Nota 007
Caminamos juntos por aquel jardín recordando cada promesa que nos hemos hecho, desde la de ser inseparables hasta la de amarnos por siempre...
Nos detenemos junto a la gran fuente y nos sentamos a la orilla de esta mirándonos a los ojos, los tuyos son azules, o quizá verdes, un poco de los dos, tienen un brillo hermoso, debo admitirlo, los míos no son nada especiales a mi parecer, pero a ti te encantan, pues me dices que te recuerdan el Café de cada mañana; el silencio entre nosotros nunca ha sido incómodo, pero por alguna razón siempre provocas que me sonroje ante esa sonrisa encantadora que solo me das a mi...
Te inclinas sobre las rosas que están a un costado tuyo y tomas la que a tu parecer es la más hermosa, pero no tan hermosa como yo, es lo que siempre dices, la hueles y luego me la ofreces con una mirada única en tu rostro, sonrío y tomo la rosa roja que pronto terminaría marchita en algún lugar del castillo, pero eso no importa, porque estamos seguros que lo que sentimos por el otro no se quedarán marchito en cualquier rincón, lo de nosotros durará, pase lo que pase.
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UMBRA
De TodoEn este libro la autora dejó cada lagrima y cada rastro de odio que no quería tener en su corazón o que fueran parte de su alma. Plasmó todo entre lágrimas o simplemente sintiendo cómo el corazón se le apretaba. Habla de un proceso, de todo lo que t...