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Al llegar a mi lugar de trabajo no me sorprendió del todo ver a Jungkook hablando animadamente con algunos de sus amigos. Me parecía algo raro no verlo con Jimin o Taehyung ya que pasaba mucho tiempo con ese par.

Sonreí en su dirección cuando nuestros ojos se encontraron, sus amigos notaron mi gesto y levantaron sus manos en manera de saludo. Para mi sorpresa, Jungkook se levantó de su lugar y caminó en mi dirección, tenía un pequeño vaso con el logo de una cafetería que conocía más que bien.

—creí que necesitarías algo para comenzar bien tu turno—habló extendiendo el pequeño vaso de plástico en mi dirección.

—oh, muchas gracias. No tenías que molestarte, ¿te gustaría algo de comer?

—me gustaría, pero ya pedimos algo y mi práctica de boxeo comienza dentro de poco

—¿boxeo?—pregunté algo sorprendida

—así es, trató de mantenerme ocupado los últimos días de la semana—sonrió de una manera que me pareció poco creíble y es que, a pesar de su cuerpo grande y trabajado, cuando sonreía se veía adorable

Desde ese día mi percepción de Jeon Jungkook cambió un poco.

[...]

La mañana siguiente fue más normal de lo que esperaba, me encontré con Jungkook en los pasillos un par de veces. Era algo extraño, considerando que unos días atrás ignorábamos nuestra mutua presencia y claro que aquello no pareció pasar desapercibido para mi amiga.

—¿me dirás el porqué tremendo hombre me persiguió el día de ayer para pedirme información referente a ti?—me preguntó cuando caminábamos hacia nuestra última clase.

—digamos que le estoy ayudando con algo—respondí sin estar del todo segura si decirle o no a mi amiga sobre nuestro engaño formaba parte de las reglas del mismo.

—por favor, no me vendría mal unos detalles más.

—te dire después, ahora solo necesito llegar a mi clase.

—solo te quiero decir una cosa—caminó rápidamente para colocarse frente a mi y detenerme el paso —te cuidado con Jungkook

—es irónico que me digas eso teniendo en cuenta que ayer le diste mi información

—solo es un consejo, es muy guapo y eso no te lo puedo negar, pero al ser tan diferentes...no se que se traigan entre manos, pero mantén los pies en la tierra

—tranquila, no tienes porque preocuparte—le dije con total seguridad

Por suerte para mi, aquella era mi última noche de trabajo en la semana. Tendría tres días seguidos para descansar y concentrarme en las próximas tareas, creía que tendría a Jungkook detrás de mi gran parte del tiempo, pero me relajaba mucho el saber que no era así.

No noche era lenta y no había tenido demasiadas órdenes, estaba terminando de limpiar mi lugar cuando me llegó un mensaje.

"Espero que aún no sea tarde, estoy cerca de tu trabajo. Pasaré por ti"

Miré confundida el texto hasta que entendí de quien se trataba.

"Jian te dio mi número ¿cierto?" Respondí rápidamente

"Tu amiga fue muy amable el día de ayer"

Suspiré y guardé mi teléfono.

Un extraño sentimiento comenzó a surgir en la parte superior de mi estómago, conocía muy bien lo que era y me negaba a emocionarme por un simple mensaje por parte de alguien a quien apenas conozco.

Match • JJK Donde viven las historias. Descúbrelo ahora