¿Por qué hay tantos malditos-" justo antes de que los botones de palabras escaparan de los labios rojos e hinchados, volaron por todas partes con un fuerte tirón. Los dedos bronceados estaban cansados de andar a tientas con las pequeñas creaciones negras, casi imposibles de deshacer del infierno. Ahora que los obstáculos estaban fuera de su camino, la tela verde claro se abrió revelando la piel más hermosa, deliciosa y pálida que jamás había visto.
Debió haber estado mirando durante demasiado tiempo, porque un suave gemido escapó de los labios del otro hombre y el hombre se apretó contra su muslo que estaba acurrucado entre las piernas separadas del hombre pálido.
"Estás impaciente, Malfoy." El hombre de cabello oscuro chasqueó la lengua con desaprobación.
"Difícilmente Potter, he esperado bastante tiempo." Draco sonrió mientras tiraba del botón negro del hombre para desabrocharlo de la cintura de sus pantalones de vestir. En un movimiento fácil y fluido, Draco sacó el artículo en segundos, revelando exactamente lo que esperaba.
Ondulaciones de los músculos de años de entrenamiento, pezones oscuros enarbolados por la atención, una capa de cabello que se arrastraba hasta los jeans que colgaban de sus caderas y piel bronceada por horas bajo el sol.
"Joder, sabía que estabas caliente". Draco dijo con total naturalidad antes de que los labios rojos volvieran a estar sobre los suyos, dientes y lenguas chocando en un frenesí.
Las manos de Harry se movieron sobre el pecho pálido y empujaron el botón verde claro hacia abajo de sus hombros y brazos hasta que la tela ofensiva se acumuló a sus pies.
Harry no quería hablar. Él quiere follar. Por una vez en su vida no quería que fuera planeado, calculado, en un momento determinado o jodidamente aburrido. Quería una cogida caliente, sin pensar, apasionada.
Harry besó la línea de la mandíbula de Draco mordiendo cualquier piel que pensó que se veía demasiado pálida para su gusto. Bajó hasta su cuello escuchando los gemidos que hacía el rubio mientras chupaba una sección sensible entre sus dientes dejando un moretón morado a su paso. Sus manos encontraron el botón de los pantalones de vestir de Draco, tiró con fuerza, desabrochando ese botón también.
Draco gruñó, "¡Potter! Has logrado destruir mi equipo de trabajo favorito en cuestión de minutos". Sus ojos grises se encontraron con los verdes cuando sintió que los pantalones de vestir se deslizaban por sus piernas.
Harry los pisó ayudando a Draco a liberar sus piernas antes de patearlos en algún lugar detrás de ellos. "Eres un maldito mago Malfoy. Un movimiento brusco y rápido y tu ropa de vestir perfecta, adecuada y cara quedará como nueva".
Hizo una pausa con una media sonrisa, "excepto que cada vez que los uses después de esta noche me imaginarás dentro de ese apretado culo tuyo". Harry estaba complacido cuando sintió la polla de Draco palpitar a través de sus calzoncillos contra su pierna.
"Tienes una boca sucia Potter." Draco gimió cuando el hombre más alto cayó de rodillas frente a él. Draco se apoyó contra la pared cuando sintió el aliento de Harry sobre su cubierta erección.
"¿Eso significa que quieres que me detenga entonces?" preguntó Harry con los ojos llenos de lujuria, un brillo travieso brillando a través de él. Harry tenía los dedos en la parte superior de sus calzoncillos, jugueteando con el elástico que encontró allí.
Draco lo miró, con el pecho agitado, los nervios hechos un desastre. ¿Qué carajo estaba haciendo ahora mismo? ¿Realmente iba a dejar que el salvador de todo el mundo mágico lo jodiera? ¿Cómo llegaron a este punto? ¿Cómo una noche tranquila en la gala del ministerio se convirtió en Harry Potter medio desnudo a punto de poner su polla en su hermosa boca?
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Expectativas
FanfictionDespués de la guerra, la vida de Harry debería ser suya. Una vez que se da cuenta de que toda su vida está planeada, tiene un colapso y decide hacer su propia elección para una noche. No sabía que cambiaría el plan de toda su vida.