Capítulo 21

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Narra Alba
Los dos entramos al despacho de mi padre
– Rogelio: Carlos no voy a volver a permitir que golpees a tu hermana ¿Entendido?
– Carlos: Alba la puso en peligro papá
– Rogelio: Tu hermana sería incapaz de hacer eso
– Carlos: ¿Y de querer quitarme a la mujer que amo si?
– Rogelio: No digas tonterías hijo
– Carlos: No digo tonterías papá ¿Acaso no es cierto Alba?
– Alba: Yo no te quitaría nada no soy como tu
– Rogelio: ¡Basta los dos! No quiero que esto se vuelva a repetir ¿Entendido?
Carlos sale enojado del despacho
– Rogelio: ¿Es cierto lo que dice tu hermano hija?
No digo nada y salgo del despacho. He pasado toda la noche junto a ella, es tan fascinante verla dormir me da demasiada tranquilidad, se abre un poco la puerta y es Raul
– Raul: ¿Ya se durmió?
– Alba: Si ya
– Raul: Vaya susto nos metió a todos
– Alba: Si lo se
– Raul: ¿Tu estás bien?
Solo asiento con la cabeza
– Raul: Nunca te he visto tan preocupada
– Alba: Me asuste mucho Raul pensé que algo le había pasado
– Raul: ¿La amas?
– Alba: Si la amo
– Raul: ¿Sabes que pasara cuando Carlos se entere?
– Alba: No pude evitarlo Raul jamás he sentido esto por nadie yo solo quiero protegerla no quiero lastimarla
– Raul: No elegimos de quien nos enamoramos
– Alba: Estoy dispuesta a todo por ella
– Raul: Jamas te he visto así y se me hace muy mal juzgarte cuando nunca estuvimos para ti
– Alba: No pretendo que se compadezcan ni que se pongan de mi lado Carlos también es mi hermano y lo quiero
– Raul: Detrás de esa armadura que tienes hay un corazón sensible que ama y que Aida supo llegar a él
– Alba: Así es
– Raul: Solo espero que esto termine de la mejor forma no quiero perder a mi hermana de nuevo
Me da un beso de nuevo y sale de la habitación, sigo viendola dormir eso es lo que me da tranquilidad ahora mismo
– Alba: Te amo Aida
Le doy un beso en su mano, no se cuanto tiempo paso solo que ya amaneció y yo no me he movido de aquí. Después de un rato despierta.
Voy hacia la cocina pero me encuentro con mi padre
– Rogelio: ¿Como esta Aida?
– Alba: Ella esta bien
– Rogelio: ¿Podemos hablar?
– Alba: Si
Los dos vamos a su despacho
– Rogelio: Aida no es para ti
– Alba: ¿Que?
– Rogelio: Es la novia de tu hermano
– Alba: ¿Es bastante buena para ser para mi?
– Rogelio: Yo no he dicho eso
– Alba: ¡¿Tu que sabes que es para mi?!
– Rogelio: Hija
– Alba: ¡Toda la vida me has hecho a un lado por Carlos jamás te has preocupado por mi jamás te interesaste por mi! Estabas muy ocupado con Carlos
– Rogelio: Hija no era mi intención hacerte sentir mal
– Alba: ¡Aida es la unica mujer que he amado! Con la que pude ser yo y no se alejo la unica que ha logrado sacar un lado en mi que yo no conocía es la única que ha provocado ponerme nerviosa cuando esta cerca
– Rogelio: Alba
– Alba: Si papá yo amo a Aida y no me importa lo que ustedes piensen y tranquilo no me sorprende que no tenga tu apoyo ya me acostumbré a eso
Digo eso y salgo del despacho pero me encuentro con Aida y Laura
– Alba: ¿Que hacen ahí?
– Laura: Nada
– Alba: Aida ¿Que haces fuera de la cama?
– Aida: Alba estoy bien no podía quedarme ahí
– Alba: Esta bien solo no hagas esfuerzo
– Aida: Si jefa
– Alba: Ven te llevaré al comedor
La tomo de su mano y la ayudo a bajar con cuidado la llevo al comedor y le retiro su silla para que se siente
– Maria: Aida que bueno que nos acompañes
– Aida: No podia estar acostada todo el tiempo
– Maria: ¿Como te sientes?
– Aida: Estoy bien
– Maria: Tenemos una gran doctora en la familia.- viendome
– Carlos: Aida ¿Que haces fuera de la cama?
– Aida: Carlos necesitaba levantarme
– Carlos: ¿Porqué dejaste que se levantará?.- viéndome
Decido ignorarlo para evitar problemas
– Carlos: Si se lastima sera tu culpa
Me toma del brazo con fuerza y por reacción lo tomo del cuello y lo empujo hacia la pared
– Alba: ¡Ya basta!

COSECHA DE AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora