❦ 04 • Una milagrosa segunda oportunidad ❦

247 116 298
                                    


❦ CAPÍTULO CUATRO ❦

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

CAPÍTULO CUATRO 

Puede que el destino no tenga absolutamente nada que ver en esto, pero ¡de que es una segunda oportunidad para hacerlo a mi manera!

❝Puede que el destino no tenga absolutamente nada que ver en esto, pero ¡de que es una segunda oportunidad para hacerlo a mi manera!❞

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

  Al parecer el infierno bajo la tierra si tiene nombre y es mucho más sencillo acceder a él de lo que cualquier pudiese imaginar. Según los humanos se le conoce como: «el Metro de Caracas»; y es un medio de transporte público dedicado para que una incontable cantidad de mortales sudorosos, apestando a comida grasosa, estiércol de ganado y demás aromas pestilentes se reúnan de manera... ¿voluntaria? Sí, no creo que haya algún tipo de canto de sirena que los atraiga.

Ellos solitos van e ingresan a un vehículo en forma de un monumental gusano de metal que transita a gran velocidad a diferentes destinos que están en la superficie.

Y por increíble que parezcan, la oruga formidable es bastante veloz, no tanto como yo en mis días dorados, por supuesto. No obstante, para haber sido algo creado por humanos, es ingenioso.

Es una lástima que no le haya implementado algún sistema de ventilación. Porque realmente se siente como si se estuviera en el mismo averno. Y no es que yo haya visitado ese lugar alguna vez. Puede que una vez estuve a escasos segundos de ir, pero soy un vampiro de tierras frías. Las altas temperaturas en la mayoría de casos, por no decir que siempre, son sinónimo de pegajosidad e incomodidad ocular.

Y aunque no percibo las temperaturas como otras criaturas, los vampiros nos sentimos mucho más a gusto en temperaturas bajas.

En esta ocasión solo he decidido seguir al humano, porque podría ser mi único aliado en estas nuevas tierras. Necesito recolectar la mayor cantidad de información antes de tomar decisiones y establecer metas realistas.

Cuando salimos del averno en que ese desquiciado mortal me metió, y yo más iluso lo dejé, me guió por los caminos de un laberinto que parecen ser avenidas y callejones. Pese a que el sol se ha ocultado desde hace mucho, la cantidad absurda de humanos que siguen despiertos es alarmante.

Manual para no morir desnutrido y sin glamourDonde viven las historias. Descúbrelo ahora