Capítulo 6 ~Closer

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Cuando abrí mis ojos,ya era de día.Extrañamente,estaba muy calmada y relajada.Toda la tensión y tristeza,había desaparecido.
Aún estaba muy dormida,así que me desperece lentamente y fue entonces cuando lo noté.Él seguía pegado a mí.Su respiración era suave y sus labios estaban ligeramente entreabiertos.Noté que había pasado su brazo,rodeando mi cintura y de esa manera, me sujetaba suavemente,atrayendome más hacia él.
No pude sino menos que sorprenderme ante la notable cercanía.
Había abrazado muchas veces a mi hermano martin,sí,pero en esta ocasión no era lo mismo,pues jamás había compartido ese tipo de cercanía con ninguna otra persona.Aunque dudé algunos instantes de éste último término.
Me incorporé un poco lentamente,apoyándome sobre uno de mis brazos ya flexionados.

-Qué pestañas más largas-pensé sin dejar de mirarlo y una espontánea sonrisa surcó mis labios.

Si bien Nathan se veía como un humano y se expresaba como tal,no lo era.Aquel joven era mi mascota.
Reparé en lo extraño que eso sonaba,arqueando una ceja.Moví mi cabeza de un lado hacia otro,negando,procurando desechar ese pensamiento.
Luego,volviendo al tema inicial,busqué entre mis pensamientos tratando de descifrar qué es exactamente lo que era él.

-...Un nagual...-murmuró de pronto el castaño en un susurro,apegándose más a mí,pero sin dejar de abrir sus ojos.Como si buscara mi calor.Y hundiendo su cabeza en mi cuello,lo besó.
El sentir sus labios oprimirse delicadamente contra la delicada piel,me produjo en exquisito choque de electricidad.A lo que reaccioné, pegando un respingo.
Acto seguido me llevé una de las manos al lugar dónde me había besado previamente y volví a observarlo.Él no se había inmutado ante mi sorpresa y seguía tan dormido como en un principio, acomodándose,y encargadose de ocupar así toda mi cama.
Me incliné un poco hacia adelante,me detuve a continuar inspeccionándolo.Qué apacible lucía con una sus facciones relajadas,me agradaba la expresión de inocencia que mostraba su rostro.
Y la sencillez y seriedad con la que se expresaba.Recordé entonces que hacia tan solo momentos antes,él había respondido una de las preguntas que habia formulado mentalmente.Me pregunté entonces,si era posible que él pudiese leer mi mente percatándome de que era una posibilidad.Reí irónicamente.

-Como si la situación no fuese lo bastante extraña ya-pensé suspirando.

Me levanté de la cama,luego de haberme zafado,no sin algo de esfuerzo,de su agarre.Y apoyando mis pies descalzos en la cálida madera que tenia por piso,caminé hasta la cómoda y el armario.Después de todo,ya había ananecido y aún era día de semana.
Estirando mis manos,sujeté el pequeño picaporte del armario,tiré hacia afuera y descolgué el uniforme exquisitamente plegado.El clima aquella mañana estaba inusualmente fresco.

-Y la habitación aún se mantiene cálida-pensé hacia mis adentros.Si lo pensaba mucho más,debía irme a cambiar al cuarto de baño,ya que eso sería lo correcto.Pero mi pereza por las mañanas sumado a que no me agradaba sentir frío me hicieron quedarme y tomar el riesgo.
Observé varias veces por encima de mi hombro,notando que él aún estaba genuinamente dormido.Fue entonces cuando me relajé tan sólo un poco.

Me estaba por abrochar el corpiño cuando oí un chasquido a mis espaldas y acto seguido,sentí unas manos rozando la piel de mi espalda y cintura.Yo sabía muy bien a quien pertenecía ese roce.Un intenso rubor cubrió mis mejillas y sintiéndome muy nerviosa por el contacto exclamé:

-¿¡Nathan pero que estás haciendo!?

Me sentía demasiado avergonzada.Él debería notarlo,¿no?

Nathan observó el reflejo que le brindaba el espejo de cuerpo entero que había en mi cuarto,en una de las esquinas.Volviendo a observarme sentí como sus manos comenzaban a deslizarse,en un movimiento descendente.Luego sentí sus manos grandes acariciando mi cabello.

Mi amante NocturnoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora