Carta 2

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 Querido ser humano:         

 No tenía intención de volver a escribirte, pero tengo la necesidad de hablarte, y esta es la única forma en la que puedo mantener un contacto contigo, aunque sea pequeño y no reciba nada por tu parte. De hecho, pienso en si mi última carta llegó a tus manos o se quedó por el camino. Yo, prefiero que se haya quedado perdida, ya que si no es así, significaría que has pasado de mí, y me duele pensar eso.

 Pero el motivo principal por el que te escribo no es ese. Lo hago para recordarte que hoy es San Valentín.

 Hoy, iríamos al parque, a mirar las estrellas mientras estamos apoyados el uno en el otro. Y luego, tras una cena en el mejor restaurante de la ciudad, iríamos a tu casa, a ese lugar donde se creó nuestra historia, donde ocurrió todo por primera vez; y la mejor parte de todas, es que lo volveríamos a recrear todo de nuevo. Todos esos besos, todas esas caricias, todos esos "te quiero".

 Pero no ha pasado así. Tú te fuiste, te marchaste y me dejaste aquí sin decir adiós ni explicarme el porqué. Y ahora, esa casa en la que se crearon tantos recuerdos inolvidables y tantos momentos felices está vacía. Puede que incluso, esté habitada por otras personas y estén creando allí su propia historia, igual que lo hicimos nosotros, aunque espero que su historia acabe mejor.

 El caso, es que te sigo echando de menos, puede que incluso más que en mi última carta, y es esa la razón por la que este ha sido el peor San Valentín de mi vida. No he podido estar ni un solo momento sin pensar en ti, porque te veía en todos lados: veía nuestra historia en las películas que suelen echar en la televisión por estas fechas, veía nuestros ojos de enamorados en las parejas que paseaban por la calle o que cenaban en algún restaurante, veía tu sonrisa en aquellos chicos que acompañaban a sus novias a su casa. Y es que, aunque tú no estés, te sigo sintiendo conmigo. Pero eso, no es nada bueno.  Así nunca podré rehacer mi vida, nunca podré conocer a alguien que me ame de verdad, ya que nunca podré deshacerme de este amor que siento por ti.

 Por eso, te pido que vuelvas, que vuelvas conmigo, que dejes ese "asunto" por el que te fuiste; y aunque sepa que va a ser en vano, te pido sobretodo, que vuelvas a enamorarte de mí una vez más y que me hagas la más feliz de todas.

 Así, como la última vez, me despido con una lágrima cayendo,  y que sepas, que aunque yo no quiera, hay una parte de mí que insiste en que te escriba.


 Atentamente: otro ser humano.

Cartas para un ser humanoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora