COSECHA DE AMOR

Capítulo 34

Narra Aida
Todo el día llorando desconsoladamente como una niña pequeña en su habitación no quiero ver a nadie ni hablar con nadie
– Aida: ¿Como pudiste hacerme esto?
¿Como fingio tan bien? Todo lo que me decia parecía sincero. Sin salir toda la tarde sigo acostada en mi habitación
– Carlos: Aida.- tocando mi puerta
Me limpio mis lágrimas rápidamente y voy abrir
– Aida: Hola
– Carlos: Hola ¿Estas bien? No haz salido de aquí toda la tarde
– Aida: Siento que algo me ha hecho mal
– Carlos: ¿Quieres que te lleve al medico? O que le hable a Alba
– Aida: No gracias estoy bien pero ¿Puedes hacer algo por mi?
– Carlos: Claro lo que quieras
– Aida: ¿Te puedes quedar conmigo hasta que me duerma?
– Carlos: Por supuesto
Entra conmigo a la habitación y se sienta en mi cama y yo me recuesto en sus piernas
– Carlos: Yo siempre cuidare de ti.- acariciando mi cabello
Estar con mi novio y llorar por mi amante que es su hermana es algo terrible
UNA SEMANA DESPUÉS
El dolor que siento sigue siendo el mismo que el primer día Alba no ha dejado de buscarme se queda hasta la madrugada afuera de mi habitación pidiendo que hablemos pero ni siquiera puedo verla me duele demasiado lo que me hizo. Después de ese día no la he vuelto a ver trato de salir de mi habitación cuando ella no está. No puedo verla solo de pensarla siento un gran dolor
– Laura: Aida mis padres se estan preocupando por tienes que salir de aquí
– Aida: No puedo verla Lau no puedo de verdad
– Laura: Alba la esta pasando muy mal
– Aida: ¿Y es mi culpa?
– Laura: Por supuesto que no pero creo qué deberias dejar que te explique
– Aida: No Laura no quiero saber nada de ella
– Laura: Esta bien Aida respeto tu decisión pero por favor ahora baja a comer con nosotros Carlos esta muy preocupado por ti
– Aida: No merezco a Carlos nunca debí engañarlo
– Laura: Tienes que bajar Aida por favor
– Aida: ¿Ella está ahí?
– Laura: Si pero si no quieres no la regreses ni a ver Raul y yo nos encargaremos de que no se acerque a ti
– Aida: Gracias
Las dos bajamos y mi mirada va directa hacia ella que al verme se levanta de su lugar
– Carlos: Mi amor
Viene hacia mi a darme un beso en los labios
– Aida: Hola
– Rogelio: Que bueno que siempre si nos acompañes a comer
– Aida: Si Laura me ha convencido
– Maria: ¿Estás enferma?
– Aida: No se preocupen pronto estaré bien
Toda la comida no he regresado a ver a Alba aunque noto su mirada fija en mi. Al terminar la comida subo a mi habitación pero antes me de abrir la puerta me detienen
– Alba: Aida
– Aida: Sueltame
– Alba: Mi amor tenemos que hablar
– Aida: No me vuelvas a decir así
– Alba: Deja que te lo explique todo por favor de verdad esto es un error
– Aida: ¡Las vi en tu habitación! ¿Me tomas por idiota?
Es inevitable que mis lágrimas salgan
– Alba: Te juro que entre Paola y yo no hubo nada mi amor todo es un error
– Aida: Tienes razón todo fue un error jamás debí pensar en dejar a Carlos por ti jamas debí enamorarme de ti lo de nosotras fue un error
– Alba: Por favor no digas eso
– Aida: Eres un ser despreciable que no merece ser amado Alba todo lo que tocas lo destruyes
– Alba: Aida
– Aida: No te vuelvas acercar a mi no quiero saber nada de Ti para mi tu estas muerta
Digo eso y entro a mi habitación, he sido demasiado dura, me duele demasiado todo esto, vuelvo a llorar desconsoladamente. Se llega la noche y Carlos ha venido a verme
– Aida: Carlos
– Carlos: ¿Si?
– Aida: Debo irme
– Carlos: ¿Que? ¿Porque?
– Aida: Tengo que arreglar la mudanza para irme a tu departamento
– Carlos: Pero eso lo podemos hacer juntos además en unos días es el lanzamiento de nuestro vino
– Aida: Si pero tengo que deshacerme de unas cosas te prometo qué volveré antes del lanzamiento
– Carlos: Esta bien mi amor ¿Cuando te vas?
– Aida: Mañana mismo
– Carlos: Esta bien te puedes llevar mi coche