Capitulo 8.

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Maraton 8/10

Llegamos a la casa de Min, exactamente a las seis de la tarde. JungKook había insistido en podíamos visitarla el día siguiente, pero yo le había prometido que iríamos hoy, tenía que cumplir mi promesa. 


JungKook estacionó a Holly enfrente de la casa de su madre. Él había tenido suerte, nada de náuseas y dolores de cabeza, después de que despertó. A pesar de no haber dormido ni un poco, aún seguía con los ojos abiertos. 


Bajamos del auto, y JungKook entrelazo sus dedos con los míos. Antes de tener la oportunidad de poder abrir la puerta, una chica abrió la puerta. 


Era de mí mismo tamaño, su cabello le llegaba hasta los hombros de un color pelirrojo muy llamativo. Sus ojos verdes combinaban perfectamente con su cabellera. La chica nos dio una sonrisa tímida, y se apresuró en salir lo más rápido posible. Miré a JungKook, y ambos intercambiamos miradas de confusión. Entramos a la casa, voces venían de la cocina.


—Es solo una chica, V. No es nada del otro mundo—se quejó Jin.


—Mi bebé ya tiene novia, ya están creciendo, ambos. —Min apretó una de las mejillas de Jin, haciendo que este frunciera el ceño.


—Mamá, no tengo novia. Ella no es mi novia, ¿no pueden entenderlo?


— ¿Llegamos a tiempo para el interrogatorio? —preguntó JungKook riéndose. — ¿Quién era la pelirroja?


—La novia de Jin. —se apresuró en responder V.


—No es cierto, ¿podemos tomar el maldito chocolate caliente de una vez?


—No maldigas en frente mío, Jin. —lo corrigió Min.


—Lo siento, mamá. —se disculpó. Me acerqué a Min y la saludé con un beso en la mejilla.


—Estoy tan feliz de que estén aquí. Y me alegro que hayan llegado a tiempo para conocer a la novia de mi Jin.


—No es mi novia, mamá. ¿Por qué es tan difícil de entender?


—Si no es tu novia, ¿Por qué vino a casa a visitarte? ¿Estuvieron a solas en tu habitación? ¿Con la puerta cerrada? —comenzó a burlarse JungKook.


—Que gracioso que eres, JungKook. —Jin tomo una taza del lavavajillas y la dejo en la repisa.


—Yo solo estoy diciendo. —levantó ambas manos en el aire, en señal de inocencia. JungKook y V intercambiaron miradas de complicidad.


—Jin tiene novia, Jin tiene novia, Jin tiene novia. —comenzaron a cantar gritando. Min y yo nos reímos, pero a quien no le parecía gracioso era a Jin.


—Tuve suficiente de esto. —dijo Jin y abandono la cocina corriendo para subir las escaleras corriendo.

Promesas de Amor. «JungKook.» [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora