HE - JUNG HOSEOK

15.

¿Qué había pasado?
Me sentía mareada, no veía nada, y podía sentir ruidos de máquinas y cadenas a mi alrededor.

Hasta que pensé en él. Hoseok.

—¡Ayuda! ¡Ayuda! — logré gimotear. Me dolía la garganta, de sed, cansancio, sangre no sé. Y estaba amarrada con las manos atadas a algo en mi espalda. Yo estaba sentada en un suelo frío, pero algo habían puesto abajo, mis pies también estaban atados.

Sentí que alguien se quejaba a mi lado.
—¿Hobi? — dije, reconociendo su voz.

—¡Eun ahh! — exclamó con su voz parecida a la mía —¿Puedes verme? — preguntó.

—No, estoy atada y tapada de la vista.

—Estamos cerca. — dijo. — Dime ¿Estás bien? ¿Te golpearon? — dijo con voz quejosa.

— Estoy bien. Tú ¿Estás bien? — pregunté con preocupación.

—Sí, solo dolor de espalda. Creo que me golpearon.

—Nos secuestraron — afirmé.

Mi corazón latía con toda fuerza. No sé si quedaba adrenalina en mí.

—ASI QUE DESPERTARON LOS HIJOS DE PAPÁ.
—dijo un hombre con voz despectiva y grave.
—Llevan aquí 4 horas. — Comenzó a soltarnos. Nos quitó las vendas. Llevaba una máscara de Hulk. Y guantes quirúrgicos.
—¡Seré su niñera! Si quieren ir al baño está al frente. — se marchó. —No intentes nada de héroe — le advirtió a Hobi antes de irse.

—No dejaron unas botellas de agua y unas barras cereales — le dije a Hobi muentras frotaba mis muñecas que dolían.

—¿Estás bien? — dijo en modo preocupado tomando mi rostro entre sus manos, revisando con su mirada cada parte de mí.

—Estoy bien ¿Okey? ¿Tú?

—Me duele un poco la espalda, pero estoy bien.
—Hobi se paró con dificultad y no afirmó bien su pierna izquierda. Se quejó disimuladamente, y me trajo la botella de agua.

—¿Estás bien?

—Sí, solo estoy acalambrado.

(...)

La noche había llegado y no sabíamos el Por qué de nuestro secuestro. Hasta que el Hulk nos acercó kimbap y dijo "supieran que la hija del fiscal está comiendo agua y kimbap" y se retiró.

Eso llamó mi atención.

—Hobi — dije mientras éste revisaba con ojo meticuloso cada kimbap y cada botella que estuviera correctamenty cerrada.

—¡Hmm! — me puso atención.

—Creo que estamos aquí por mí.

Su cara cambió —¿Por qué lo dices?

—Dijo "la hija del fiscal" ¿No te parece extraño?

—Tenemos que buscar la forma de salir de aquí — abrió sus ojos. — Por eso come. Debes estar fuerte. — me tendió un kimbap y agua.

—¿Que planeas? No sabemos cuántos hay.

—Este es bueno, es joven, podemos negociar.

—¡Qué dices! No es una película Hoseok.

—Algo se nos ocurrirá, ahora ¡Ven! — me llamó con su brazo para abrazarme. Ambos estabamos  sentados en una manta en el suelo con la espalda apoyada en la pared de frío cemento.

Me acurrucó entre sus brazos. Y sentí su calor. Y aunque no era el momento, sentí mariposas.

—Eun — susurró.

—¿Mm? — dije sabiendo que su barbilla estaba sobre mi cabeza.

—Tuve celos de verte con Nam.

—¿Qué? — reí de forma silenciosa. Ya estaba oscuro y solo entraba una luz muy pequeña por una venta de unos 30 x 30 cms.

—Desde que empezaste a gustarme sentí celos de Nam — sonrió — Ahora también de Taehyung, aunque es mi primo, sé que gusta de ti.

—¿Qué? — parecía tonta, pero era la única palabra que salía de mi boca mientras sonreía.

—Eso. Le gustas a Taehyung, lo conozco de pequeño. He visto como te mira. Es callado, pero expresa mucho.
—Casi me da algo cuando te besó en la frente en casa de Jimin — añadió riendo.

—Pero tu...

—Te besé.

—Hobi...

—Te amo Eun. Saldremos de aquí y serás mi novia.

Lo que pasaba dentro de mi no podía explicarlo.
Comenzó a acariciar mi cabello de forma protectora y paternal.

—¿Y si eres mi novio desde hoy aceptarías?

—Hoy es nuestro día uno. — besó mi frente.

Y la verdad. Tenía miedo de perderlo o yo perder la vida aquí.
Nos quedamos dormidos.

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Estoy viviendo días difíciles personales. Perdón la demora.
Espero comenten y le den amor a la nove. Trataré de seguir escribiendo.
Comenten así sonrio con ustedes un rato.
Pronto habrá nuevo cap.
Mini maraton 1/2.