Sin Senos No Hay Paraíso || Titi

Capítulo 5

Habían pasado unos días desde que habíamos sospechado que Catalina estaba embarazada y si teníamos razón.

Pero al final terminó abortando, mi hermana y yo le ayudamos a pagar para que no le doliera tanto. Esa era la mejor decisión, ya que no le podía meter por los ojos a Albeiro un niño que no es suyo.

Además, Catalina no tenía para mantenerse a ella misma y mucho menos iba a tener para un bebé, ya que esa es una responsabilidad mucho más grande.

Como dije, habían pasado varios días y ahora mismo me encontraba con mi hermana en su cuarto. Ella recibió una llamada y al terminarla su rostro se iluminó de alegría.

Valentina: ¿Y ahora qué pasó? Que usted está toda sonriente.

Yésica: Que a Catalina le llegó la hora hermana, los duros me pidieron un montón de niñas por el cumpleaños de Morón, alguno de esos va a escogerla.

Valentina: Pues por fin, porque Cata si ha estado muy triste solo porque ningún narco la acepta.

Yésica: Está vez si, como que me llamo Yésica Beltrán, esta vez sí será la oportunidad de Catalina.

Nuestra mamá nos interrumpió y nos avisó que Ximena, Vanessa y Paola nos estaban buscando, cuando salimos mi hermana de una les fue a decir la buena noticia y ellas se sorprendieron.

Paola: ¿Treinta niñas, Yésica?

Yésica: ¡Treinta niñas, Paola! Morón está de cumpleaños y Cardona piensa celebrárselo por todo lo alto.

Vanessa: ¿Pero por qué tantas niñas? ¿O es que acaso van a ir treinta duros o qué?

Yésica: No, solamente van a ir quince narcos, pero los duros más duros de todos.

Ximena: Pero yo no entiendo una cosa, ¿por qué tantas mujeres?

Yésica: Porque los muy degenerados quieren a dos mujeres para cada uno.

Valentina: Ahí si es que están pintados los hombres.

Ximena: Pero si lo vemos por el lado amable, mucho mejor para nosotras.

Vanessa: Uy si, porque hace rato nos tenían secas.

Yésica: Bueno señoritas, prepárense porque salimos el sábado en la madrugada.

Paola: Listo, ¿y cuando regresamos?

Yésica: El lunes, son tres días.

Vanessa: Pues yo ya estoy lista.

Paola: Bueno, pues tendremos que avisarle a Catalina ¿no? Porque imposible que con treinta niñas no la escojan a ella.

Ximena: Si y más si son regaladas, ¿no?

Yésica: Yo ya había pensado en eso Ximena, aunque a mi me da un poco de temor porque la pobre cómo está de frustrada, no vaya a ser que se nos suicide.

Valentina: Tan boba Yésica, ya verá usted que con esta noticia ella se le olvida todo y va a andar brincando de la alegría.

Ximena: Sí Yésica, tenemos que llevarla porque como dice Paola, imposible que entre treinta ninguno la escoja.

Yésica: Ahí se la empaquetamos a cualquiera, lo qué pasa es que van a pagar quinientos mil por niña y como ella está pretendiendo ganarse cinco millones.

Vanessa: Ah no, pero es que por algo va a tener que empezar.

Paola: Si, así empezamos todas ¿o no?