Una deliciosa sensación de calidez recorría el cuerpo desnudo de una menuda omega sobre la cama, sensación que no querría que termine. Estaba demasiado a gusto, pero nada dura para siempre, su momento de felicidad fue interrumpido por voces agudas y risas molestas, seguramente de infantes.
-Bajen la voz mocosos!-Grito desde el lugar acolchado en el que estaba recostada, eran flores de cerezo según le indicaba su desarrollado olfato, más sin embargo las risas no secaron, así que tuvo que dejar la comodidad en la que estaba e ir hacia esas risas.
Había una enorme colina, en la punta podía vislumbrar un árbol resplandeciente, subió la colina y esa acción fue más rápido de lo que pensó, al llegar al árbol pudo ver tres frutos dorados, eran duraznos y de estos salían las risas, tres risas diferentes venían de duraznos dorados resplandecientes.
*Ring Ring*
Sonó la alarma despertando a la pequeña omega, la calidez no disminuyo, el calor venía del cuerpo desnudo de Jimin que estaba pegado a su cuerpo y la sostenía con deseos de no soltarla como si temiera que se la arrebataran en un momento de tan baja guardia como lo era dormir.
Tomó el celular para apagar la alarma y grande fue mi sorpresa al ver que hora era, llegarían tarde al colegio. Faltaba muy poco para terminar el ciclo de último año así que no debían llegar tarde. Se gire para despertar a la de pelo negro como el carbón, su rostro es demasiado hermosa según su percepción y de godos los que la vieran, pero más que un rostro ella veía al amor de su vida, aún no puede creer que sea suya.
-Cielo... Despierta, son las 7:30 y debes ir a casa- Se quejó y sus brazos abandonaron el menudo cuerpo de la omega.
-Cinco minutos más por favor-Gesticulo con voz gruesa.
-Fuiste tú la que aplazó la alarma... Acaso quieres que mi madre llegue del trabajo y te encuentre aquí?- Con solo mencionar a la alfa mayor fue suficiente para que la besara y sé sentara en la cama buscando su ropa.
Las madres de la omega no estaban en casa, ambas eran trabajadoras del área de la salud, medicina en diferentes ámbitos y debido a que estaban vinculadas siempre les daban turno juntas como a cualquier otra pareja vinculada, no demorarían en llegar y específicamente la madre alfa ponía nerviosa a Jimin.
Reí en voz alta al verla buscar su ropa desesperadamente, Ay~ como amaba ese trasero.
-Listo, Cariño vendré por ti para ir a la clase ve a alistarte-Se acercó a besarla nuevamente.
-No te pregunte como estas, ¿Fui muy brusca?-se notaba la preocupación en su voz.
-Dolió, pero no sangre así que no hubo desgarro, fuiste muy cuidadosa, amor eres un sol, la mejor alfa del mundo mundial-gesticulo en voz aniñada como tenía acostumbrado a hacer en momentos íntimos entre las dos y le sonrió ampliamente para que viera la veracidad de sus palabras y dejara de preocuparse, la preocupación abandono su mirar.
Se besaron como por veinteava vez y salió de la habitación lila, una vez salió del todo se escuchó la puerta de abajo ser cerrada. La única en la habitación sé lento de la cama para arreglarse en tiempo récord, estaba un poco adolorida lo que le recordó que debía usar una loción que camuflara su aroma, normalmente al tener sexo con un alfa su aroma se penetra mucho más que con un abrazo así que es fácil saber si alguien tuvo sexo contigo a menos de que cubras las evidencias.
Se puso el uniforme, la loción, acomodo mi cuarto y cambio las sabanas, bajo a la primera planta a preparar el desayuno, le dolían los músculos de la cintura para abajo, pero era un dolor muy satisfactorio, como cuando se hace ejercicio.
Preparo unas tostadas con aguacate en puré y pimienta, unos huevos cocidos, tocino freidora sin aceite y un café. Tener padres médicos es sinónimo de buena alimentación en casa.
El ruido de unas llaves y la puerta abriéndose le indico que sus madres habían llegado, recogió los utensilios que ensucio y fue a recibirlas.
-Princesa- Saludo mamá con voz cansada, le abrazo y beso su mejilla.
-¿Cómo les fue?-
-Muy bien mi cachorra, hubo muchos partos hoy y todos con éxito.
-Me alegra mami -Le sonrió, la omega mayor amaba a los niños y se había encargado de crear políticas para asegurar la vida y salud de los omegas en embarazo y durante su parto reduciendo las tasas de mortalidad de forma significativa, muchos otros hospitales empezaron a implementarlo por lo que era muy respetada y considerada como una de las mejores obstetras del país.
-Hay una alfa que dice esperar a mi pequeña omega-Suspira con pesadez.
-! Madre!-Se acercó a saludarla también, beso la frente de la adolescente y le dio esa mirada de "Mi bebé esta cada día más grande" -Y si paras de creer cielo? Ummm-
- Madre tú siempre serás la primera, nadie va a robar tu lugar así crezca y me case- Le miro con horror por lo que no pudo evitar soltar una carcajada.
-¿Por qué estamos hablando de matrimonio?-
-Ya basta mamá celosa, tu hija llegará tarde- beso la frente de su niñita frente - Ve a la escuela cielo.
-Las amo mucho, abrazo grupal-
-Les dejé el desayuno hecho, descansen y nos vemos después de salir de la última clase-
Salió de la enorme mansión y camino hasta el auto de Jimin, se saludaron con un beso y fueron rumbo al colegio no sin antes pasar por una farmacia... Habían olvidado usar condón.
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Cada Mentira Tuya Me Mata♤WINRINA♤ Omegaverse
FanfictionKarina alfa y Winter omega. Todo inicia con ellas en último grado por lo que sucede un embarazo adolescente ,el sueño de Karina siempre fue ser policía es muy buena hacker, demasiado inteligente y analítica así que la asignan como policía incubierta...