen la culpa— Se quejó.

— Bueno ajá ¿Que querías?— Esta vez fue la blondie (Burbuja) la que habló.

— Pues, nos mudamos a Nueva York pues porque— Suspiró— papá nos metió a una escuela. Una de música.

Burbuja saltó de felicidad.

— ¿Nueva escuela? ¡Nuevos amigos!— Ella no paraba de dar brinquitos en el lugar y Bombón rió bajo.

— Bueno ¿Para que o que?— La mire.

— Dar clases Bellota. Para eso son las escuelas— Me soltó otra mirada fea.

— ¡No! ¿Enserio?— Fingí sorpresa— Me refiero para que una nueva. ¿No simplemente podían contratar a un profe particular de música?

—No. La semana que viene empezamos.

— ¡Si!— Burbuja siguió saltando. De hecho nunca paró de hacerlo en realidad.

— Tranquila Bellota. Según lo que vi en la página de la escuela, si, lo busqué, hay clubes de otros intereses además de la música. También uno de fútbol— Mi animo subió un 80%.

— Bueno, puede que esa escuela no sea tan mala— Me levante y me senté en el sofá porque si.

— Igual hay que centrarse en la música. Que para eso estamos allí— Aclaró— Y otra cosa, Skyle me llamó, y dijo que una empresa nos propuso para actuar en una serie musical— La miré curiosa.

— ¿High School Musical versión hermanas Utonium?— Le di una de mis mejores sonrisas y me miró feo. Comienzo a pensar que me odia.

— Quieren que las tres participemos. Iremos pasado mañana a ver los detalles principales. Ah, y Skyle esta camino a Nueva York pero él dice que va a vivir con su mamá, que vive aquí— Se encojio de hombros.

Dos nuevas noticias en un solo día. Quemocion.

Cuando nos fuimos a dormir, la mirada del chico del aeropuerto volvió a mi cabeza. Cuando me agradeció por haberlo "escuchado" me miró diferente, como con una mirada de gratitud máxima que me terminó conmoviendo a la vez que me daba un ataque.

Me arrepentí mucho por haber huido de esa manera pero en fin. Ni que me lo fuera a volver a encontrar.

Puse una playlist de Billie Eilish en mi celular y así me dormí.