La enfermedad de las rosas (Wenclair)

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Corazones las traducciones estarán en los comentarios 😘.

Una caricia en el alma, así describiría Wednesday ese momento, su melancólica y atormentada alma estaba recibiendo la caricia más acogedora que podría existir en el universo y sabía que nada ni nadie más que Enid Sinclair sería capaz de hacerla sentir así.

-Willa-. La rubia frotó su rostro entre el cuello y el hombro de la gótica, sintiendo desde su pecho la necesidad de bañarse del aroma tan característico de la pelinegra.

El momento se vió interrumpido por un golpeteo en la puerta de la habitación, ambas chicas gruñeron al unísono por el indeseado visitante que se hacía notar del otro lado de la puerta, Enid soltó una tierna carcajada por la situación, provocando así un molesto cosquilleo en el estómago de la gótica y lentamente la rubia comenzó a alejarse del cuerpo de su amada para abrir la puerta del cuarto.

Su nariz se arrugó por unos segundos mostrando desagrado hacia las personas que se encontraba del otro lado de la puerta, pero su brillante sonrisa apareció en un instante logrando disimular el pequeño gesto que había hecho inconscientemente.

-Hola, ¿Qué hacen aquí?-. Preguntó hacia ambos chicos que cargaban grandes ramos de rosas en sus manos.

-¿Podemos pasar?-. Fue la única respuesta que obtuvo de Xavier quien buscaba con su vista a Wednesday por detrás de ella.

-S-sí, claro-. Algo que caracterizaba a Enid Sinclair era su amabilidad y su necesidad por quedar bien con la gente, por lo que, a pesar de no querer a esos chicos ahí en ese momento, simplemente se hizo a un lado dandoles el paso. Xavier casi corrió hacia la Addams a penas tuvo el paso libre y Ajax por su parte solo se acercó a la rubia y depositó un beso en su mejilla.

-Estás son para tí-. Habló entregandole el ramo con rosas rojas.

La lobizona lo aceptó sin problemas, pero no podía dejar de hacer comparaciones entre el ramo de flores que le había regalado su compañera esa misma mañana, Wednesday tenía razón, sus flores era más bonitas que cualquiera que Ajax pudiera darle.

Ajax caminó hacía la cama de la lobizona y se sentó allí mientras miraba con ojos de adoración a la rubia esperando que lo siguiera y se sentara junto a el, pero Enid solo se acercó unos cuantos metros evitando sentarse en la cama para mantener una distancia prudente entre ellos.

-Veníamos a invitarlas a una cita... como amigos, claro-. Le dió una pequeña mirada de complicidad a Xavier para que confirmara sus palabras.

-Síp, ¿Qué dices Wednesday?-.

La Addams sintió la mirada de todos los presentes sobre ella, no quería aceptar, ellos no eran sus amigos, además sabía bien las intenciones de ambos chicos y eso le desagradaba, pero por otra parte si ella no aceptaba lo más seguro era que Enid sí lo hiciera, no era por decirle idiota pero a la lobizona le costaba captar las segundas intenciones de la gente y ella no estaba dispuesta a dejarla sola con ese zopenco.

-Las salidas para convivencia entre pares me desagradan, sus citas amistosas de adolescentes no se acercan ni un poco a mis intereses, pero supongo que por esta vez podría considerar la petición-. Habló mientras miraba directamente a la lobizona, quién a pesar de la sorpresa en su rostro sonrió tiernamente y levantó sus pulgares hacía ella felicitándola por aceptar la salida.

-Entonces... ¿Amigos?-. Dijo Xavier entregandole el ramo lleno de rosas negras.

Wednesday lo miró por un intante sin querer tomar el burdo obsequio del artista pero cuando su mirada se dirigió a Enid quien la miraba con suplica para que aceptara, no pudo evita soltar un suspiro de resignación y tomar el ramo desde las manos del chico.

-No te hagas ilusiones-. Fue su respuesta al ver la amplia sonrisa del chico.

-Nos vemos a las 6 en la salida, iremos al Veleta, sé que te gusta el café de ese lugar-. Dijo el chico con gran felicidad mientras volteaba al gorgona para señarle con la cabeza que era momento de irse.

-Nos vemos Nid-. Dijo el chico volviendo a besar la mijilla de la rubia para después seguir a su amigo hasta la salida del cuarto.

En cuanto desaparecieron por el pasillo Wednesday inmediatamente se dirigió a cerrar la puerta y antes de siquiera poder voltear ya tenía a Enid abrazandola por la espalda.

-Willaaaa, gracias por aceptar la salida-. Dijo finalmente soltandola para permitir que la pelinegra volteara a verla.

-Quiero que quede algo en claro Enid, solo acepté para no dejarte sola con ese cenutrio, se quell'idiota ti si avvicina troppo, morirà in men che non si dica, non gli permetterò di corteggiarti, nessuno tranne me può farlo-. Y así dejando a la lobizona completamente confundida y cautivada por su perfecto italiano fue hasta su ropero y sacó unas cuantas prendas para cambiar su ropa después de tomar una ducha.

-No sabía que hablabas italiano-. Dijo la rubia mirando atentamente cada movimiento de la chica.

-Hablo muchos idiomas Enid-. Respondió la gótica adentrándose al baño desapareciendo trás las puerta del mismo.

-Quizá debería aprender un poco de algunos-. Se dijo a sí misma la lobizona mientras se dirigía a su cama decidida a aprender algunas palabras en italiano mientras Wednesday se encontraba en el baño.

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Enid esperaba pacientemente la llegada de los chicos mientras observaba a detalle las facciones de la gótica, sin duda era bastante hermosa, su mente divagó pensando en que si le pidieran nombrar su facciones favorita de la pelinegra, no podría, su rostro era tan perfecto que nunca podría elegir solo una parte de el.

-Willa, nunca me dijiste por qué llegaste antes a la habitación-. Recordó Enid entre uno de sus tantos pensamientos.

-Sentí-. La pelinegra se frenó de golpe trantando de explicar algo que ni ella misma entendía y eso era algo nuevo, ella siempre entendía todo. -Sentí tu desesperación-.

Enid se quedó en silencio sin saber que responder, estaba sorprendida ante tal respuesta, nunca había escuchado sobre algún lobizon que tuviera una mate humana y a pesar de ser consciente de que su mate era Wednesday Addams, nunca pensó en la posibilidad de que el lazo se desarrollara igual que en una pareja de lobizones, simplemente asumió que por ser de diferentes especies el lazo entre mates sería diferente, "defectuoso".