Abismo (zhongven-omegaverse)

°Cap 10°

Recuerdan esos laboratorios de las películas donde se llevan a cabo experimentos súper secretos del gobierno, pies esperó que sí porque parecía que estaba en uno de esos lugares, pasillos blancos con guardias y cámaras de seguridad por todo el lugar algunos hombres con bata claramente científicos, y que por ahora se encontraba en una habitación con otras dos personas. 

Una joven madre a su lado intentaba consolar a su pequeño hijo de aproximadamente unos cuatro o cinco años igual que Ganyu los dos tenía el cabello de color violeta él pequeño siendo una mini copia de su madre, se sentía tan vigilado que cualquier cosa que hiciera sería usado en su contra como en un juicio asi que no se atrevio a interactuar con ninguno de los dos limitandose a ovservalos.

Fue escoltado a una pequeña habitación completamente de blanco con una cama, un pequeño mueble y dos cosas que resaltaban por su color negro, un reloj puesto en lo más alto de la pared, una televisión lo suficientemente pequeña y vieja para estar sobre el mueble en frente de la cama que además no sintonizaba ningun canal y quedaba en la fastidiosa estática, era una especie de obra de arte que tenía la intención de volverlo loco, tenía que felicitar a su creador por que con solo pisar ese lugar ya quería escapar. 

El tiempo parecía no avanzar aún si el reloj movia sus manecillas adecuadamente, y así transcurrieron dos días en los que le pasaron la comida por una pequeña rendija por debajo de la puerta, el tiempo podía pasar más lento que en el hospital pero su comida era definitivamente era mejor le daban dos comidas al día a la misma hora, las comidas podía ser variadas desde comida casera a comida rápida y eso no lo hacía menos sospechoso posiblemente lo estuviera envenenado o drogado como lo fue en la quinta comida que con solo terminar de comer se desmayó en la cama dejándolo bajo un profundo sueño. 

Pasaron alrededor de unas dos horas para que despertara con un agudo dolor de cabeza y cuerpo, ya no tenía la misma ropa ahora llevaba puesto una bata de muy mal gusto. Unos sollozos lo pusieron alerta girando su mirada a la esquina de la habitación encontrando a el pequeño infante de la otra vez, el ambiente empezó a tornarse incómodo ¿Cuál era la necesidad de dejarle ese mocoso? Acaso recurrieron a la idea de que los omegas eran los encargados de los cachorros. 

El mocoso se quedó mirándolo fijamente mientras él se acercaba para saber si recordaba cómo llegó ahí pero su mano terminó siendo recibida mordida que por poco la hacía sangrar, optó por esperar a que tomará a la iniciativa de acercarse si lo obligaba a que se acercara terminaria en un berrinche que no sería capaz de aguantar.

Un plato de comida paso por la pequeña rejilla de la puerta, jamas se dejaria de sorprender sobre lo que pasaba por la mente de los que le eligen la comida, la comida de hoy era dos cajitas feliz  y el pequeño quien estaba más cerca de la puerta tomó la delantera para abrir la caja y directamente tomar el juguete que llevaba, el no se quedó atrás y tomó la otra caja dejando el juguete fuera de su empaque, se sintió incómodo por la intensa mirada del niño pues sabía perfectamente el mensaje que quería transmitir, realmente quería el juguete el cual entrego para asi tal vez así podría lograr que la atmósfera sea menos tensa.

Después de estar días de estar encerrado y de mejorar gradualmente la comunicación con su compañero con el cual jugaba con los pequeños juguetes no lograba sentirse tranquilo, se preguntaba qué habrá pasado con la mujer de la otra vez y con Zhongli que lo dejó confundido con el beso de le dio antes de irse, ¿De verdad sentía algo por él? 

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Peleaba día y noche, no podía descansar un momento sin que le metieran algún tipo de sustancia extraña en su cuerpo siempre que podían lo hacían pelear con la joven mujer de nombre Ei, ambos tenían el cuerpo lleno de moretones aún si tenía la capacidad de crear escudos su poder elemental era más reducido que un usuario de visión gracias a las muñequeras de metal solo para terminar con el cuerpo entumecido de los choques  eléctricos que recibía.