Capítulo 1. La primera vez.

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Isagi normalmente era un chico tranquilo, no bebía ni salía de fiesta. Le gustaba disfrutar de las cosas pequeñas, dar todo de su para cumplir su sueño de ser el mejor delantero del mundo. Pero eso cambio aquella noche, cuando la vida lo presento junto a aquel atractivo hombre.

Isagi caminaba alegremente junto a sus compañeros de equipo, las risas y sonrisas podían iluminar su día, se sentía más que feliz de haber logrado ganar su primer partido, y que mejor que junto a sus amigos. Y ahora, después de años de mantenerse alejado de la bebida, había aceptado salir a beber con ellos.

– Te gustará, Isagi, ya lo verás -el alegre castaño de rayos amarillos se acercó a él y lo abrazo amistosamente por los hombros- y nosotros te cuidaremos

– Gracias, Bachira.. supongo que está bien si solo bebo un poco..

– Solo espero que nuestra princesa no vaya a vomitar después de un trago -una pequeña rosita se escapó de los labios del peliblanco-

– ¡¡Cierra la boca, Nagi!! Seguro tu serás el primero en vomitar..

– Probablemente.. pero a mí no me tendrán que agarrar el cabello para que no se ensucie y se arruine..

– ¡Basta! -el musculoso pelinegro frunció el ceño- son un fastidio.. no se que hacen aquí si solo van a beber una copa y vomitarse..

– Ya déjalos, Barou.. son nuevos en esto, no todos tienen tu resistencia..

– Como sea.. -entró al lugar y caminó hacia la barra- pidan lo que quieran.. yo invito..

– ¡Que amable! -el pelirosa de largos y suaves cabellos lo abrazo y miró al bartender- yo quiero cerveza, por favor..

– Mm.. supongo que yo también -el azabache se sentó con cuidado y soltó un suspiro, desvío un poco su atención, su mirada se cruzó por unos segundos con la de un misterioso hombre-

– ¿Estás bien, Isagi?

– Si, descuida Bachira.. -sonrió- creo que.. estoy emocionado por el partido.. es el primero en el que juego, y ganamos..

– ¡Que no se te suba a la cabeza, novato! -el pelinegro le entregó la cerveza-

– No, no lo hará.. -tomó la cerveza y dió un pequeño trago- mghhh.. es.. amarga..

– Dios.. mejor iré a buscar chicas -el pelinegro dio un largo trago y se alejo-

– ¡Voy contigo! -el castaño corrió tras él y sonrió-

– Dios.. -soltó una risita y siguió bebiendo- esos chicos están locos..

– Hola.. -aquel misterioso hombre se sentó junto a él y alzo su copa-

– ¿Ah?.. -lo miró un momento y sonrió- ¿Es a mí?..

– Por supuesto que es a ti -sonrió- no todos los días se puede ver chicos tan lindos por aquí.. normalmente hay tipos raros o locos..

– Mmm.. -sus mejillas se encendieron y cubrió un poco su rostro- gr-gracias.. nunca me habían dicho que era lindo..

– ¿En serio? -sonrió y bebió el resto de su copa, hizo una señal al bartender- pues lo eres.. otra copa, por favor.. y sirvele una al muchacho..

– Ah, no.. no quiero abusar.. ni siquiera lo conozco..

– Bueno, soy Itoshi Rin, un gusto -sonrió y tomó las copas, le entregó una al azabache- ¿Puedo saber tu nombre, lindura?

– Yo.. -su rostro se puso completamente rojo, tomó la copa y dio un largo trago- mghhh.. soy.. Yoichi Isagi.. un gusto, Itoshi-san..

– Rin, puedes llamarme Rin -sonrió y bebió un poco de su copa- y dime, ¿Qué haces por aquí?.. no pareces el tipo de chico que venga a estos lugares..

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