COSECHA DE AMOR

Capítulo 40

Narra Aida
No puedo creer que Rogelio hiciera esto
– Aida: ¡¿Donde esta Alba?!
– Laura: Salió corriendo
– Raul: Debemos encontrarla
¿Donde habrá ido? Mierda no por favor no
– Aida: ¡Raul!
– Raul: ¿Que?
– Aida: ¡El lago!
–Elias: ¡Joder!
Subimos rápidamente a la camioneta y vamos hacia al lago, al llegar la veo flotando en el fondo, bajo rápidamente y entro por ella
– Aida: ¡Alba!
Elias y Raul me ayudan a sacarla
No se en que momento Carlos ha llegado
– Carlos: ¡Alba despierta!
– Raul: ¡Alba!
–Laura: ¡No joder no!
– Aida: Mi amor por favor despierta
Noto la mirada de Carlos al escuchar lo que he dicho pero ahora no me importa nada más que ella este bien. Comienzo a darle primeros auxilios
– Aida: ¡Vamos mi amor abre los ojos!
Sigo intentando pero nada
– Elias: Aida
– Aida: Por favor mi amor despierta tienes que despertar
Le doy respiración boca boca
– Aida: Por favor mi amor no me dejes
Le sigo dando respiración boca a boca hasta qué logra sacar toda la agua que ha tragado
– Alba: Aida
– Aida: Aquí estoy mi amor aquí estoy
Siento que mi alma ha vuelto a mi cuerpo
– Carlos: Debemos llevarla a la casa
Raul: Llamaré a un médico
La subimos a la camioneta y la llevamos de vuelta a la casa, la subimos a la habitación y la arropamos con ropa caliente
– Alba: Estas aquí
– Aida: Si mi amor aquí estoy
– Alba: Yo no hice nada lo juro
– Aida: Te creo Alba te creo
La abrazo aferrandome a su cuerpo
– Aida: Perdóname por favor perdóname jamás volveré a desconfiar de ti
Mis lágrimas comienzan a derramarse imaginar perderla me ha aterrado no puedo estar sin ella. Después de un rato el médico la termina de revisar y con suerte todo esta bien, durante la revisión Alba se ha quedado dormida
– Doctor: Debe estar en reposo y comer bien para recuperarse
–Aida: Yo cuidare de ella muchas gracias doctor
– Doctor: De nada cualquier cosa llámenme
El doctor sale de la habitación y yo me acerco a ella para tomarla de su mano
– Aida: Te amo tanto mi amor por favor perdóname
Se abre la puerta y entran los chicos
– Elias: Nos hemos encontrado al doctor
– Aida: Con suerte esta bien
– Raul: Dios que susto nos ha dado
– Aida: Mañana despertará ahora tiene qué descansar
– Laura: Carlos está afuera
Se ha llegado el momento de hablar con él
– Aida: ¿Pueden quedarse con ella? Ire hablar con él
– Elias: Claro
– Raul: Suerte Aida
Salgo de la habitación y lo veo sentado en el suelo así que me siento a un lado de él
– Aida: Hola
– Carlos: Hola ¿Como esta?
– Aida: Estará bien solo fue el susto
– Carlos: Gracias a dios
– Aida: Carlos
– Carlos: La amas
– Aida: Si Carlos la amo se que debi decírtelo desde antes
– Carlos: No hace falta que me lo dijeras Aida yo ya lo sabia
– Aida: ¿Que? Pero ¿Como?
– Carlos: Notaba como la mirabas a mi jamás me miraste como lo hacías con ella esa mirada decia a gritos lo que sientes por ella algo que yo nunca pude lograr
– Aida: Carlos perdóname por favor te juro que intente enamorarme de ti te lo juro pero no pude
– Carlos: No tengo nada que perdonarte Aida yo no puedo obligarte a amarme y no planeo impedir que tu y mi hermana esten juntas no pienso perder a mi hermana de nuevo y amarte también es dejarte ir para que seas feliz
No aguanto más y mis lagrimas comienzan a salir solo me lanzo a abrazarlo Carlos siempre siendo una gran persona merece ser feliz con alguien y yo lo voy ayudar para que sea feliz
– Carlos: Tal vez no fuimos muy buenos novios pero podemos ser muy buenos cuñados
– Aida: Por supuesto que si claro que si