Una pijamada de día
13 de febrero
Por extraño que parezca. Momo había fracaso de todas las maneras posibles, había encontrado su debilidad, su némesis, su peor enemigo; y sorprendentemente no era una persona o algún villano que la acechaba. La repostería era su kryptonita, aunque ya sabía que eso podría pasar, el resultado la había dejado estupefacta. Había estado por lo que eran más de dos días ocultando un secreto a todos los que dormían en el mismo edificio, pues durante las madrugadas se despertaba para ir a la cocina y ensayar, horneando pastelillos que terminaban secos, sin sabor, hecho grumos, tiesos como una roca o quemados tal carbón.
¿Qué acaso nadie sospechaba por el olor a quemado?
Pues la subdelegada no era ninguna tonta, había disfrazado el olor con botellas de spray de diferentes fragancias del aroma de las flores. Muchos no se percataban de este detalle, pero dibujaban una sonrisa al aspirar el fragante olor que variaba de pino a lavanda.
Pero, había una persona que no aceptaba una respuesta vaga, Iida tenía más curiosidad porque de la nada el edificio olía cada día de diferentes aromas, lo mareaba, pero con la explicación mas detallada de la azabache se calmó.
Momo era quien tenia un dolor de cabeza que ninguna pastilla podía calmar, habían notado que su rendimiento había bajado al menos un 10 por ciento, Mina que era las observadora por no decir metiche se había percatado que la de ojos ónix tenía una ligeras ojeras y cada vez que preguntaba durante el almuerzo la subdelegada esquivaba las preguntas de una manera más hábil que hacía que Mina simplemente frunciera los labios haciendo un puchero.
En un día como hoy las chicas habían quedado en sentarse juntas para disfrutar de sus comidas, contaban con unos 45 minutos para comer en cafetería. Mina se sentaba con Kaminari, Kirishima, Sero y Bakugo, pero los dejo de lado, al igual que Tsuyu y Ochako que siempre se sienta con Midoriya, Iida y Todoroki, las tres chicas buscaron con la mirada a Momo que siempre almuerza con Kyoka y Toru.
—¿Estas bien, Yaomomo? —Preguntó Kyoka después de masticar el pan de melón que había comprado.
—Es cierto, te hemos notado diferente, Momo-san —corroboraba Ochako sintiendo preocupación por su subdelegada.
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Chocolates y Galletas
FanficONESHOTS La víspera del amor y la amistad está a tan solo unos cuantos días, y las chicas de la clase 1-A tienen preparado una sorpresa para aquella persona que ocupa su corazón.