En cuanto la llave aterrizó en la mano de la stripper, ésta abrió la puerta rápidamente y bajó las escaleras a un paso decidido, pero una mano rodeada en su antebrazo derecho le hizo frenar en seco.
"Dame tu número" murmuró Ashton.
"No"
"Vamos, dámelo. No podré llamarte entonces, y quiero tenerte cada fin de semana encima de mi entrepierna"
Janice suspiró y sacó un pequeño papel por su bolso, entregándoselo al joven caprichoso a mala gana.
Éste sonrió en cuanto vió el papel pero se quejó al ver que solo era una tarjeta del nombre de su local.
"He pedido tu número, no tu tarjeta"
"Si lo quieres, gánatelo"
Y dicho eso se fue de la fiesta de un portazo, dejando al rubio con la impotencia de no conseguir su número y con una enorme erección en sus pantalones.
"Bueno, pues vamos a bajar esto" murmuró dirigiéndose hacia Andrea.
andrea eres su puta ahr
