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─ ¿qué vamos a hacer? ─ la voz suave de ellie hablo a los dos, sostuviste tu cabeza en tú m
ano, los codos descansando en tus rodillas.
─ no sé ellie, quiero decir que podemos intentar salir, pero las posibilidades de que sobrevivamos son como... mierda, ni siquiera se. joel, ¿qué te parece? ─ miraste a tú novio, esperando una respuesta.
─ déjame pensar ─ dijo con un gruñido bajo, tú asentiste, mirando a ellie, ella comenzó a tocar el violín con sus dedos, notó que algo estaba mal, ellie no era de las que mostraban su ansiedad de que por mucho que la estuvieras observando, ella habla.
─ ______ ─ hizo una pausa ─ puedo hablar contigo por favor, en privado ─ miraste a joel, quien solo te miraba a ti.
─ sí, por supuesto, sígueme ─ la llevaste a una habitación de 4 paredes, estaba vacía pero estaba a una buena distancia de joel para que no pudiera escuchar.
─ ¿qué pasa? ─ preguntaste ladeando la cabeza hacia el lado donde estaba ella.
─ ya he experimentado tener yano, me ha llegóm-mi cosa de una vez al mes ─ ─ bien ─ asentiste, teniendo una idea de lo que está hablando.
─ bueno, yo me he quedado sin cosas para usar. me preguntaba si tienes algo que yo podría usar ─ ellie miró en cualquier lugar menos a ti. te sentiste horrible por ella, ellie era joven y sabes lo desafiante que es para una chica preguntar este tipo de cosas aunque fuera algo totalmente normal.
─ sí, por supuesto, tengo algunas cosas, en mi bolso tengo tampones, toallas higiénicas, todo eso ─ te lo quitaste del hombo, abriendo el bolsillo más pequeño en la parte delantera.
