La Amante Del Freak [Eddie Munson] [Billy Hargrove]

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~Lejos De Ti~
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7 Malditos meses!
Se preguntarán ¿Dónde rayos estás metida? ¿Por qué no te has escapado? ¿Porque no has llamado a la policía?

Estoy lejos de mi familia, lejos de mi hija y lejos de Eddie. Quería salir corriendo para ir con ellos, pero era imposible.
Me encontraba en LAS VEGAS.

Así es Billy me trajo a la fuerza aquí. Y ahora me encontraba en un cuarto amarrada con la misma ropa de aquel día. Era su prisionera.
El solo me dejaba comer, de vez en cuando me bañaba y ahora le suplicaba que me dejaba enviar un regalo a mi pequeña.
En unos días iba a hacer el cumpleaños de mi hija y solo esperaba que Billy aceptará esto.

-Por favor Billy se trata de Scarlett

-Me crees estúpido, se que les dirás dónde estás

-Te lo juro que no, antes de que se envíen las cosas lo checas.- suplique.- Vamos Billy es de tu pequeña Scarlett

-Bien, iremos a comprar todo lo que tú digas pero si haces algo no sabes cómo te irá.- apunto

Me bañe, después de mucho lo hice. Solo me quería tener ahí encerrada, no quería que fuera feliz y el me lo confirmó.
Nunca entendía su comportamiento era tierno y a veces violento.

Nadie venía a esta casa, éramos solo el y yo. A veces escuchaba como el hablaba por teléfono pero nunca supe con quién.

Salimos y compramos juguetes, ropa y entre algunas cosas para mí pequeña.
Y ahora es el momento de mi carta, no sabía por dónde empezar o que poner.
Tenía que ser cuidadosa con lo que ponía.

Querida Scarlett:

Lo siento tanto, se que hoy debería estar contigo pero por cosas de la vida no estaré.
Amor mío, no sabes cuánto te extraño me haces demasiada falta. Extraño tus caricias, tus ojos. Todo de ti
Sabes cuando eras pequeña te parecias tanto a papá. Solo espero y sigas con ese parecido.
Verás que pronto estaremos juntas y todo esto será un mal rato, un mal pasatiempo.
Esto pronto pasará y compartiremos nuevos recuerdos. Por favor dile a tu abuela que siempre te hablé de mi.
Gracias por llegar a mi vida, por ser una niña tan hermosa
A veces la vida es muy injusta hija, te toparas con mucha gente buena y mala. Espero y seas más astuta que yo y sepas elegir a la gente que te rodea.
Siempre serás la bebé de mami, la gordita más hermosa que mis ojos pudieron ver. Pronto estaremos juntas mi niña, estaré contigo lo juro.

Terminé de hacer la carta, y se la di a Billy. Mordía mis uñas esperando que no viera las letras ocultas de la carta.

-Todo está bien.- Asentí.- Ahora checaré la caja para ver qué todo esté en orden

-Y lo está confía en mí.- el asintió

El se fue a checar la caja y a guardar el sobre. Solo espero y lo haga rápido, antes de que se la lleven iba a poner una caja de perfume con la dirección exacta. Por si no entendian las letras ocultas en mi carta.

Solo espero y con esto vengan rápido por mi.

Después de un rato llego Billy al cuarto

-La caja está en orden lista para enviar, solo espero que quiten la etiqueta antes de que la entreguen.- acaricio mi mejilla

-¿Algún día volveré con ella?

-Lo siento.- fue lo único que dijo y salió

Me quedé en la cama esperando a que Billy saliera. Después de un rato no escuché ruidos así que baje cuidadosamente y no ví el carro de Billy.

Quería escapar, pero no tenía las llaves de la casa. Así que con cuidado metí la caja del perfume en el regalo.
Espero con muchas ansias que llegue esto a manos de Eddie.
De nuevo me encontraba en mi habitación, esperando con ansias la llegada.

Después de un rato llego Billy, entró a mi habitación.

-Tu.- me apunto.- Serás mía en este momento

-De que hablas Billy?.- el se acercó y me tumbó hacia la cama.- Detente

-No, verás la clase de hombre que soy en este momento y verás que soy mejor que el.- negué

-Jamas serás mejor que el.- me dió una cachetada

-Callate maldita zorra!.- grito y me agarró del cuello.- Serás mía por las malas o por las buenas

Empezó a dar besos por mi cuello, y yo solo me movía para quitarmelo de encima.

-Basta Billy, me lastimas.- me pegó de nuevo

-Callate no quiero que hables!.- grito

Me quedé callada llorando, me estaba destrozando. Me estaba lastimando otra vez.

Quito mi ropa, la desgarro por completo. El desesperado quito su cinto y bajo su pantalón

-Arrodillate.- negue.- me agarró del pelo y me obligó a incarme.- Harás lo que te pida maldita

Me adorrille y el puso su miembro en mi boca.

-Vamos nena, has lo mejor que sabes hacer.- abrí mi boca y empecé a hacer mi trabajo.

Llorando y maldiciendo en mi cabeza por esto. Me sentía sucia, utilizada como una cualquiera

Me agarró de los brazos y me tumbó de nuevo en la cama.

-Abre las piernas linda.- negué

-Por favor Billy.- el agarro su cinto y me pegó en mi piernas

-Te di una orden.- el abrió mis piernas y me metió su miembro a la fuerza.

No gemia, no hacia ninguna expresión de satisfacción.
Solo sentía dolor, odio, miedo. No podía con esto, yo solo lloraba.

El hacia su trabajo hasta que terminó, maldeci porque no había utilizado condón. Y solo esperaba a que me comprara la pastilla.

Se cambió y salió sin decir ni una palabra, yo me acomode en la misma cama a llorar, me sentía demasiada sucia. Me acaricia mis piernas y estaban rojas, si mis piernas estaban así no quería saber cómo estaba mi cara.

Te odio!.- grite

Después de tanto llorar, de tanto maldecir. Me quedé dormida

Después de aquel accidente, habían pasado los días, el cumpleaños de Scarlett había pasado. Y no había rastro de nadie

Hoy Billy se había atrevido a invitarme a cenar, no me encontraba de ánimos, pero con Billy no tenía otra opción. Era salir si o si.
Me compro un vestido color azul, muy bonito pero no era de mi gusto. No podía rechazar nada de él. No quería salir lastimada.

No quería escapar, se que era mi oportunidad pero no lo quería hacer.
No perdía la esperanza de que fuera rescatada cómo en los cuentos de hadas.
Solo espero y mi cuento de hadas termine con un Final Feliz.

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